En conversaciones intercaladas, tomando notas de las necesidades, elaboré un perfil deseado, para la selección primaria de los aspirantes. Lo dejé a consideración individual de los que interveníamos en la Gestión, necesitaba sus opiniones, así definíamos los perfiles para las exigencias y los requerimientos de quienes integrarían el Staff de la Oficina a formar.
Lo que se tuvo en cuenta:
Basados en éstas pautas, volvimos sobre los CV y obtuvimos una nueva preselección. La necesidad había sido determinada: Arquitectos o estudiantes avanzados, dibujantes asistidos por Computador con buen manejo del Programa AutoCad y un Ingeniero Civil ( Estructural) o estudiante avanzado de la especialidad.
El total del nuevo equipo, sería de 6 Profesionales o Técnicos. La evaluación concluyó seleccionando a más de 40 aspirantes. La segunda selección, debió esperar hasta el día domingo 9 de Abril, que reunidos los tres integrantes de la Gestión, discutimos y concluíamos seleccionando a 26. Estos serían llamados por teléfono, enterándolos de las primarias decisiones y explicándoles nuestro Proyecto. Acompañando a la llamada telefónica, a cada uno se le brindaría amplia información a sus correos electrónicos.
Esta la había elaborado en aquellos días de Stand By. Queríamos que recibieran la máxima información para que decidieran si la propuesta les resultaba de interés. De ésta manera, obtuvimos una tercera selección, donde más de 24 aspirantes, prometían concurrir a una entrevista personal en día y a determinar.
El dónde había sido definido previamente, en los análisis del domingo 9 de Abril.
Ya habíamos dicho la razón lógica de donde afincar la Oficina de Dibujo. Varias razones y muy valederas, terminaron cambiando la Residencia.
En definitiva la carga que debe soportar el empleado, para llegar a su lugar de trabajo y una similar para retornar a su hogar. Vemos de esa manera un día que se fue, casi sin tener la posibilidad de ver el sol o disfrutar del mar, río o paisaje. Llegar a nuestras casas cansados, quizás más por la problemáticas ajenas a la labor, que por el trabajo en sí mismo.
Por ello se analizó la posibilidad de otra Ciudad, con menor expansión demográfica, sin cargas horarias por viaje, con posibilidades de disfrutar parte del día, donde los Profesionales puedan tener sus espacios de tiempo libre, de despejarse o disfrutar con su familia en un ambiente pueblerino, campechano y acogedor.
La decisión recayó en la ciudad de Dolores, que reúne un sin fin de buenas aptitudes para una vida apacible, integrada y dedicada a la labor Profesional. Con tiempos y espacios donde regocijarse al aire libre, con actividades casi permanentes en diversas áreas, con un espejo de agua agreste, virgen y muy disfrutable. A pocos kilómetros una de las playas más hermosas del Río Uruguay, con posibilidades de pesca en distintas temporadas. Con el aliciente de viajar respirando la pureza de un aire matizado por pasturas naturales.
Trabajar 45 horas semanales en éste entorno, poder descansar las 56 horas y disfrutar las restantes 64 a gusto y predilección, es sin lugar a dudas una buena manera de lograr que el equipo logre un Excelente rendimiento.
La interrogante es poder contar con los Profesionales que deseen trasladarse a ella. La respuesta que encontramos: ''emigrar dentro del País por trabajo, es un simple cambio de barrio''.
Las instalaciones ofrecidas en renta, estaban en la Ciudad de Dolores, Departamento de Soriano.
El Director de la compañía, visita en sus vacaciones anuales, con su familia a la misma.
Parte de mi familia y muchos amigos viven en la Ciudad.
En definitiva, era jugar de Locatarios.La confianza de sentirnos seguros, el aporte a una descentralización manoseada y nunca lograda, los revisaremos en los próximos días. Aún él: