|
Eduardo Hughes Galeano
por Helena Arce
|
|
|
El presidente de Uruguay desaira a Eduardo Galeano
El Universal
Viernes 04 de julio de 2008
MONTEVIDEO (DPA).- Todos los presidentes del Mercosur y Estados
asociados felicitaron ayer al escritor uruguayo Eduardo Galeano,
distinguido en Montevideo como Ciudadano Ilustre del bloque regional, pero el mandatario uruguayo, Tabaré Vázquez, no envió ninguna nota y tampoco hubo un representante de primer orden del Poder Ejecutivo.
"No sé qué pasó, siento vergüenza", dijo un senador del gobernante Encuentro Progresista-Frente Amplio (EP-FA) que pidió no ser identificado, mientras otros dirigentes políticos o funcionarios de
segundo y tercer orden levantaron sus hombros en demostración de desconocimiento de las razones para esa omisión del gobierno.
Nadie dio una explicación oficial, aunque algunos de los invitados, que no ocupan cargos públicos, comentaron que pudo deberse a algunas críticas que ha hecho Galeano hacia este gobierno, a pesar de ser un reconocido militante del Frente Amplio.
La ausencia de saludos oficiales del gobierno uruguayo contrastó claramente con las cálidas y emocionadas notas enviadas por los presidentes del Mercosur y los mandatarios de países asociados.
El presidente electo de Paraguay, Fernando Lugo, dijo también que ya invitó al escritor para que lo ayude.
"Queremos que participe de foros y seminarios en los barrios, con los jóvenes", reveló el ex obispo que asumirá el 15 de agosto…
Ya había sido nombrado ciudadano ilustre de Montevideo, el escritor Eduardo Hughes Galeano, quien eligió, como tantos otros artistas, cambiar su nombre con el que se lo conoce en su profesión por el de Eduardo Galeano. Muchos lo critican por este hecho, yo no, es práctica común en los artistas tener un nombre diferente para su actividad profesional, al que llevan en su documento de identidad, ya sea como en este caso, cambiando algo el propio, o inventándose uno totalmente diferente. No era una práctica común en Uruguay, y por eso tal vez haya llamado la atención, o sido utilizado por sus detractores. Sin embargo existen aquí también otros, Así como sabemos que el nombre del informativista Traverso de Canal 10 no es el que figura en su cédula de identidad, o el del Canario Luna, se lo cambian por sonar mejor otro, él ha hecho lo mismo.
Es sin lugar a dudas un gran escritor, domina como pocos el arte de plasmar en letras sus pensamientos. Suelo leer, gracias a una querida amiga que me los copia y envía por mail, textos de Galeano en forma permanente, y doy fe que sus palabras acarician, envuelven, suenan a música para quien las lee.
En medio de su brillantez en el dominio de la escritura, Galeano no se mide a la hora de opinar, y dar sus puntos de vista sobre cualquier tema, sin importar cuan mucho o poco, conozca de él.
Así expone sus teorías, y su peculiar modo de ver el mundo, donde se afilia a las teorías que cree correctas, como nos sucede a todos. El problema no pasa solo por él, sino por quienes entienden sus artículos, libros u opiniones verbales como la fuente de la sabiduría. Claro él tampoco alerta que esa es su “sensación”, y no se tomó el trabajo de analizar concienzudamente el tema, asistido por técnicos especialistas.
Ello es claro por ejemplo en su libro más conocido: “Las venas abiertas de América Latina”, escrito con su exquisita prosa, hace que quienes lo leen den por cierto lo allí expresado. ¿Es cierto? No lo sé, es una teoría. Pero muchas personas lo toman como la “verdad revelada”.
Ocurre permanentemente, Galeano se expresa, da su versión sobre cada hecho que ocurre en el mundo, y en particular de nuestro país.
Obviamente no creo que nadie deba censurar ni sus dichos ni sus escritos, está de más decir que me afilio a la NO CENSURA, irrestricta y sin ningún condicionamiento. Pero pienso que debemos ser más cuidadosos quienes lo leemos, a él y a cualquier otro, a la hora de considerar las palabras impresas, armoniosamente expuestas, como ciertas. Podría estar de acuerdo en su premio como escritor, si se refiriese expresamente a su calidad como tal y nada más.
Desconozco el motivo por el cual el gobierno de mi país, no se ha hecho presente en la distinción otorgada al escritor, pero celebro el hecho pues tampoco se ha medido Galeano, a la hora de decirle a nuestros gobernantes qué y cómo hacerlo. Y podremos disentir con nuestro gobierno, y desde nuestras posiciones de simples ciudadanos de a pie, criticarlos o alabarlos, pero siempre dentro de nuestras limitaciones, o siendo francos a la hora de manifestar lo que sabemos o no.
Galeano se ha manifestado frontalmente en contra de la instalación de las plantas procesadoras de planta de celulosa, por ejemplo, y cuando lo escuchaba me preguntaba: “¿Qué sabe él científicamente sobre este tema?”, ¿se documentó lo suficiente? ¿pidió la opinión de más de un experto sobre el tema? No hay duda que el equipo de gobierno sí lo ha hecho, puesto que han cambiado radicalmente su posición, y han sido meticulosamente cuidadosos con el tema. Es más, podremos enojarnos una y otra vez con el Presidente del Uruguay, por sus diferentes decisiones, pero no podremos de ninguna manera negar, posiblemente por su deformación profesional, su preocupación constante por nuestra salud. Ha llegado el punto de alguna vez mirarlo, recordar a alguna tía vieja, que no nos dejaba vivir en paz, diciéndonos no fumes, no comas tal cosa, acosándonos en su preocupación por nuestra salud. Es imperdonable que un uruguayo, conociendo al Dr. Vázquez, se permita dudar sobre sus buenas intenciones al respecto. El no sería capaz de autorizar el funcionamiento de las plantas si estas fueran dañinas, en alguna forma a la salud. Y de salud el Dr. Vázquez sabe, tampoco nadie puede dudar de ello, es sin lugar a dudas uno de los mejores médicos de nuestro país.
Cuando un autor escribe, es importante más allá de lo bien o mal que lo haga, ser franco y decir: “Esta es mi opinión, mi sensación, lo que yo creo”, o al contrario postular una teoría y dar las fuentes analizadas para construirla. En los libros uno suele encontrar siempre el alerta sobre si es algo que pertenece a la ficción, la aclaración de haber variado en algo la realidad, o las fuentes expresas y concretas referenciadas.
Mi gran duda, luego de verlo cual Maradona opinando sobre los dogmas vaticanos o la economía de su país, sobre los más diversos temas, es si cuando escribió sus “Venas abiertas de América Latina”, ¿se fundamentó en documentos históricos?, ¿pidió el estudio de análisis sico-sociológicos?, ¿realizó un concienzudo estudio que le llevara a fundamentar esa teoría en bases sustantivas?, o ¿simplemente expresó bellamente sus preconceptos?
Tal vez se piense que no es de recibo comparar a Maradona con Galeano, en realidad no los comparo a ellos, sino a quienes reciben las opiniones del primero con la ansiedad del fervoroso religioso que espera para tomar una decisión cual es la opinión del cura de su parroquia, y lo mismo a quienes les sucede con Galeano. Existen personas que lo leen con espíritu de autocrítica, deleitándose con su prosa pero siendo capaces de entender que no necesariamente lo allí escrito es la “verdad”, y otros que lo leen con el espíritu mencionado para Maradona. Me ha pasado de pedir a alguien que me fundamente una opinión fiscal, y para ello me hace llegar un artículo de Galeano, he optado por reír por dentro, por no llorar, ni agredir a la inocente persona, preguntándole ¿donde estudió Galeano tributaria?
Me preocupa lo dicho por el electo Presidente de la República del Paraguay, "Queremos que participe de foros y seminarios en los barrios, con los jóvenes”, pues uno se pregunta si es o no bueno para jóvenes espíritus, la letanía quejosa que despide Galeano. Su versión de los hechos es “Todo lo malo que nos pasa es culpa de los otros, y nada podemos hacer para cambiarlo, más que llorosamente rebelarnos contra ello” Obvio que esta frase es de mi autoría, y es un resumen que saco de la impresión dejada en mi alma, por sus escritos.
Existen varios excelentes escritores en el Uruguay en particular, y en el MERCOSUR en general, para que sea Eduardo Galeano el primer galardonado, comenzando por Mario Benedetti, por citar un ejemplo.
Creo que más que a Galeano o a su obra, lo que se ha pretendido galardonar en este MERCOSUR tan particular que estamos viviendo, es una filosofía de vida, que como uruguaya me niego a compartir, somos pobrecitos y nada podemos hacer por nosotros mismos, lo malo que nos pasa es por los ogros malos. Posiblemente no haya sido la posición de todos quienes lo premiaron, otros tal vez, hayan querido hacer un homenaje a un autor uruguayo, o a un brillante escritor como sin duda lo es. Pero no puedo dejar de celebrar la no presencia del gobierno uruguayo, cuyo motivo, repito, desconozco por completo.
A veces en afán de ser amables, damos galardones a quienes no lo merecen, o su merecimiento está en duda, como ocurrió con el recientemente “Ciudadano Ilustre de Montevideo” otorgado al Presidente de Nicaragua, quien ostenta una denuncia por violación. No tengo idea si es culpable o no de la misma, pero en un tema tan delicado hasta que se determine su inocencia, por lo menos debió haberse dejado en suspenso el mismo. Podía perfectamente haberse esperado su declaración de inocencia, y en ese momento invitarlo y nombrarlo como tal, sea o no en ese momento el primer magistrado de su país, no es menester serlo para recibir ese nombramiento. Pero si es encontrado culpable, quedará en nuestros anales haber declarado ciudadano ilustre, a nada menos que un violador de su hijastra. Esperemos no haber cometido la misma atrocidad, la perpetrada cuando se declaró nada menos que a Pinochet ciudadano ilustre.
Obviamente el caso de Galeano no pasa por esos temas, no pesa sobre él ninguna denuncia, ni es un dictador, no comparemos.
Solo la duda sobre cuanto bien le puede hacer a las mentes que envuelve con sus bellos escritos, sin la más mínima información científica, opinando de los temas que se le ocurren sin alertar a quien lo lee, que son únicamente sus opiniones.
Comentarios en este artículo |
|
|
|