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Ya no eres bienvenido,
hermano inmigrante
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por Graciela Vera
Periodista independiente
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La crisis económica (desaceleración según opinión de un Gobierno al que parece gustarle especialmente dar distintos nombres a una misma cosa), ha llevado el paro en España al 9,6%, la tasa más elevada en la Unión Europea dónde sólo Eslovaquia con un 9,9% la sobrepasa.(1) (2)
En España más de 2.174.200 trabajadores viven del pago de seguros de desempleo; 246.000 de ellos se agregaron a la lista en el primer trimestre del año; una lista en la que resulta prácticamente imposible contabilizar a los miles, generalmente extranjeros, que trabajaban sin contrato y también quedaron en la calle.
A este desaguisado de datos el gobierno le pone la guindilla reconociendo que la tendencia del desempleo al alza, continuará durante éste y el próximo año para empezar a descender recién –según sus evaluaciones - a partir del 2010.
Datos con los que no coincide la AGETT (Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal) que vaticina una tasa de desempleo que rondará al 13 o 14% a partir del 2010, debida a la crisis inmobiliaria.
Dentro de estos parámetros más del 40% -unos 98.000- de los nuevos parados son inmigrantes, que se suman a los 53.300 que perdieron su trabajo entre septiembre y diciembre del año pasado, sumando en seis meses más de 150.000 extranjeros que ya creían solucionada su situación en el país, estando ahora nuevamente en el punto cero de su periplo.
Teniendo presente que existe otra cifra de extra comunitarios muy importante, que no se registra en las estadísticas por trabajar sin permisos ni contratos, y que uno de los sectores más afectados por la crisis es el inmobiliario y precisamente el sector de la construcción es el que más empleos ofrecía a los inmigrantes con y sin papeles, no quedan dudas de que ha llegado el ocaso de ‘El Dorado’ español.
Sin inmigración Europa no podría hacer frente a sus necesidades de mano de obra.
No obstante los países de la EU cierran filas y dicen no a la llegada de los que llaman ‘irregulares’.
En Italia el presidente Berlusconi prometió expulsar a los inmigrantes sin papeles, sin excepciones.
Francia dijo dará permiso de trabajo a cientos de inmigrantes ilegales revisando los casos uno a uno pero se niega a ofrecer una regularización masiva y Sarkozy realizó duras declaraciones contra las amnistías que realizaron en el 2006 Italia (500.000 regularizaciones) y España (570.000).
En España hay una errónea creencia de que el gobierno socialista es más amistoso con la inmigración irregular que su antecesor del Partido Popular; no obstante en los cuatro años de la pasada legislatura las deportaciones se incrementaron en un 43% superando los cien mil retornados a sus países de origen.
En su reciente discurso de investidura José Luis Rodríguez Zapatero fue muy claro: ‘ni un solo ciudadano se verá privado de cualquier derecho o ayuda social por la llegada de inmigrantes’.
‘España para los españoles ya no es una consigna sólo de grupos radicales minoritarios.
El nuevo Gobierno socialista ha iniciado un giro de 180 grados respecto a la política migratoria ante el temor de la saturación de un mercado laboral en crisis.
Temor ante una perspectiva económica que no tiene en cuenta que entre los años 1995 y 2005, los inmigrantes aportaron un tercio del crecimiento económico español produciendo superávit para los presupuestos públicos y dinamizando la demanda de diversos sectores económicos(3).
Poco queda de la España solidaria; los inmigrantes son muchos y cuando hay que ajustarse el cinturón, cada boca está demás.
Y en este aspecto parece ser en lo único que por el momento hay coincidencia entre los dos partidos mayoritarios españoles. El Partido Popular habló abiertamente antes de las elecciones de marzo pasado y el Partido Socialista lo hace ahora, ya consolidado en un nuevo periodo de gobierno.
El Ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, haciéndose eco del mensaje del presidente Zapatero, anunció que se está trabajando aceleradamente en una propuesta que según sus palabras: ‘permita a los inmigrantes capitalizar el paro y retornar a los países de origen para iniciar allí una nueva actividad’ y señaló que se gobernará la inmigración a partir de normas concretas que quedan resumidas en: ‘En España, todos los inmigrantes que quepan y ni uno más, pero todos con contrato de trabajo’
La iniciativa es sencilla y, más allá de que las autoridades han dicho que será voluntaria, lo que no se sabe aún es hasta donde será algo más que una propuesta: el inmigrante con derecho a cobrar el seguro de paro o desempleo podrá unificar el cobro en uno sólo si regresa a su país de origen en donde supuestamente con ese dinero podrá empezar en mejores condiciones que cuando lo dejó.
El gobierno de España insiste en que los extranjeros que lleguen deben hacerlo con un contrato de trabajo, nada ha manifestado sobre qué hacer con los que ya están aquí y menos en dejar de redactar órdenes de expulsión(4) y si seguirá impidiendo el ingreso desde los mismos aeropuertos a aquellos a quienes el funcionario de turno considere que pueden no ser simplemente turistas y en este sentido poco peso tienen las cartas invitación, las reservas de hotel o el dinero para subsistir durante el periodo de (real o supuesta) estancia en el país.
En los últimos meses los hogares españoles se han visto asfixiados por el aumento del costo de vida y en especial de las cuotas de las hipotecas que han superado en este mes los 500 euros anuales de incremento. También en este aspecto los inmigrantes, por ser el escalón más débil, son los que más han visto resentidas sus posibilidades de hacer frente a la situación; para poder realizar el pago muchos extranjeros han llenado sus hogares de literas convirtiéndolos en pisos patera(5).
Aspectos todos que se hacen patente en la drástica reducción de las remesas que éstos envían a sus países de origen y a los que se agrega ese sentimiento que en muchos casos es más que una percepción, de que se les comienza a mirar de reojo.
Así las cosas, algunas comunidades comienzan a actuar como punta de lanza.
En la valenciana se estudia la implementación de la Ley de Integración del Inmigrante que en román paladino es la firma voluntaria de un contrato de integración al modelo de convivencia y escala de valores del pueblo valenciano que incluye los idiomas (español y valenciano). El conseller de Inmigración y Ciudadanía, Rafael Blasco, ha asegurado hoy que los inmigrantes que no suscriban el denominado contrato de inmigración 'van a tener dificultades' para integrarse en la sociedad valenciana, aunque la Generalitat no va a adoptar 'ningún tipo de medida' contra ellos porque 'los Derechos Humanos son irrenunciables'.
Por su parte en la catalana, la Generalitat fijará un tope de inmigrantes que puedan escolarizarse en cada centro educativo, dicen que para evitar los guetos y reubicarlos en escuelas concertadas aunque no explican si los hijos de inmigrantes serán reubicados en escuelas que les queden más lejos de su domicilio; ya el año anterior en el País Vasco se propuso que en el año lectivo 2008 ningún centro escolar tuviera más de un 30% de alumnos de origen inmigrante.
Aún no ha transcurrido un mes de actividad del nuevo periodo gubernamental español, y estamos, según dicen, en los primeros pasos de una recesión económica de la que nadie parece saber a ciencia donde estará su desenlace.
Tan sólo las primeras medidas de reorganización de extranjeros se han abierto paso.
La psicosis existente en el sector empresarial no es proclive a la generación de empleos por lo que la deseada integración de los inmigrantes pudiera quedar más que cuestionada.
*1- Porcentaje de desempleados respecto de la población que busca empleo o trabaja.
*2 -
Tasas de Paro a febrero 2008 en países de la UE:
Eslovaquia: 9,9%
España: 9,0%
Polonia: 8,0%
Grecia: 7,9% (cuarto trimestre 2007)
Francia: 7,8%
Hungría: 7,6%
Portugal: 7,5%
Alemania: 7,4%
Bélgica: 6,9%
Finlandia: 6,2%
Estonia: 5,3%
Rumanía: 6,2% (cuarto trimestre 2007)
Italia: 6,1% (cuarto trimestre 2007)
Bulgaria: 6,0%
Malta: 5,8
Suecia: 5,6%
*3 – Datos hechos públicos por la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) señala que los inmigrantes han aportado un 30% del crecimiento del PIB y ocuparon la mitad de todo el empleo creado en el periodo mencionado, si bien se aclara que ese empleo es de menor calidad que el obtenido por la población nativa.
*4 – Sería buena cosa que las autoridades uruguayas trataran de recabar datos fidedignos sobre el numero de uruguayos a las que se les han levantado. Conocemos casos en los que se ha violado sus derechos retirándoles el pasaporte.
*5 - Los colectivos más afectados son los de marroquíes y paquitaníes pero no son los únicos, un directivo de la CCOO (Confederación Sindical de Comisiones Obreras) ha alertado de que decenas de inmigrantes están ya en las listas de morosos y muchos otros ya han perdido los pisos que habían podido adquirir.
Almería, en el sur del norte a 2 de mayo 2004
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