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Año III - Nº 185
Uruguay, 09 de junio del 2006
Inscripto en el Registro de Derechos de Autor en el libro 30 con el No 379
 

 

 

 
Ejemplo contra la prepotencia
y la falta de respeto
 

Hace unos dos meses atrás esta Comisión Directiva se vio en la necesidad de concurrir a sesionar en la ciudad de Maldonado, (ver nuestra pagina Web) debido a la situación por la que estaban pasando los SSOO de la Policía local, con respecto al acoso permanente de que eran objeto por parte del sindicato policial local.

Allí se tomó conocimiento en forma directa de parte de los involucrados, sobre una serie de situaciones en las que integrantes del sindicato, amenazaban y acosaban permanentemente a dichos SSOO, por situaciones de servicio.

El panorama pintado por los testimonios de dichos SSOO, fue sencillamente dantesco y fuera del contexto general.

Para mejor ilustrar, tomaremos como ejemplo la situación por la que ha tenido que pasar nuestro camarada, amigo y socio de nuestra Institución, el Comisario Raúl Acosta, quien fuera hasta el mes de noviembre ppdo. Jefe de la Seccional 10º de Punta del Este, hasta que tuvo que tomar medidas disciplinarias con un SSOO subalterno que no dio cumplimiento a una orden. Resulta que "al parecer" éste se había afiliado al sindicato local "unos días antes" y el colectivo sindical asumió una "férrea" defensa de su "nuevo" afiliado que siempre pudo hacer uso de sus derechos, como lo hizo, de reclamar la sanción, y la tomó contra el Comisario que lo único que hizo fue era mantener la disciplina en la Comisaria a su cargo, sin abusos ni extralimitaciones, en el marco jurídico vigente en una Institución disciplinada y vertical, como debería ser la Policía, en la que se establece legalmente que quien no se ajusta a las normas disciplinaria, no puede; debe ser sancionado.

Así comenzó una campaña de desprestigio, y acoso permanente contra el Comisario Acosta, por parte del sindicato policial de Maldonado, llegando incluso a amenazar por medio de la prensa, con realizar "piquetes" frente a la Seccional 10º de Punta del Este, en plena temporada turística, en un claro acto de insubordinación.

Ante esto las autoridades en lugar de tomar medidas adecuadas con los indisciplinados integrantes del sindicato, cedieron ante la improcedente presión y removieron al Comisario Acosta. Más allá de las "mejoras en el servicio" y otras explicaciones inexplicables.

Lógicamente que el problema no termino allí. La "victoria" lleno de soberbia al sindicato, y siguió con su campaña de desprestigio y acoso hacia la mayoría de los SSOO de la Policía de Maldonado, arremetiendo públicamente no solo contra los Comisarios, sino hasta contra los Oficiales Sub Ayudantes.

El Comisario Acosta, acuso el primer golpe, la indefensión, la falta de respaldo institucional, y amargamente siguió cumpliendo su servicio en forma profesional, en su nuevo destino, víctima de cumplir su servicio en forma profesional y eficientemente.

Pero el sindicato no lo iba dejar tranquilo, ni se contentaría con "haberlo hecho remover", sino que continuó con el acoso, denunciándolo ante las autoridades y ante toda la sociedad por medio de declaraciones en un medio de prensa de tiraje nacional, acusándolo de haber realizado colectas compulsivas entre el personal policial, (cuando en realidad las mismas eran aportes voluntarios del personal que ante las carencias que existen en todas las Comisarías del País, tenían por objeto el mantenimiento de algunas servidumbres de la Seccional de uso general, como compra de gas, productos de limpieza, recambios luminarias, etc., de lo que siempre tuvieron conocimiento y autorizaron los distintos Jefes de Policía, incluso la Jefa actual), a la vez que también lo acusaron de haberse apropiado de mas de $ 6.000 por mes por ese concepto.

Ante este nuevo acoso que ultrajaba directamente su honor, a diferencia del de su remoción, disimulado por la complicidad de "las mejoras en el servicio", el Comisario Acosta "solo", "absolutamente solo", con el único apoyo del Círculo Policial del Uruguay y de algunos camaradas, se presentó ante la Justicia denunciando al presidente del sindicato y autor de los infundios, el Agte. Julio Pereira, policía en actividad, de la Jefatura de Policía de Maldonado, por difamación e injurias, lo que por supuesto esta Comisión Directiva respaldó, moral y efectivamente poniendo a disposición del mismo todos los medios disponibles, para llevar adelante la defensa del buen nombre y honor de nuestro socio.

Luego de mas de un mes de idas y venidas judiciales, finalmente en audiencia publica, ante el Juez Penal de Montevideo Dr. Jorge Díaz, y ante la posibilidad cierta de ser procesado por difamación e injurias, ya que en ningún momento pudo aportar pruebas de sus difamantes declaraciones ante la prensa, en tanto el Comisario Acosta probo fehacientemente y con cristalinidad que nunca realizó ningún tipo de descuento en forma compulsiva, y mucho menos que se hubiera apropiado de ningún dinero, el Agente Julio Pereira, presidente del sindicato policial del Maldonado se retractó públicamente de sus dichos, expresando ante el Magistrado actuante, por sí y en representación del sindicato policial de Maldonado: (textual) "que nunca puso en duda, ni quiso afectar la integridad moral, el honor ni el decoro del Sr. Comisario Raúl Acosta. Que no existe ningún elemento que acredite o que permita concluir que el Sr. Comisario Raúl Acosta dispuso descuentos en forma compulsiva a los funcionarios a su cargo y tampoco que se apropiara de dinero integrante del fondo común de alguna dependencia bajo su mando". "De la misma forma por sí y en representación del sindicato se obliga a difundir a la brevedad posible, con un límite máximo de 15 días, en todos los medios periodísticos escritos del Departamento de Maldonado y medios nacionales en los que se haya realizado este tipo de manifestaciones, utilizando las mismas características en las que se realizó la publicación denunciada, así como enviar comunicados a los otros medios de prensa a efectos de que se tome conocimiento de la presente manifestación, obligándose a enviar las copias respectivas al abogado patrocinante"

Lógicamente que el Círculo Policial del Uruguay, se congratula de tal resultado, y reconoce al Sr. Comisario Raúl Acosta por la entereza moral que ha demostrado, fiel ejemplo del sacrificio y abnegación que requiere nuestra profesión, donde no solo hay que enfrentarse a los avatares de una profesión extremadamente complicada hacia afuera, sino que también hay que enfrentar al enemigo dentro de casa. Y este es peor, por que ataca por la espalda.
Señalamos que hasta el momento es el único escollo que ha tenido que enfrentar el sindicato policial de Maldonado, y que le ha obligado a dejar los jirones en el envite, ya que ha quedado evidenciado que solo se trata de policías indisciplinados, que haciendo gala de una soberbia inaceptable, aprovecharon una coyuntura de permisibilidad de las autoridades, y haciendo un uso equivocado del derecho que sin dudas tienen de sindicalizarse, se han posicionado en la interna policial Fernandina, queriendo crear divisiones y una lucha de clases, y creyéndose jueces y fiscales de sus camaradas, sobre todo si son SSOO.

Pero sin dudas que solo navegaron hasta que un Policía, un Señor Policía (no importa la jerarquía) se les paro enfrente y los hizo hocicar contra el suelo. Y ese es el ejemplo que rescatamos, la abnegación, la entereza y el uso del derecho, contra los embates de la prepotencia y la falta de respeto.

De la misma forma, debemos expresar que no es el sentimiento de esta Comisión Directiva promover ningún tipo de enfrentamiento entre Oficiales y Subalternos, lógicamente que en este caso sabemos que la razón le asiste al SSOO, y eso no lo decimos nosotros, lo dijo la Justicia.

Creemos que la actitud del Comisario Acosta, nos debe servir como ejemplo para parar la mano con algunos atropellos a los que hoy asistimos asombrados.

El Circulo Policial del Uruguay, oportunamente con fecha 27 de marzo de 2006, hizo llegar una denuncia por la situación en general del personal de Maldonado al Sr. Ministro del Interior Dr. José Díaz, -que no nos pudo recibir por razones de agenda-, (ver tenor de la nota en nuestra pagina Web), y hace mas de dos meses que estamos esperando una respuesta a nuestra carta y/o que se asuma alguna actitud con respecto a las anomalías denunciadas.

Finalmente queremos invitar a la reflexión a todos los policías, (sin distinción de jerarquías), primero sobre la situación narrada, y segundo a estar alertas sobre estos nuevos fenómenos que están apareciendo en nuestra policía, y que solo sirven para enfrentarnos, y dividirnos, cuando desde las Instituciones Sociales estamos haciendo los máximos esfuerzos lograr una Policía fuerte y unida.

Viene a colación lo que sabiamente escribió José Hernández en La Vuelta de Martín Fierro:

"Los hermanos sean unidos
Porque esa es la Ley primera
Tengan unión verdadera
En cualquier tiempo que sea
Porque, si entre ellos pelean,
Los devoran los de ajuera"

Al camarada y amigo Comisario Raúl Acosta, nuestro respeto, nuestras felicitaciones y a no bajar la guardia.

La Comisión Directiva

 
 
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