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Asignaturas pendientes
¿Comenzarán ahora a rendirlas?
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por Raúl Seoane |
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Virajes de medio tiempo
Se especula que en setiembre, fecha en la que se cumple la mitad exacta del mandato del Frente Amplio, comenzará una etapa de renovación, ajustes y cambios
Esta noticia aparecida esta semana en los diarios de nuestro país nos renueva la esperanza, que según los entendidos es lo último que se pierde. Todo se pinta de color esperanza, pero… ¿se hará realidad o será otro de los sueños perdidos de los que tanto conocemos?
Este gobierno tiene demasiadas asignaturas pendientes y en todas ellas, cuando quiso rendirlas, tuvo que dar marcha atrás porque un pequeño grupo de sus bases lo obligaron con la remanida cantinela del neoliberalismo, neocapitalismo o neoloqueselesocurra.
Siguen sin haber producido cambios importantes, de peso, de esos que trascienden todas las opiniones o ideologías. El tren de la historia está lejos, aunque todavía podemos alcanzarlo si el presidente sin bastón, Reinaldo Gagáno, se lo permite al presidente con bastón, Tabaré Vázquez.
Se habló de un TLC con Chile, otro con China, búsqueda de acuerdos con la Unión Europea, Nueva Zelandia, pero hasta el momento este gobierno se parece más a una obra shakespeariana “Mucho ruido y pocas nueces”.
Un país sin energía
Es cierto, la energía es el mal de la época, pero ¿qué está haciendo este gobierno para permitirnos incrementar nuestra propia energía?, prácticamente nada. Salvo un “verso” alcoho-azucarero que fue negociado entre gallos y medianoche y que está convirtiéndose en vaya uno a saber en el departamento de Artigas.
Este mismo gobierno, cuando fue oposición, promocionó y consiguió que toda la población votara para que nuestro país se encuentre libre de la energía atómica, ese maligno invento que mató a cientos de miles de personas y que fue inventado por el capitalismo imperialista.
Si el estúpido populismo reinante en la oposición de aquellos tiempos no hubiera existido, hoy nuestro país podría utilizar la energía atómica para crecer, para producir, y no tendría que estar dependiendo de un loco mesiánico como Chávez, que nos cobra más caro el petróleo que nos vende y para peor genera contaminación y daña los motores por su baja calidad.
Es cierto, le estamos vendiendo energía a los argentinos, pero a costa de qué y por qué. Sencillamente porque Argentina no puede comprar energía en otro lado debido a que el mundo le ha dado la espalda, y al no haber solucionado el default financiero de sus bonos externos, le es imposible conseguir financiamiento.
Mientras tanto, Ancap sigue en las suyas y compra la cadena de estaciones de servicio de Texaco por 22,5 millones de dólares, pero sigue prestando un servicio pésimo con un producto de muy mala calidad. Sin embargo, con esto el Ente logra afianzarse en el monopolio de los combustibles, la burocracia y los acomodos políticos.
La falta de energía, más bien temprano que tarde va a frenar el crecimiento del país. Muchas inversiones miran atentamente el problema energético que tiene Uruguay antes de decidirse a invertir en una industria que pueda tener problemas de abastecimiento de energía.
Pero esta falta de energía puede tener un principio de solución con los biocombustibles, pero aparte del negocio o negociado del polo etanol en Artigas, la ley del Biodiesel continúa durmiendo en el Salón de los Pasos Perdidos, y las autoridades no se preocupan.
Uruguay vuela
El tema P.L.U.N.A. fue solucionado, aunque algunos alegan que esa solución no sirve porque nuestro país sale de garante a las operaciones de compra de aviones que realice la nueva compañía.
Leadgate, el nuevo propietario de la línea aérea uruguaya, se propone capitalizar a PLUNA con US$ 15 millones al contado, una línea de crédito de US$ 10 millones y otros US$ 152 millones para la compra de aviones, y es aquí en donde ponen sus dientes los opositores.
Mal o bien, el Estado se sacó un enorme problema de encima y una potencial caja de corrupción política. Empleando una política liberal, ajena a los principios de muchos de los que componen la Colcha de Retazos, Pluna fue privatizada.
La violencia nuestra de cada día
Asaltos, asesinatos, violencia, usurpaciones, todos los tipos de delitos se han incrementado en los últimos tiempos, mientras los defensores de los derechos humanos velan por los delincuentes y minimizan a las víctimas.
Muchos opinólogos dicen que la delincuencia es el efecto lógico de la pobreza y la marginación. Sin embargo, en nuestro país siempre existió ese margen de pobreza y marginación y no por ello hubo un incremento de los delitos como existe actualmente.
La falta de una política policial y de prevención de la delincuencia, es evidentemente el talón de Aquiles y una de las principales asignaturas pendientes de este gobierno. Su miedo a usar la autoridad confundiéndola con autoritarismo, permite el auge de la violencia en lugar de disminuirla.
El que la Ministro del Interior, Daisy Tourné, haya dicho "Alguien tiene que poner límites, y si rueda mi cabeza por poner límites no importa", es un paso hacia delante en materia de buscar un límite a la violencia. El que lo pueda llevar a cabo es otro cantar. Si la Ministro no se decide a ejercer la autoridad que emana de su cargo, y vuelve a confundirla con autoritarismo, vamos a estar en lo mismo, pero si realmente hace cumplir las leyes y genera una política de prevención de delitos, es muy probable que la delincuencia vuelva a los causes normales.
¿Control de precios o estupidez pasajera?
Los últimos cambios, realizados por este gobierno, en materia impositiva, están generando más problemas que beneficios. Desde Jujuy se escucha el grito de todos los uruguayos que unidos y desesperados vociferan “Basta de impuestos”.
Según informaba El Espectador, el lunes entró en vigencia la Reforma Tributaria y el primer efecto visible fue la rebaja de algunos precios en los supermercados. El fenómeno se relaciona con la caída de la tasa básica del IVA del 23 al 22% y la mínima, que pasó del 14 al 10%, junto con la eliminación del 3% correspondiente al Cofis. Según un relevamiento realizado por el diario El País entre las principales cadenas de supermercados, las bajas de precios se ubicaron ayer entre el 3 y el 10%.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce porque según el mismo medio, los productos vinculados con la harina han aumentado. Los lácteos venían aumentado y se mantienen en precios altos. El aceite que ha aumentado también por efecto de los cambios de los granos. El pollo también. Ahí tenemos una cantidad de precios que han crecido en los últimos días y se mantuvieron altos y no bajaron.
Pero aquí no termina el problema, porque las cuotas de las mutualistas se incrementan en un 5 % debido a que les fue eliminado el Imesa pero se le agregó un IVA del 10 %, y en un tema tan mal manejado como la salud por la ministro de turno esto puede convertirse en un Waterloo para el gobierno.
Según informa El País, las mutualistas afirman que el gobierno les dio el aval de trasladar esa diferencia del 5% a las cuotas, en una reunión que el 26 de junio mantuvieron los representantes del sector con el director general de Secretaría del MSP, Daniel Olesker.
Pero ¿cómo lo solucionamos?... muy fácil… ¡A lo Kirchner!... el gobierno recurrirá a la vía del decreto, estableciendo que la cuota mutual no puede aumentar por ese concepto. ¿Quién pierde?, el usuario, porque el prestador de salud da una u otra manera buscará cómo resarcirse de la pérdida, ya sea cobrando un plus por las órdenes médicas o bajando la calidad de sus servicios.
Cambiamos para peor
En el pensamiento de muchos uruguayos debe estar repitiéndose “cambiamos para peor”, o “es más peor de los mismo”, porque durante este medio mandato estos dos gobiernos, el de Tabaré Vázquez y el paralelo de Reinaldo Gagáno, no han hecho mucho.
Si de ahora en más comienza una etapa de renovación, ajustes y cambios, esperemos que estos sean para bien y podamos tener un único Presidente, Tabaré Vázquez, que al timón de un barco llamado Uruguay nos lleve a la Tierra Prometida.
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