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En la última Ley de Presupuesto se aprobó el sistema de ascensos por tercios en los grados de Oficial Superior. Hasta entonces se hacia por antigüedad calificada.
La misma supone un promedio resultante entre: la nota del curso, los puntos negativos, integrados por sanciones, partes de enfermos, sumarios, etc. y los puntos positivos integrados por la antigüedad en el Instituto, la antigüedad en el grado, puntaje otorgados por actuaciones destacadas y puntos positivos por ocupar ciertos destinos. Hoy un tercio sigue ascendiendo en ese rubro.
Se agregaron dos modalidades: el concurso de oposición y meritos y la selección. Este último, claramente, es destinado a los elegidos por la administración. De todos modos no hay que engañarse. Los tres tercios estan influenciados por la voluntad de la administración. ¿Por que? Porque a los lugares en que se generan puntos adicionales, se destinan a los elegidos por la administración de turno.
Peor aún: no se destina a quien la administración de turno no quiere que ascienda. ¿Como se explica que hay algunos colegas tienen siempre destinos con puntajes y otros que nunca trabajan en esos lugares? ¿Se hace algún concurso o prueba que establezca cual es el más apto?
¿ Por qué se evalúa de forma diferente a los oficiales del Interior, de las Direcciones Nacionales, y de otras dependencias con los que trabajan en la Jefatura de Policia de Montevideo?
¿Cómo se entiende que hay oficiales que tiene cuatro veces mas puntos que otros cuyo desempeño ha sido correcto y generalmente son de Montevideo?
¿ Por qué la disposición legal establece que se ascenderá por concurso de oposición y meritos y la reglamentación la limita y no la cumple, poniendo otros requisitos claramente discrecionales?
Hoy día se da la situación curiosa de que el tercio por concurso, no es por concurso, sino una recopilación de notas de cursos, y puntos a favor. Desvirtuándose la posibilidad de que todos los candidatos compitan por las vacantes, con las mismas pruebas y obstáculos, en igualdad de condiciones.
Reiteramos que debemos bregar por una verdadera profesionalización de la Policia, eliminando la influencia políticas, o de cualquier otra naturaleza en la Policia.
¿Por qué continuar y profundizar, -con el sistema de ascensos actual,- la discrecionalidad que favorece a quienes son señalados con el dedo habilitante?
La discrecionalidad es enemiga de la Justicia.
La Comisión
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