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Año VII - Nº 371 - Uruguay, 01 de enero del 2009
 
 
 
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Mary Anastasia O'Grady

Se fue uno más
por Roberto Bogorja

 
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�������� Parecer�a que tan s�lo fue ayer, el d�a en que celebr�bamos el comienzo del a�o 2009.

�������� Sin ni siquiera darnos cuenta que inici�bamos el noveno a�o del nuevo siglo. Tanto fue as� que tampoco percibimos que ya el mismo se nos fue.

�������� Un fen�meno que nos est� sucediendo tanto a j�venes como a veteranos.� Se ha escuchado muchas veces de la gente mayor, que el tiempo parece transcurrir m�s r�pido para ellos que para los m�s j�venes. No obstante este a�o pareci� que ello no se cumpli�. Se fue r�pido para todos.

�������� Es que se trat� de un a�o muy especial para todos en el mundo, y muy especialmente para los uruguayos.

�������� A nivel mundial, partimos de fen�menos realmente incidentes en todos los confines del planeta. Sobre fines de 2008 se desata una de las mayores crisis econ�micas, que en mayor o en menor medida afectaron a los distintos pa�ses, pero en especial a aquellos altamente industrializados y desarrollados. Se temi� un desbarranque econ�mico mundial, sin embargo de aquellas nuevas econom�as (Brasil, Rusia, India y China), pareci� que s�lo Rusia se vio relativamente afectada, gracias a que un r�pido cierre en sus importaciones. En tanto las dem�s parecer�a que supieron salir adelante casi sin ajustes. Por otro lado los pa�ses emergentes o subdesarrollados, t�picos productores de materia prima siguieron igual. No as� con aquellos productores de alimentos, como el nuestro que pudieron continuar adelante, aunque con desacelerando, pues los precios de granos, carnes y otros alimentos, si bien bajaron, no generaron cat�strofes, pues el mundo sigue con hambre.

�������� En cambio el mundo industrializado tuvo que poner freno, porque lo que se afect� fue fundamentalmente el mercado de capitales. Fue as� que la mayor potencia, los Estados Unidos de Am�rica, y el bloque de la vieja Europa, sufrieron las consecuencias. Tambi�n pag� las consecuencias el mundo �rabe. Es que el petr�leo si cayo abruptamente. Seguramente si hici�semos un exhaustivo an�lisis, la crisis tuvo m�s que ver con un valor artificioso del petr�leo que con las inversiones inmobiliarias.

�������� Ac� en Uruguay, entre la crisis que viene y que no viene, se pas� el a�o econ�mico, como siempre haciendo la plancha y esperando que las olas no nos sobrepasen.

�������� Sin embargo el vendaval no fue econ�mico, sino pol�tico. El a�o fue enteramente dedicado a esta actividad, y tambi�n gran parte de los recursos econ�micos, humanos y mentales.

�������� Como es sabido, despu�s de que llega el �ltimo ciclista comienzan las actividades en el Uruguay. Y que mejor para comenzar que darnos de lleno en una campa�a pol�tica. As� empezamos a preparar las internas, pr�cticamente no qued� nadie ajeno a participar en alguna lista y a reclamar su derecho a ser candidato, presidencial, ministerial, legislativo, edil o convencional, o aunque sea como asesor. Todo dio igual. Aparecieron listas para todos los partidos y fracciones, reuniones, discursos, clubes, baluartes o comit�s, diarios, radios, peri�dicos, hojas, pancartas, carteles,� p�ginas web, e incluso mensajes de texto, y call centers, sirvieron como plataforma. Una parafernalia total, derroche econ�mico, descr�ditos y mal tratos a troche y moche. Discursos que apuntaban m�s a desacreditar al eventual oponente, compa�ero de partido. Propuestas m�s propias para la fase presidencial que para una interna.� Eso s�, surgi� un nuevo aditamento, la guerra de las encuestadoras, una feroz competencia para ver quien le embocaba en las cifras. Como si la estad�stica fuese adivinatoria y no una ciencia.

�������� As� se nos fue el primer semestre.

�������� Luego un breve receso, pues las vacaciones de julio, marcan un importante descanso para los escolares. Pero como los ni�os no salen s�lo, los padres tambi�n tomamos nuestro receso.

�������� Se nos vino agosto, que el fr�o, que la gripe A, que�, y as� encaramos hacia las elecciones nacionales. Mucho m�s no se pod�a hacer, ser�a un desatino hacer algo si no se tiene un panorama cierto de lo que puede ocurrir habiendo en juego dos modelos de pa�s tan diferentes.

�������� Con un Lacalle, con viento en la camiseta, ganador de las internas y con m�s votos que M�jica en el Frente Amplio, se vio ganador c�modo de las nacionales. Admitiendo que no en primera vuelta, pero si en segunda. Bajo su guardia, y aumento su vanidad. Dijo incoherencias, de esas que se pagan caro a la hora de pretender el voto. Cosas que un ex presidente, un hombre con experiencia, un bicho pol�tico, jam�s puede decir o incurrir. Tanto fue as� que pas� de l�der a segund�n, entrando en el juego que le propuso el Frente Amplio.

�������� Esto merece una reflexi�n aparte. El Partido Nacional, result� el gran triunfador de las elecciones internas. Una propuesta de cambio frente a un gobierno que no termin� de satisfacer, en especial a la clase media y a problemas reales como el aumento de la carga impositiva, y la asonada de la delincuencia con mayor violencia e impunidad.

�������� Una interna r�spida que consagr� un acuerdo, en una f�rmula presidencial ganadora desde todo punto de vista, la experiencia y la pujanza unidas, adem�s de un sentimiento centenario de unidad partidaria. Como contrapartida, el Frente Amplio, result� con un candidato mayoritario y por otra parte un sector que se le opuso con todo, y que s�lo llego a acordar una f�rmula mucho tiempo despu�s.

�������� Sin embargo, la f�rmula ganadora, por un mal manejo de la experiencia, y de un s�quito, le llev� a un segundo y triste plano, por dichos fuera de lugar, tener que explicar lo que se dijo, y por si fuera poco estar siempre a la r�plica del otro. Perdi� el liderazgo.

�������� Y as� transcurrieron setiembre y octubre, con menor fuerza, ya hab�amos gastado los recursos en las internas y hab�a que cuidar lo que quedaba, pues a�n faltaba la instancia de noviembre. Por tanto seguimos haciendo la plancha, y veremos que pasa.

�������� Entre medio el gobierno, procedi� a inaugurar todo lo que pudo, aunque en la pr�ctica no fuese inaugurable, pues a�n no se hab�a terminado. Todo serv�a para la campa�a. Todos los recursos oficiales gastados en propaganda oficial de los logros del gobierno, eso s� marcando que no ten�a nada que ver en la campa�a electoral, ya que el gobierno no participaba, parecer�a que fuese de un partido que se extingu�a en la gesti�n V�zquez y no del Frente Amplio.

�������� Pasaron setiembre, octubre, noviembre, triunf� M�jica, el pueblo festej�, y por sobre todo festej� que Uruguay clasific� para el mundial de f�tbol de Sud�frica.� Por si fuese poco tambi�n festej� que Nacional saliese nuevamente campe�n de un cada vez alica�do f�tbol uruguayo.

�������� De tanto y tanto festejo, se nos vinieron las fiestas tradicionales, pero este a�o nos agarraron sin plata y sin fuerza, por tanto recurrimos a las tarjetas, quemamos lo que nos quedaba en fuegos artificiales y en alg�n efluvio para olvidarnos de las penurias o aumentar las fuerzas para seguir festejando. En tanto se nos fue un a�o m�s.

© Roberto Bogorja para Informe Uruguay

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