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Año IV - Nº 259
Uruguay,  09 de noviem bre del 2007
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Reflexiones, con verdad y dolor
El Pilsen Rock, el BPS y otras yerbas

por Helena Arce
 
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            Mientras espero que el antes eficiente B.P.S. solucione varios problemas, del programa por el cual debo presentar las nóminas, entre ellos que misteriosamente el mismo dejó de funcionar en mi computadora, y no tenemos solución, ni siquiera instalando nuevamente el programa. (Algo para lo que estoy buscando solución,  desde el pasado 31 de octubre).

            Mientras sigo esperando la llamada con la posible solución, recordé lo que me enteré ayer respecto al increíblemente maravilloso  “Pilsen Rock de Durazno”, que gracias a la inventiva de un hombre inteligente, logró dos objetivos primordiales:

1 Dar a nuestros hijos, adolescentes y ya no tanto, un espacio donde protegidos  y libres pudieran “disfrutar” de su música. Encontrarse con sus amigos,  hacer nuevos, pasar unos días “de ellos y para ellos” con alegría, despreocupación y felicidad.

2 Crear fuentes de “ingresos genuinas”, obtenidas mediante el trabajo,  para los habitantes del centro del país.

            Me  comentó una conocida oriunda de Durazno, la existencia de  duda sobre la continuidad del Festival. Este año increíblemente, un grupo de inadaptados, asoló la población,  a los asistentes y a quienes estaban allí cumpliendo sus tareas a los efectos que todo saliera bien. Hubo robos, golpes, intentos de ingresar sin pagar, y rebeldía a cumplir las normas establecidas,  manifestada con agresividad y golpes. .

            Obviamente ese ínfimo porcentaje, un 0.1% del total de asistentes, no fue a disfrutar ni a escuchar música, pero si logró destruir la magia que durante 4 años, tanto los habitantes de Durazno, como los hermosos jóvenes de este país, de todas las clases sociales, de todos los niveles culturales y/o económicos, lograron crear. Porque 100 personas en 100000, dispuestas a molestar,  lamentablemente hacen daño y se siente. Es una pena pues los 99.900 chicos restantes, la mayoría ni se enteró de lo que estaba sucediendo.

            ¿Que tiene que ver, lo de Durazno con el B.P.S.?

             Posiblemente nada, o todo.

            Ayer los chicos  funcionarios del ente, intentaron ayudarme enviándome un archivo y dándome indicaciones telefónicas. Estos  siempre fueron los usos y costumbres de las oficinas recaudadoras desde que aparecieron los programas informáticos para los contribuyentes, pero no pudieron. Deben enviarlo al Nivel 2, para ello les tuve que enviar nuevamente todos los correos (ya enviados),  con los errores que saltan en mi computadora. Hoy llamé y ellos ya enviaron el mail, deben esperar la contestación, me volvieron a pedir el teléfono, más uno de línea. Se los di, pero le pedí a la persona que me atendió, por favor no se desentendiera del tema, o me dijera con quien debo hablar, pues es claro que el siente, así se lo han hecho entender, que su responsabilidad termina con el envío del correo a quien sabe más. Se lo expliqué y justo es decirlo, me parece me entendió: “El lunes comienzan los pagos, y debo avisar con tiempo a quien debe pagar, cuanto,  además de cuando. Por sobre todo  el lunes tengo que tener la factura de pago al BPS y para ello hay que ingresar primero la nómina.”

            Antes con un programa tal vez más precario, o no tan perfecto, los funcionarios del B.P.S. se desvivían por solucionar la situación, sentían que “ERA SU PROBLEMA” y lo solucionaban, aun si resultaba ser una falla de la computadora del contribuyente, ellos vía telefónica ayudaban hasta encontrar la solución. Lo peor que podía pasar, era que hubiese que desinstalar el programa e instalarlo nuevamente, cargando los datos otra vez. Hoy quienes están a cargo de la atención telefónica, tienen determinados conocimientos, ante un problema un poco más difícil deben pedir asistencia. Y la responsabilidad de ellos termina en enviar el mail. Alguien llamará al contribuyente…

            Pero este no es el único problema, hace varios días envié una comunicación de una empresa que estuvo un tiempo sin personal, y tomó alrededor del 20 del mes pasado una persona, quiero enviar la nómina, pero la empresa figura cerrada, mandé preguntar que sucedía, me contestaron que el trámite demora de 15 a 20 días. Este trámite antes demoraba a lo sumo un día. Pero más allá de eso, yo tengo que hacer la nómina pues la semana que viene hay que pagar y sin presentar la nómina no se puede pagar. .

            ¿Es achacable esta situación a los funcionarios del Banco de Previsión Social? No lo creo.

             Lo que cambió es desde  la cabeza, es la actitud ante el contribuyente. Antes al contribuyente había que facilitarle las cosas, pues lo importante es que pagase en tiempo y forma. Era quien mediante su esfuerzo ayudaba a financiar las necesidades de todos mediante sus impuestos.   Hoy el contribuyente es alguien a quien perseguir, un muy posiblemente estafador a quien se le debe poner la situación difícil, lo más probable es que mienta y el  debe esforzarse en cumplir. Y el cumplir es exclusivamente “SU OBLIGACION”  Y acá no estoy hablando de evasión, ni nada por el estilo, estamos hablando de trámites administrativos liso y llanamente. Pero la actitud ante los contribuyentes es destratarlos lo más posible, y más aun a quienes trabajan para ellos. Ese es el lineamiento que se percibe, más allá de la existencia de excelentes personas realizando las tareas, quienes solucionan problemas, problemas  que sin su buena voluntad serían una barrera infranqueable. Simples plazos que se estiran, trámites realizados a desgano. Si desde arriba nos están diciendo: “Ellos son los responsables, ellos tienen que ocuparse, ellos son los malos de la película, es obvio que quienes de ellos dependen, se comporten en consecuencia.

            ¿Qué pasó en Durazno?

            Pues a los inadaptados, en aras de justificar el verso de la pobreza, se les ha dado manija. No se le ha dado alas a la gente que no las tenía, eso sería darles esperanza, simplemente se les dice que ellos están por encima de los demás, al punto de poder “avasallarlos”. Esto es volvernos a todos sus vasallos.

            Yo vi,  en años anteriores,  chicos irse caminando a Durazno por no tener para pagarse el pasaje.  Ha habido años donde el Intendente mandaba camiones que llevaran a los chicos para que no se fueran o vinieran caminando. Chicos muy pobres, sanos, con necesidad y deseo de disfrutar. Estos otros solo tienen deseo de destruir. No es su pobreza lo que los hace actuar así, es el VALE TODO, esa muletilla que les han metido en la cabeza, a jóvenes y no tanto quienes aprenden a no respetar los derechos de los demás.

            Venimos mal, vamos peor.

            Pensaba en el destape español,  lo viví y lo recuerdo. Fue terrorífico, una sociedad reprimida por décadas, no únicamente desde su libertad en general, muy profundamente incluso en sus actitudes en la vida privada, se soltó muerto Franco y estaban desenfrenados. Como un perro atado por años,  que un día lo soltaron.

            En este país, no sucede eso, desde hace más de 2 décadas. Por lo menos, hasta ahora. Hace más de 20 años que vivimos en democracia, donde justamente al contrario de ahora, nadie se metía en la vida privada de nadie.   Los jóvenes, los adolescentes tenían libertar total de reunión y de expresión. Lo mismo los funcionarios públicos y privados. Claro cada uno hasta hace muy poco,  también era responsable no únicamente de sus actos, sino también de los resultados de los mismos.

            Ahora las cosas han cambiado, ya nadie es responsable, salvo que sea profesional y tenga dinero. Yo no tengo dinero sin embargo no necesito el recuerdo de nadie sobre mi calidad de profesional para sentirme responsable, y no únicamente de mi trabajo. Soy responsable, se de la frustración de no poder cumplir con mis obligaciones por problemas ajenos a mí, y propios. Se de la desesperación de no poder afrontar el pago de mis deudas. También se de la alegría de poder conseguir solucionar los problemas, se de la alegría íntima sentida cuando al fin una deuda se paga.  

            Conozco personas no profesionales, quienes tampoco tienen dinero que se encuentran en mi misma situación, pero fueron educadas fuera del circuito del “vale todo”, por lo tanto ellos tienen necesidades de obtener por su propio esfuerzo,   se sienten responables y no quieren dejar de serlo, anhelan lo mismo para sus hijos.

            En el mundo del cepo, si ando en carro, no importa los años que tenga, donde pare el carro, si tomé o no más alcohol de lo debido, esa es mi patente de pobre Vale todo.

            Mientras escribía esta nota llamé al BPS, me atendió una voz femenina, intenté  explicarle: “soy Helena Arce y tengo un problema con el ATYRO, estoy llamando para ver si hay alguna novedad sobre… “. Me paró en seco: “No tenemos ninguna novedad”, por lo cual le pedí esperara terminara de hablar, pues imaginé era muy difícil adivinara lo que iba  a preguntar. Me dijo que era claro que no había ninguna novedad sobre la nueva versión del programa, la versión que tenían era la última que había salido. Entonces  le expliqué que no era sobre eso, sino por un problema que no me habían podido resolver y quedaron de llamarme. De muy mala manera me dijo que si no se habían comunicado conmigo era porque no tenían la solución, a esta altura le pedí me comunicara con otra persona. Lisa y llanamente me cortó.

            Volví a llamar y me atendió un vos  masculina, un muchacho a quien le expliqué mi problema y me dijo: “En este momento le mandé un mail”.  Lo abrí y por teléfono el me guió mientras yo realizaba las indicaciones del mail. Albricias, el programa volvió a funcionar!!!!!!!.

            Por supuesto que el muchacho de nombre Martín, me dijo no saber quien me había atendido la vez anterior que llamé, es posible que no lo sepa, o tal vez sea esa mal entendida “solidaridad”, donde no entendemos que cuando alguien,  compañero de trabajo se comporta mal, caemos todos en la misma bolsa.

            Bien luego de una semana, feriado entre medio, bien atendida por varios, mal atendida por pocos, con buena voluntad y escasos recursos de los que atienden bien, logré solucionar mi problema.

            Tal vez esté muy entreverado este artículo, pues así está mi vida, como la de todos los uruguayos para quienes no vale todo, desesperados intentando trabajar para poder subsistir, pagando lo que no podemos, y encontrando trabas en todos lados.

            Mientras los que tienen patente para todo, en virtud de ser a quienes tenemos “la obligación de mantener”, barren con todos nuestros esfuerzos.

            Y así desde esta gente, quien por cierto no tiene la culpa, pues le han dicho hasta el cansancio que si roban, matan, o simplemente no cumplen las mínimas normas de urbanidad no es culpa de ellos sino de 170 años de malos gobiernos. Y parapetados en el poder hay un elenco, al que todos elegimos, aun quienes no votamos, pues en el juego de la democracia validamos su elección y es correcto que así sea, insisten en repartir pescado, sin importar de donde lo sacan, sin importar cuanto va a durar. En vez de enseñar a pescar a la gente. Sin intentar crear nuevas fuentes de pesca. No voy a redundar en lo que pienso sobre el famoso estribillo de los 170 años, pobre Artigas, pobre Saravia, pobre Batlle (el otro).

            Pero  es por lo menos doloroso, la pérdida del lugar en el mundo una vez al año para los jóvenes y no tanto,  donde disfrutar sanamente, sumado a la creación de fuentes de trabajo para toda un departamento de nuestro país. ¿Verdad?

 
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