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Qué puede pasar en Venezuela por Carlos Caggiani |
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Esta semana, hemos podido ver lo esperado en las elecciones de Venezuela, donde ganó Chávez por amplio margen.
¿Por qué lo esperado?
Porque eso sucede cuando los países llegan a tocar fondo. La enorme mayoría del pueblo venezolano vive en la pobreza y es indiscutible que ellos fueron los que aportaron los votos para que Hugo Chávez volviera a ganar. Lo mismo pasó en Ecuador, Bolivia, Brasil, Argentina, Uruguay y Nicaragua.
Los pasados e ineptos dirigentes de esos países, que no supieron crear una economía que permitiera al pobre el salir de su pobreza, y que por el contrario, aniquilaron la clase media, han sido los culpables, que actualmente estén gobernados por personas idealistas, que aunque no ofrezcan un crecimiento a largo plazo, ofrecen un pedazo de pan en la mesa. Lógicamente, es jugar con fuego, si estos gobiernos idealistas no toman el camino que optó por tomar Chile e inclusive China, que es el camino de las negociaciones con países que poseen lo necesario para el avance tecnológico que el mundo de hoy demanda.
No importa que estos gobernantes sean de izquierda, siempre que no se aferren a un fanatismo enfermizo como lo ha estado demostrando Hugo Chávez a través de su mandato. Es notorio ver, cierta decadencia en la producción de petróleo, dada a la falta de inversión y tecnología y a ciertos accidentes que se han producido en los últimos meses por no tener un mantenimiento adecuado y requerido. Esto, pone en claro que un gobierno nunca está apto para comandar una empresa y que si la empresa no sigue invirtiendo en personas capaces y en nuevas tecnologías, llegará el día de su fatal fallecimiento.
Según la OPEC, Venezuela no produce diariamente los 3.3 millones de barriles que pregona, si no que su producción diaria está solamente en 2.6 millones de barriles.
Otra cosa bien sabida, es que los países ya no pueden vivir solamente basados en una materia prima y que si no se industrializan seguirán perdiendo inercia económica.
Partiendo de la base que los Estados Unidos adquiere casi el 50% del petróleo venezolano, que para los Estados Unidos significa solamente un 15% de su consumo, y que este país tiene cuantiosas reservas de petróleo, puede resultar peligroso para el pueblo venezolano, el que Chávez siga blasfemando contra el cliente más poderoso.
Si por cualquier circunstancia, se rompieran relaciones entre estos dos países o los Estados Unidos decidieran ponerle el mismo bloqueo que a Cuba, la situación venezolana, podría llegar a ser caótica.
Sobretodo ahora, que Estados Unidos acaba de desarrollar una nueva tecnología con la cual puede extraer petróleo de yacimientos cavados a profundidades mayores y dentro de su propio mar. Uno de estos yacimientos, está a punto de ponerse en marcha en el golfo de México y se calcula que se podrá extraer hasta un 50% de la actual reserva del país. También siguen las gestiones de nuevas tecnologías desarrolladas por General Motors y Shell, que dejaría obsoleto el hoy tan preciado oro negro.
Ojalá, que el gobierno venezolano renueve su manera de proceder, para beneficio de su propio pueblo.
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