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Los Niños de la Calle por Carlos Caggiani |
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Argentina, como muchos países latinoamericanos, comenzó una decadencia económica hace mas de 30 años, pero en la última década en donde el desempleo llegó al 18% la pobreza del país se hizo aún más notoria.
Cuando la economía colapsó en el 2001, seis de cada diez personas pasaron al estado de pobreza. El impacto en el país de las familias pobres es desbastador y ha alcanzado un nivel de hambruna en muchos pobladores. Hoy en día, casi el 50% de los niños argentinos viven en la pobreza y más de 700 niños que deambulan por las calles de Buenos Aires han escapado a la paupérrima pobreza de sus mal llamados hogares.
Estos niños no andan solos... se juntan en patotas o "ranchadas" cometiendo crímenes, robos y muchas veces drogándose. El proveniente de los robos, lo reparten entre la pandilla y lo usan para comprar comida, drogas y bebidas alcohólicas los que los hace más peligrosos para la sociedad. Buscan en esta unión una fuerza que no la han tenido nunca en sus hogares destruidos por la pobreza de sus mayores. Otro gran problema es que los embarazos de las niñas que forman parte de estas pandillas están aumentando a pasos agigantados y esos recién nacidos son desamparados de la sociedad.
Exactamente lo mismo pasa en ciudades latinoamericanas como Caracas, Río de Janeiro, San Paulo, Lima, México D.F., Bogotá y Quito, por mencionar algunas. Estos problemas juveniles no son nada más que parte de países mal gobernados en donde las personas no tienen derecho a una oportunidad de trabajo o educación, y en los cuales la pobreza sigue su camino creciente.
Lo mismo está pasando en Montevideo, aunque en menor escala, posiblemente, por ser esta ciudad más pequeña que las otras mencionadas, pero, es algo que habría que irradicar antes que el problema siga creciendo y llegue a ser mayor. Muy representado está en una escultura hecha al niño hurgador de basura que está en la peatonal Sarandi. Ver a un niño comiendo de la basura es algo difícil de creer, pero ya muy común en nuestras ciudades latinoamericanas.
Todo esto está unido a una muy mala y misma raíz llamada pobreza que se sigue extendiendo a flor de tierra en todo el continente latinoamericano. Una raíz que no tiene brotes de tallo (oportunidad de trabajo) ni ramas (crecimiento económico.) Esta falta de trabajo sume a las familias en una pobreza extrema y no permite el crecimiento dentro de la misma, sino que al contrario, las separa. Esto menores que escapan, buscando en la calle lo que encuentran en sus casas, son muestras claras de gobernantes ineptos que no han encontrado o no han querido encontrar o negociar en pro de las necesidades de sus pueblos.
Lo que es más molesto, es el analizar que todo esto tiene un común denominador y son los tipos de gobiernos con una ideología en mi opinión equivocada. Gobiernos que no saben o no quieren negociar con países del primer mundo que son los que pueden traer las herramientas que nuestros pueblos necesitan para irradicar esa pobreza extrema que sigue creciendo. Gobiernos que prefieren juntarse a los "perdedores" de siempre, dentro de una línea marxista que ya quedó relegada o mejor dicho anulada en el tiempo. La pobreza de Cuba y de Venezuela se sigue extendiendo hacia el sur de América y los gobernantes no actúan como tendrían que actuar para evitarlo...
¿Qué esperan? ¿Un milagro?
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