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Año III - Nº 215
Uruguay, 05 de enero del 2007
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Luis Tappa Saddan el bueno, Saddan el malo,
Saddan el muerto…

por Luis Tappa
 
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Finalmente lo hicieron

          Ahora aparecerán las justificaciones a lo injustificable, pretenderán poner otra venda en los ojos del mundo para que sigan creyendo en lo que ya no es posible creer, porque a esta altura es imposible distinguir la mentira de la verdad.

          En este mundo virtual creado por los Estados Unidos de Norteamérica nada es mentira, nada es verdad.

          Pero el mundo no es tan estúpido como ellos creen, lento pero seguro se le va cayendo la venda de los ojos y comienza a verlos tal cual son, una pandilla de ladrones detrás de las riquezas ajenas.

          Los campeones de la democracia, no solo atropellan las democracias, defienden dictadores y dictaduras afines a ellos, los campeones de los derechos humanos atropellan vilmente los derechos humanos hasta el punto de convertirse en vulgares terroristas; son terroristas iguales y, tan terroristas como esos que ellos dicen combatir; ¡Yo pregunto! ¿Quién salva al mundo del terrorismo norteamericano?

          Mientras tanto, la muerte gana su batalla e Irak seguirá pagando con sangre el delito de haberse opuesto a la voracidad y los sagrados designios del imperio del norte.

          No faltarán los gorilas que vean en esto un acto de justicia, sin tener en cuenta que si la justicia se trata de esto, poco tiene de justicia.

          El resultado de esta aventura en Irak no pudo ser más desastroso, cientos de miles de muertos, un país absolutamente destrozado y una guerra vietnamizada de la que no se avizora el fin.

          Otra guerra que van a perder en el campo de batalla y que los aleja cada vez más de sus aliados, créanlo, igual que en Vietnam, pero que van a ganar económicamente. No miden en consecuencias a la hora de perseguir sus fines.

          Ahora ya están embarcados en otro conflicto, en otra guerra, miles y miles de muertos y más destrucción, porque no es difícil ver los intereses del Tío Sam  en la guerra de Somalia; si analizamos fríamente este oscuro asunto y, observamos el mapa, veremos que está en juego nada menos que el control del pasaje del Mar Rojo al Golfo de Adén y por lo tanto al Mar Arábigo, las rutas del petróleo.

           Nueva guerra contra un país musulmán, el gobierno de transición de Somalia no es otra cosa que un futuro gobierno títere de los EEUU en tan especial lugar.

          Para conseguir el objetivo no importa cuantos tengan que morir, ¿Pero que es Somalia? Un pequeño país en el cuerno de África donde la pobreza es rey, allí fueron a meter las uñas, las garras quise decir.

          Y así van por el mundo, fabricando guerras o chumbando los perros, por aquí y por allá.

          Nadie sabe que va a pasar con Irak, este gobierno que tienen ahora, de mayoría chiíta, no me parece que dure demasiado, en cualquier momento le van a pasar la factura.

          El tema de Irak es muy complejo, en medio de irreconciliables y ancestrales odios tribales la ocupación yanqui fue el detonante que desató las pasiones.

          Entonces, en este momento tenemos dos guerras en una, por un lado están los que luchan contra el invasor, y por otro los sometidos, una guerra civil entre las distintas tribus de un mismo país. ¿Quién le pone el cascabel al gato?

          ¿Cómo van a hacer para congeniar a chiítas, sunitas y kurdos? ¿Cómo hacer para que puedan coexistir en paz? ¡Imposible! Se odian entres sí desde que el mundo es mundo, solo Saddam Husseim los pudo mantener tranquilos; lo más seguro es que Irak, tal como lo conocemos hoy, desaparezca, seguramente terminará partido en varios pedazos y dividido en un montón de pequeños países. Esto es lo que estoy viendo venir.

Saddan el bueno, Saddan el malo, Saddan el muerto

          No estoy defendiendo a Saddan Hussein, se lo tiene merecido, más por imbécil que por lo que pudo haber hecho. Es un modo de decir, que nadie piense que estoy justificando este asesinato “legal”, este atropello a la razón.  

          En su momento, el Irak de Saddam Hussein fue el estado árabe más pro occidental que hubo, y el dictador un producto de invención Made in USA, igual que don Bin.
Pero estos muchachos se olvidaron de algo muy importante, se olvidaron que los EEUU no tienen amigos, solo los usa.

          Ahora estoy hablando de Saddan el bueno, cuando era aliado de Estados Unidos y le hizo la guerra a Irán para defender los intereses yanquis; de Saddan el malo, cuando intentó recuperar su salida al mar junto a territorios que les había sido quitado y molestó los intereses norteamericanos en Kuwait; de Saddan el muerto, cuando se llevó a cabo este nuevo Nuremberg de la justicia norteamericana bajo la máscara irakí.

          ¿Quién va a juzgar a los autores de tantos crímenes a lo largo de la historia? ¿Alguien se ha puesto a pensar, o se pretende ignorar todas las barbaridades, atropellos y masacres llevadas adelante por los distintos gobiernos de los Estados Unidos de Norteamérica? ¿Cuál es la diferencia entre unos y otros?

          ¿Quién va a levantar el cadalso para ahorcar a George Bush, o a algunos ex  presidentes de ese país autores de tantas infamias?

Los muertos que vos matáis gozan de buena salud

          ¡Imbéciles! Fabricaron otro mártir, las cosa horribles que pudo haber hecho Saddam quedaron relegadas a un segundo plano ante esta nueva brutalidad.

          Alguien se encargó de filmar y mostrar al mundo el suplicio a que fue sometido un hombre, también mostraron la increíble entereza conque Saddan Hussein enfrentó la muerte; fue un héroe, murió como un valiente, esa es la imagen de Saddam Hussein que quedará prendida en el tiempo y perdurará en el recuerdo. ¡El triunfó! perdió la vida y ganó la inmortalidad, realmente, ahora siento más respeto por ese hombre.

          Todo un show montado alrededor del asesinato de una persona, ¡no importa como se llame! La pena de muerte y la ejecución de cualquier individuo es un atentado al más elemental sentimiento humano, es un atentado a la humanidad toda, es un atentado a la razón. Nada ha cambiado en el mundo, solo la tecnología, seguimos siendo tan salvajes como en épocas prehistóricas.
 
          También hay quienes disfrutan de la muerte ajena, solo mentes enfermas se pueden regocijar con ese espectáculo montado por Bush y Cia., han usado el nombre de Irak como testaferro de su voluntad.

          Solo mentes enfermas pueden festejar y sentirse felices, solo mentes enfermas pueden justificar la más burda y patética degradación a que puede llegar el ser humano cuando triunfa la irracionalidad para, de ese modo, transformarse en la grotesca caricatura de si mismo, el remedo de un ser humano.

          No es justificación decir que el también lo hizo, porque se acaban de poner a la misma altura. Alguien dijo que “Ojo por ojo nos quedamos ciegos” y yo digo que “Diente por diente” nos quedamos sin “comedor”.

          Ya inundan la red las imágenes de lo que, sin lugar a dudas, será la más famosa ejecución (léase asesinato) de todos los tiempos, en estos momentos el mundo está conmocionado, unos por una razón, otros por otra.

          Pero ya se están viendo las reacciones, muchos se atreven a juzgar con imparcialidad y objetividad un acontecimiento tan grave, otros no tienen el valor o, la paz y tranquilidad interior necesaria para ver este suceso en su real dimensión.

          Saddam Hussein, aún en la muerte, acapara la atención del mundo como nunca antes, lo han elevado a la categoría de mártir por su ejecución y de héroe por la forma en que enfrentó a sus verdugos: si esperaban verlo humillado, llorando y pidiendo por su vida, fracasaron, no tardaremos en ver su imagen pintada en remeras. Los norteamericanos y los irakíes (algunos) ya no se lo podrán sacar de encima nunca más, pues pesa mucho más… ¡muerto que vivo!

          Como muchos de ustedes, quizás, hemos visto las imagines, incluso ya se muestran videos completos, audio incluido, se puede observar todo, de principio  a fin.
 
          Horripilantes imágenes de vergüenza para la humanidad, una venganza repugnante disfrazada de justicia. Debemos estar agradecidos al autor de la filmación, ya que nos permitió saber la verdad.

          No se trata de morbosidad, se trata de no dejarse engañar por los falsos y caducos conceptos morales de quienes hubieran preferido que no se viera y supiera lo que pasó, sin embargo, esos mismos no se quejaron cuando las bombas llovían sobre Irak y morían reventados otros seres humanos, incluyendo inocentes niños.

          Bastante vapuleada tenemos a la justicia en el mundo, ¡Por favor… no la metan en esto!, nada tiene que ver.

          Sin ninguna seriedad, ante tan dramático momento, la ejecución se llevó a cabo entre un griterío infernal, filmaciones y flashes de cámaras fotográficas, algún intento de oraciones, discusiones e insultos hacia el reo, incluso por parte de los propios verdugos y, con festejos al momento de su muerte.

          Con este repugnante episodio, un hecho incalificable y difícil de digerir, protagonizado por Mr. Bush al entregar a Saddam Hussein a esa horda de salvajes, se terminó con la dignidad y los pocos derechos humanos que van quedando en el mundo.

          Me quedó la sensación de que solo se trató de un vulgar linchamiento, más que la sensación, plena certeza.

          Este video, de una crudeza inenarrable, quizás ayude a ver con más objetividad lo que se esconde detrás de este asesinato.

          La conclusión a que llegué, luego de ver lo que vi, es que no pudo haber existido un juicio justo e imparcial, no pudo haber existido un fallo justo e imparcial, no hubo una ejecución imparcial llevada a cabo por la justicia, todo fue una gran y vergonzosa parodia que nos llena de humillación.

          Lo vuelvo a reiterar, solo se trató del asesinato de un hombre llevado a cabo por un grupo de ebrios, una grotesca patota borracha de venganza, donde todos fueron verdugos, fue un linchamiento planificado y ejecutado fríamente, con el visto bueno de Mr. George W. Bush

          La justicia, una palabra tan vapuleada como la “democracia”, tal vez algunos digan que se hizo justicia, no se confundan, porque, “Cualquier parecido es mera coincidencia”

          La verdad de lo que sucedió supera la ficción, parece algo irreal, fuera de este mundo, lo demuestra claramente el video mencionado, es muy distinto a la idea que dejaron las primeras cintas pasadas, sin audio y cortada antes del desenlace, aunque por la “facha” de los verdugos, y que eran un montón, ya nos podíamos dar cuenta de cómo venía la mano.

Bolazo va, bolazo viene

          Entre tanto bolazo escuchado, o leído, debimos soportar a este Mr. Bush hablando de Irak y su “joven democracia”… ¿Pero de que habla?, ¿Acaso de la joven democracia de un país bombardeado, invadido, ocupado, avasallado y robado?

          ¿O la de una país en guerra? Tal vez nos habla de la joven democracia de un territorio donde campea la anarquía, la destrucción y la muerte, ¿De esa joven democracia nos habla?... Mr. Bush.

          ¿Por qué no habla de la democracia en Arabia Saudita, o Kuwait, por nombrar a alguno de sus protegidos en la zona?

          ¡Estamos todos locos!

          Veamos otra de las estúpidas frases de este triste personaje:
"Estamos empeñados en trabajar con ambas partes para llevar el nivel de terror a un nivel aceptable para ambas partes" 
 
          Quédate tranquilo George, quédate tranquilo… ¡Ya lo lograron! No es necesario que “ambas partes” trabajen tanto para “ambas partes”.

          ¿Quieren ver más? Pongan en cualquier buscador en Internet, “frases estúpidas de Bush” y, ¡sorpréndanse! observen hasta donde puede llegar la inteligencia de este “caballero” cuando abre la boca para hablar sin que nadie le haya escrito el discurso.

Siglo XX… Siglo XXI

          Cuanto más lejos de los EEUU, más seguros estaremos, Saddan Hussein lo supo, tarde pero los supo, porque alguna vez fueron muy amigos.

          Todo lo que aquí he dicho no es un alegato en favor de Saddam Hussein, lejos de mi intención hacerlo, es un alegato contra la pena capital y la mentira institucionalizada: aquella, una de las lacras más espantosas heredadas y, mantenida en algunos países como ejemplo viviente y actual de una época de barbarie que no hemos podido superar; esta, una forma sencilla y vulgar de tratarnos de estúpidos y tomarnos el pelo.

          ¡Si el siglo XX fue “Cambalache”! ¿Qué podemos decir de este?... ¡porque las perspectivas no son muy halagüeñas que digamos!

          ¡Realmente!, no se si la II Guerra Mundial aún no ha terminado o, si ya estamos en la tercera.
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