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SAG

El Sistema Acuífero Guaraní es uno de los mayores reservorios de agua dulce del planeta: alrededor de 1.190.000 kilómetros cuadrados que representan una superficie superior a la de España, Francia y Portugal unidos.

Se le ha conocido como el Acuífero del Mercosur porque se ubica bajo buena parte de la  superficie de los cuatro países que lo fundaron: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.

El agua subterránea del Sistema Guaraní se aloja en formaciones geológicas muy antiguas que datan de los períodos Triásico, Jurásico y Cretácico Inferior, teniendo esas rocas edades entre los 200 a 132 millones de años; en la época en la que aún estaban unidas África y Sudamérica, los depósitos comenzaron a desarrollarse en ambientes fluviales y lacustre conociéndoselos en la literatura geológica como formación Tacuarembó o también Piramboiá.

Bajo territorio brasileño se extiende por aproximadamente 850.000 kilómetros cuadrados (9,9% de su territorio); en Paraguay alcanza los 70.000 kilómetros, 17,2% del territorio paraguayo; en Uruguay llega a 45.000 kilómetros cuadrados bajo el 25,5% de la superficie uruguaya y en Argentina llega a los 225.000 kilómetros cuadrados o sea bajo  el 7,8% de su territorio.

En los tres primeros países puede encontrársele en profundidades que oscilan entre los 50 y 1.500 metros, sólo en Argentina no aflora por encima de los 900 metros.

Por su presión de surgencia, al perforar y llegar a él, el agua emerge en forma natural, en muchos casos a altas temperaturas.

Si tenemos en cuenta que un kilómetro cúbico de agua equivale a un billón de litros, los 37.000 kilómetros almacenados en el acuífero representan cifras descomunales 37.000.000.000.000.000.

Se estima como reserva renovable hasta 80 kilómetros cúbicos por año.  Actualmente el país que más explota el SAG es Brasil que abastece en forma parcial o total  500 ciudades; en Paraguay se explotan  200 pozos, principalmente para uso humano; en Uruguay se han perforado  135 pozos de abastecimiento público de agua entre los que hay algunos destinados a la explotación termal en tanto que en la Argentina se han realizado 5 perforaciones termales de agua dulce y una de agua salada.

g.v.