¿Astori ministro o Astori candidato? por Luis Alberto Lacalle Herrera

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         Después del respaldo explícito y directo del Presidente Vázquez, parece ser que el candidato del Frente Amplio será sin duda el Cr. Danilo Astori. Salvo, claro está, alguna rebelión de las bases, que en vista de la sorda lucha interna que se vive en la fuerza de gobierno, no se puede descartar.

         Nos jugamos a manos del Presidente pues consideramos que tiene la autoridad política y personal como para que su criterio se respete e imponga.

         El futuro candidato ha hecho lo suyo. Después de varias negativas, previo al año lectoral, aceptó subir el mínimo no imponible del IRP, e introducir modificaciones en ese engendro de “fiscalazo”. Pagó el peaje de visitar el PIT CNT, ambiente donde no se le quiere mucho y rindió tributo a la mayoría del Frente concurriendo a la sede del MPP. Las realidades políticas así lo aconsejaban y el Cr. Astori es un político astuto y veterano, un verdadero sobreviviente en esa jungla peligrosa de la interna izquierdista. Es un ejemplo de plasticidad política, de capacidad de adaptación al medio y a las circunstancias.

         Lo que no sabremos nunca es cuál Astori será el candidato, ni cuál el eventual gobernante ante la terrible posibilidad de que gane nuevamente la coalición frentista. Porque uno es el del 2004 y muy otro el de 2008. Antaño, cuando había que ganar la elección, el economista de marras hizo buena letra con el mundo empresarial y fue factor determinante para que el Dr. Vázquez lograra su ajustado triunfo en primera vuelta. Los primeros tiempos de su gestión fueron consecuentes con esa postura. Se pagó - ¡se canceló! – la deuda con el Fondo Monetario, el antiguo demonio. Se pudieron apreciar fotografías del mencionado ministro y su colega el Sr. Mujica brindando con los acreedores, cosa que no fue del agrado de los muchachos de los comités de base. Se predicó el gasto mesurado y la prudencia fiscal. Pero todo tiempo pasa y muchas cosas cambian....

         Sin duda que el Ministro cambió, de Astori Ministro a Astori Candidato. Cambió su talante, otrora sereno por una rispidez extraña. A veces con aspecto de saber de que se había equivocado en la promoción del IRPF y que a nadie más que a él mismo podría responsabilizar... Al mismo tiempo, aflojó la mano que cuida la bolsa fiscal y comenzó un gastadero de dineros públicos, que parece que sigue en la Rendición de Cuentas.

         Entretanto, las cuentas se ponen feas. La inflación avanza y el costo de vida aumenta. Las medidas apropiadas que se deben de tomar desde el Ministerio de Economía son duras y pueden parecer impopulares. Una opción es que reaparezca el antiguo Astori y las encare. La otra es que se cambie el ministro, liberando al Cr. Astori para que siga su legítima aspiración de ser candidato. Esperemos que este sea el “otro” Astori y que su sucesor no tenga los ojos puestos en las urnas sino el lo que se debe de hacer.

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