La boca más rápida que el cerebro por Raúl Seoane

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El periplo bonaerense del senador Mujica se ha convertido en una verdadera gira triunfal y preelectoral de enorme repercusión en nuestro país y en la propia capital porteña. No en vano le acompaña una nutrida delegación de medios nacionales que relatan cada paso de sus días en la otra orilla.

         Así iniciaba su artículo el Dr. Lacalle y que fuera publicado en nuestro boletín anterior. Un Mujica lanzado desesperadamente a ganar el sillón presidencial en las próximas elecciones en nuestro país.

         Sin medir lo que declara y con un sentido de la oportunidad bastante deficitario, el senador y ex Ministro de Ganadería trató de granjearse, y hasta cierto punto lo consiguió, la simpatía de los distintos sectores económicos y políticos del vecino país.

Más y mejor Mercobluff

         En declaraciones al diario Crítica de Argentina, el candidato a ocupar la primera magistratura uruguaya declaró que “Vengo para hablar de la integración y de los problemas
que tenemos en el Mercosur porque o nos juntamos o nos van a hacer trizas. Los latinoamericanos, todos juntos, debemos ser el 5 o el 6% de la economía mundial. Separados, somos una hoja al viento en el concierto mundial. Incluso Brasil y Argentina aislados no pesan. Tienen una flor de responsabilidad, porque liderar significa tener en cuenta las asimetrías, las diferencias y los defectos”.  Con su estilo populista y diciendo lo que quieren oír sus interlocutores, Mujica arremete nuevamente con la integración en el Mercosur, cumpliendo con su postulado y el del ex ministro Gagáno de “más y mejor Mercosur”, sin entender que son los propios países, socios de Uruguay y Paraguay los que están deshaciendo hilo por hilo lo conquistado durante estas últimas décadas.

         A menos de una semana de su periplo electoralista, Brasil le pegó dos fuertes patadas a las intenciones mercosuristas del Pepe. Primero al aceptar las exigencias de los países grandes, EE.UU. y Europa en la ronda de Doha, lo que le valió un fuerte encontronazo con Argentina (ver también: Argentina: posición de Brasil en la OMC "genera una tensión" en el Mercosur) y posteriormente cuando descendió en Buenos Aires con cerca de 300 empresarios brasileros para negociar con el gobierno argentino una alianza bilateral y por fuera del cada vez más moribundo Mercosur.

        El portal Alba, órgano oficial de lo que a Chávez le interesa que se sepa, indica claramente que Brasil abandonó a sus socios tradicionales y en la negociaciones de la Ronda Doha de la Organización Mundial de Comercio (OMC) aceptó las propuestas hechas por EE.UU.
y la UE en materia de productos industriales. Es cierto que el bolivariano juega una pulseada muy grande con su par brasilero, pero ello no es óbice para no ver la realidad que refleja este artículo del portal y que también fue analizada por los propios medios brasileros la pasada semana. (Ver artículo de Informe Uruguay El fracaso en la OMC deja al Mercosur en jaque, según analistas brasileños) También es muy interesante, para comprender la estrategia de Itamaratí, leer el artículo escrito por Claudio Paolillo Ahora sí: “o maior TLC do mundo” y publicado en esta edición.

         Los brasileros van por la suya y el Mercosur es sólo un instrumento para realizar sus metas. El Portal MDZ publicó la siguiente reflexión de la Unión Industrial Argentina:

Advierten que el Mercosur puede convertirse en un negocio sólo para Brasil
Desde la Unión Industrial Argentina (UIA), señalaron que Argentina corre el riesgo de transformarse en un país importador de materia prima, quedando de esta manera Brasil como el industrializado y encargado de negociar con los otros bloques regionales. No obstante, el dirigente celebró la reciente visita del presidente brasileño Luiz Inacio Lula Da Silva a Buenos Aires.
Uno de los vicepresidentes de la Unión Industrial Argentina (UIA), José de Mendiguren, advirtió esta mañana que el Mercosur corre el riesgo de convertirse en un "negocio sólo para los empresarios brasileños".
"Tenemos que proponernos que el Mercosur sea un bloque de comercialización regional, y no sólo un negocio para los empresarios brasileños. La idea es integrar y equilibrar a los países de menor desarrollo, como ha ocurrido en la Unión Europea", sostuvo el dirigente.
Además señaló que "el principal peligro" que enfrenta Argentina en el marco de la integración regional, "es que nosotros nos transformemos en un país importador de materias primas y que Brasil sea el país industrializado, el encargado de negociar" con otros bloques regionales.
No obstante, el dirigente celebró la reciente visita del presidente brasileño Luiz Inacio Lula Da Silva a Buenos Aires, acompañado por casi 300 empresarios.
 "La visita de Lula a la Argentina nos ha mostrado que ellos están en un muy buen momento, ya que los empresarios brasileños se han convertido en multinacionales, apoyados en un plan y en una economía estable", enfatizó.

         Uruguay y Paraguay no son tenidos en cuenta para nada cuando hay que hacer acuerdos de crecimiento o tomar decisiones que pueden ser fundamentales para el crecimiento del Tratado. Sin embargo, fiel a su estupidez característica, el Pepe continúa con su latiguillo porque considera que el pueblo uruguayo está de acuerdo con la integración, sin darse cuenta de que la maduración del ciudadano estuvo de acuerdo con un TLC con U.S.A. y cada vez está más convencido de que el Mercosur no sirve para el crecimiento armónico de nuestro país. Se nota que Mujica no mira ninguna encuesta, y tampoco se informa a través de los medios de comunicación. En la encuesta permanente de Informe Uruguay sobre el Mercosur, únicamente el 15.4 % de los que votaron aceptan continuar dentro del Tratado.

Repartir lo que no existe

         No me cabe ninguna duda de que José Mujica aprendió muy rápidamente las técnicas populistas del bolivariano Chávez y del pingüino Kirchner. En su léxico campechano y exiguo la frase “una mejor repartición de la riqueza” aflora cada vez que tiene oportunidad de pronunciarla o de que alguien lo escuche.

         Sigo sin comprender cómo se puede distribuir mejor la riqueza sin dañar el crecimiento económico, porque es muy fácil decirle a la tribuna que le van a sacar a los ricos para darles a los pobres, sin embargo la realidad y la propia idiosincrasia del ser humano dice otra cosa.

         Mujica habla de crear nuevos impuestos. El impuesto a los bienes suntuarios como los televisores, los automóviles y los electrodomésticos para subsidiar los alimentos básicos, está dentro de la teoría mujiquera dirigida a “la gilada”, como le gusta decir al inimputable. Como esto ya lo analizamos en un anterior artículo, no tiene sentido volver sobre lo mismo, pero sí sobre la creación de impuestos a la riqueza, porque parece que la nefasta experiencia argentina no ha generado ninguna reflexión en el Pepe.

         El control de precios, la persecución de industriales y empresarios y los grandes impuestos creados por la administración Kirchner han hecho que la inversión privada en Argentina esté en sus peores niveles en muchos años. No se pueden crear impuestos para que el gobierno graciosamente los reparte entre los que menos tienen, porque sucede que eso se usa como arma electoral para tener cautivos, mediante “las repartijas” a amplios grupos electorales. Un ejemplo cabal de lo que estoy diciendo fueron las palabras de Enrique Rubio “si el Frente Amplio es capaz de transformar en votos los planes sociales, no puede perder la elección, solo depende de la estructura del partido”, en otras palabras yo te doy un plan social si en contrapartida tú me das el voto.

         Grabar la renta empresarial para repartirla electoralmente es lo que quieren hacer los Mujica del FA, en lugar de crear exenciones impositivas a las ganancias que los empresarios reinvierten en el país y que son generadoras de nuevos empleos, y eso evitaría que el 60 % de nuestros jóvenes sueñen con emigrar a otros países en los que puedan conseguir un empleo decente y que les permita vivir sin sobresaltos.

         La izquierda uruguaya, sobre todo los sectores populistas tienen un concepto equivocado de la política distributiva. La distribución no es quitarle al que más gana para darlo al que menos. La verdadera distribución está dada por la igualdad de oportunidades, igualdad de estudios, de salud, de trabajo. Esa es la única forma en que se puede crear una política verdaderamente distributiva. El problema es hacérselo entender a los populistas como José Pepe Mujica.

El aliado equivocado

         Kirchner vuelve con una reunión con un "presidenciable" uruguayo El titular del PJ (Partido Justicialista) se reunirá con el senador José Mujica, posible sucesor de Tabaré Vázquez, aseguraba Infobae.Kom en su edición del 23 de julio pasado.

         Mal aliado está buscando el Pepe Mujica para su campaña electoral, ya que el gobierno de los Kirchner tambalea fuertemente jaqueado por una inflación que no saben como controlar, una inseguridad en crecimiento, el grave conflicto del campo que aún no han querido resolver y la desilusión de la gran mayoría de los argentinos en una mujer que prometió un nuevo y mejor gobierno y que no cumplió.

         La continuidad de Kristina Kirchner en el sillón de Rivadavia no está asegurada si tomamos en cuenta que luego de la decisión del Senado Argentino de no convalidar el saqueo a los agricultores la pareja presidencial estuvo a un tris de renunciar y volverse a sus pagos. Inclusive hay quienes dicen que, según palabras de Néstor Kirchner, si durante los próximos seis meses continúan siendo jaqueados y golpeados, la presidente argentina renunciaría a su cargo.

         ¿Y estos son los aliados en los que se quiere recostar José “Pepe” Mujica?, “a buen puerto vas por agua”.

         Espero que el análisis que realiza el Dr. Bartezaghi en el artículo “No nos engañemos, el candidato del Frente será Astori”, esté acertado y que la candidatura de Mujica no sea más que una cortina de humo.

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