Aquí estamos, aquí estaremos por Dr. Francisco Gallinal

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         En más de una oportunidad hemos  recordado, y no solamente en el transcurso de ésta campaña electoral, que dirigentes que integran la galería de figuras principales de la historia de nuestra colectividad política, no llegaron a vivir nunca, ni a disfrutar ni a ejercer, un gobierno del Partido Nacional. No pretendemos con esto consolar a nuestros queridos amigos y correligionarios que vivieron, como nosotros, una noche amarga el pasado 29 de noviembre, muy especialmente a los jóvenes que con varios de ellos compartimos esas horas difíciles.

         Pero sí recordarles algo que es muy importante para los próximos cinco años; genéticamente quienes integramos el Partido Nacional, estamos preparados para remontar la adversidad, para superar el desafío de cada tiempo y para salir adelante aún de escenarios particularmente difíciles como, aparentemente, se presenta el que tenemos por delante. Así que vamos arriba, con fe y con esperanza, a construir nuevamente una alternativa que el país la va a necesitar, que nuestro pueblo la va a buscar y que a nuestra puerta, la del sentido positivo, la de la gobernabilidad, la del Uruguay para todos, van a venir a golpear.

         Para ello es menester encarar los tiempos inmediatos con mucha prudencia y con alto sentido de la enorme responsabilidad que tenemos en nuestras manos. Cuidarse de no tirar pálidas, contar hasta diez antes de atribuir responsabilidades muy especialmente si se trata, con el facilismo de algunos, de echarle las culpas a los demás.  Debemos ser, como muy bien dijo Luis Alberto Lacalle la noche del domingo, custodias del respeto a la Constitución, de las Libertades en toda su dimensión y Defensores de las Leyes, y eso que vale hacia afuera de nuestro Partido Nacional, porque evidentemente en ese sentido se expresó, también vale hacia adentro.

         No solamente porque tenemos por delante las elecciones municipales de mayo, que bien importantes son; sumemos a ello el deber de cuidar a nuestro Partido al que tanto le debemos, y de proyectarlo con mucha fuerza hacia el futuro porque la ciudadanía nos ha otorgado una vez más, en el ejercicio de la “Oposición” así con mayúscula, con la mayúscula que la hemos ejercido cada vez que nos ha correspondido, un conjunto de deberes y responsabilidades cuya dimensión debemos advertir y asumir.

         La historia se ha escrito, en estos meses, en una forma y con un contenido que ni siquiera quienes emergen triunfadores de la elección del domingo imaginaban. ¿Quién iba a pensar en la década de los ochenta o de los noventa que las cosas se iban a dar como se están dando hoy? Nadie. El Presidente electo ha dicho “ni vencedores ni vencidos”; ojalá así sea, lo queremos ver, deseamos que no se quede solamente en la recordación de una frase con mucha historia, pero con poco presente. Nosotros respetamos el pronunciamiento popular emergente de las urnas; es casi “sagrado”. Pero también somos conscientes que la vida sigue, y que la historia se continuará desarrollando y escribiendo. Este no es el final, ni cosa parecida. Somos gente de fe, y somos gente de esperanza.

© Dr. Francisco Gallinal para Informe Uruguay

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