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Las Leyes del Libre Mercado
por Cr. Ricardo Puglia
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El Presidente del gobierno cívico-sindical-socialista (CSS),-luego del pasaje por el MEF del actual precandidato a la presidencia de la ROU del FA-, ha determinado con su sucesor que poco o nada se puede hacer para mejorar la calidad de vida de los uruguayos en el año de vida que le resta y que lo hecho en los cuatro anteriores determinarán la vida de las futuras generaciones de uruguayos para insertarse en el primer mundo bolivariano.
Se deben administrar los desatinados manejos económicos del antecesor y los del sucesor tales como la permisividad de las ocupaciones, las consecuencias de las tercerizaciones, la rigidez de los acuerdos salariales, el crecimiento de los salarios nominales en detrimento de la ocupación, los nuevos impuestos a los ingresos (IASS, IRPF), el incremento del número de funcionarios públicos, el grosero aumento del gasto público, la falta de ahorro público como medida anticíclica frente a la bonanza mundial, y el aumento excesivo del endeudamiento del Estado entre otros.
La actual meta del MEF no es procurar generar condiciones de mercado en que la actividad privada continúe creando riqueza, el objetivo es el Índice de Precios al Consumo (IPC), que no debe superar el 10% anual en 2009 (9,19% en 2008), ya que de ser mayor, provocaría ajustes automáticos en los salarios públicos y en las jubilaciones. Misión Imposible!!!
Las medidas del MEF han apuntado a los elementos que integran la canasta familiar, como el “peceto” (sic) que comen los más de tres millones de uruguayos semanalmente o la rebaja del IVA a las frutas, hortalizas y carne picada congelada y la tímida solicitud de reducir apenas el 5% el presupuesto de la Administración Central de un Estado Gordo que bien le vendría pedir hora a Cormillot.
No existe un plan de Desarrollo Económico (Uruguay Productivo fue sólo un slogan) y el MEF se contenta con cumplir con el pago del Presupuesto sea como sea, sin reconocer que estamos en medio de una profunda crisis mundial donde debería atender las demandas del sector privado que le generan los impuestos que disfrutan gastando en pésimas políticas nacionales perdiciosas sin el menor requisito de eficiencia y eficacia en los resultados obtenidos- ALUR, PLUNA, Corporación Vial, etc.-
Para entender cómo una economía de libre mercado sale de una crisis hay que comprender muy bien los impactos microeconómicos de los cuales el MEF no se ha enterado aún y no exclusivamente los macro porque si disminuye su actividad una empresa y otra más, y otras más, en la sumatoria pueden explicar la disminución del producto, la disminución de la ocupación o la disminución de la inversión.
Por ello habrá que recordar los 200 empleados que Paycueros envió al seguro de paro, los 1.000 trabajadores del Metal y Afines, los 300 trabajadores del sector maderero, el 23% de los trabajadores del sector textil incluyendo los trabajadores de la Textil del Gobierno, AGOLAN S.A., los 1800 curtidores y los 800 que fueron despedidos en el sector, etc. 23.078 eran los trabajadores en el Seguro de Paro al 31/12/2008, un 17,6% más que en el 2007.
Los neocelandeses de la empresa New Zealand Farming Systems Uruguay perdieron en 2008 casi 9 millones de dólares y decidieron cerrar tres tambos temporalmente. El sector tambero sufre una doble crisis con pérdidas impresionantes que harán desaparecer al pequeño productor que dice defender este gobierno CSS. Ni hablar de las pérdidas del sector ganadero y de los precios de los cultivadores de granos y las dificultades para colocar la producción. Río Tinto desistió de su inversión, Ence y Portucel esperan la evolución de la crisis.
El índice de inflación, el tipo de cambio, los impuestos, el déficit fiscal, el desempleo, la deuda pública, la competitividad, etc. son todas variables macroeconómicas que importan, pero ellas por sí mismas no evolucionan favorablemente con decisiones políticamente erróneas sino por el comportamiento que asume cada agente económico e individuo que conforma el mercado de bienes y servicios.
No le será posible al MEF duplicar durante 2009 las utilidades de las empresas públicas como lo manifestara su titular sin incrementar el IPC. Por ello hay que respetar las leyes del libre mercado, realizar grandes sacrificios públicos y privados, ser audaces y no sólo administrar artificialmente un indicador que tiene el vuelo de una perdiz.
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