Año III - Nº 124 - Uruguay, 01 de abril del 2005

 

 

 

 

Desde el Cabildo
a las Intendencias

Para ubicar la creación de las Intendencias y las Juntas Locales es necesario partir de la creación de los departamentos.

Pese a diversos intentos separatistas para lograr mayor independencia de algunos territorios es evidente que el proceso creador se mantiene inalterable y con pocos cambios de la unidad administrativa de aquellos años.

Allá por el 800 y pico el territorio ya estaba poblado por pueblos y villas que en algunos casos dependían del Gobierno de las Misiones, aunque Artigas fuera el propulsor de la unidad de todos los orientales.

Si tenemos en cuenta la Historia de la Dominación Española escrita por Bauzá debemos coincidir que Montevideo fue el primer departamento y luego fueron surgiendo simultáneamente San Fernando de Maldonado que contaba con los pueblos de San Carlos, Concepción de Minas, Rocha y santa Teresa.

Lo siguen luego la Villa de Santo Domingo de Soriano, la Villa de Guadalupe de Pando, Las Piedras y Santa Lucía. Surgieron mas tarde algunos deslindes importantes en otros lugares del territorio y surgieron 5 departamentos; Maldonado, Soriano, Canelones, San José y Colonia a los que se agregaron posteriormente Paysandú, Durazno y Cerro Largo.

Luis Méndez, ex presidente
de la Junta Local de Chuy

Sin embargo la Guerra Grande que sobrevino en 1837 retrazó algunos proyectos y fue recién en la presidencia de Gabriel Pereira que se crearon otros departamentos.

En 1881 surgen Río Negro y Rocha que dependía de Maldonado. Recién en 1885 se crearon Flores, en homenaje al caudillo Venancio Flores, Rivera, Artigas y Treinta y Tres. Relacionado con la creación de las Intendencias, el ex presidente de la Junta Local de Chuy, Luis Méndez haciendo mención a un trabajo del escritor compatriota Juan Carlos Pedemonte señalaba recientemente que los municipios fueron los herederos del severo cabildo Colonial.

En su trabajo de investigación histórica Pedemonte señalaba que por más de tres cuartos de siglo, lo municipal resultó siempre un órgano un tanto indefinido en sus funciones, muy entremezclado con aspectos de la labor policial, durante todo el siglo pasado y aún en la primera década del presente.

Lo que luego fueron exclusivas funciones municipales, estaban en la órbita de la Policía hasta que un ordenamiento posterior, enmarcó la acción policial como apoyo al Municipio y como brazo ejecutivo de las ordenanzas comunales. Pero por muchas décadas, competían al guardia civil controlar que los vecinos no vertieran aguas sucias a la calle, que los permisos de edificación fueran regulares, que los números de las casas tuvieran correlación, que los comerciantes no ejercieran fraudes con balanzas arregladas y que los trencitos de caballos mantuvieron su higiene entre muchas otras cosas.

Las Juntas Económico- Administrativas, desempeñaban un poco con el papeleo la tarea típicamente municipal. Cada departamento tenía la suya, elegida generalmente y según nuestra primera ley de elecciones, en el domingo siguiente al de los comicios de los Senadores y Diputados, única manifestación de voluntad directa para elevar a los cargos de gobierno a sus representantes, ya que el primer magistrado era elegido de manera indirecta por las dos Cámaras reunidas en Asamblea General, lo que dejó de ocurrir en 1922.

Señala Pedemonte en su trabajo que desde principios de 1907, comenzó a agitarse la idea de concretar en un órgano exclusivamente ejecutivo, la acción de los municipios. La inquietud era totalmente razonable, aunque lamentablemente la solución apuntó hacia una formula errática, que levantó una tremenda polvareda y el resultado fue totalmente equivocado.

El presidente Williman, recién estrenado su periodo de gobierno, elevó al parlamento un proyecto de ley creando el cargo de Intendente Municipal para cada uno de los Departamentos de la República.

Los nombramientos de los Intendentes necesitaban venia del Senado y los designados serían impuestos en el cargo, el de Montevideo por el Ministro de Gobierno y los restantes por los respectivos Jefes de Policía. Esa ley es del 18 de diciembre de1908 y las designaciones de los primeros Intendentes que tuvo el país se concretó el 19 de enero de 1909 de la siguiente manera; Montevideo, Dr. Daniel Muñoz, Canelones, Eduardo Legnani, Colonia Felipe Suarez, Salto Dr. Marcelino Leal; Rivera Agustín Ortega; Soriano Ing. Manuel Milians; Artigas, José Berruti; Treinta y Tres Dr. Francisco Ramos; Maldonado Rufino Peluffo; Flores Julio Sánchez; Rocha Eliseo Marzol; Tacuarembó Julio Olivera; Minas, José Lois; San José Ramón Suarez ; Paysandú Manuel Pagola; Cerro Largo Bernardino Trique.

Cuando entró en vigencia la Constitución de 1917 desaparecieron los Intendentes Municipales nombrados por el Poder Ejecutivo.