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Gobierno esquizofrénico
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| por Michael S. Castleton -Bridger |
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Hace unos días recibí un mail de un apreciado amigo, que me dejó por lo menos pensando. Mi amigo me contaba que como integrante de no se cuál cámara de comercio iba a tener un reunión con el Ministro de Industria Lepra. Entonces se me preguntaba si tenía alguna sugerencia sobre qué tema encarar con tan distinguido miembro del gobierno.
Mi primera reacción fue de ignorar la misiva ya que la confianza con este amigo lo permitía, ya que no me pareció un tema demasiado importante. Hete aquí sin embargo que la otra parte siguió con la inquisitoria llamándome telefónicamente para repetir la pregunta.
Ahí si, pensé una respuesta, y me surgió lo del título y le sugerí a mi amigo que le preguntara al ministro en buen romance que era lo que él estaba haciendo en este gobierno de locos.
Mi sugerencia fue, preguntarle a Lepra cómo él que fue un distinguido directivo regional en una de las ‘Siete Hermanas’ que durante décadas manejaron el negocio del petróleo en el mundo , justo él, pudiera enrolarse en las filas de un gobierno como el que padecemos.
Porque la realidad es que este gobierno tiene doble personalidad, encierra en sus filas dos visiones totalmente antagónicas del mundo.
Por un lado Astori y quizá Lepra tratando de buscar inversores e inversiones para el país y por el otro y en forma simultánea los Garganos y los Marenales de este gobierno tratando de llevarnos a la colectivización más absoluta y anacrónica.
A mi juicio, y repito lo dicho en otros escritos un gobierno debe mínimamente tener una comunalidad en su proyecto de país. Un gobierno y sus integrantes deben tirar todos del mismo sobeo y en el mismo sentido, sin embargo no es así; hay como dos bandos tirando en sentido opuesto y el chicle somos los Uruguayos todos.
Esto es malo , muy malo porque en el mediano plazo no hay sociedad que lo resista y el chicle se rompe. Hoy ya estamos viendo los resultados de esta lucha intestina en los problemas inflacionarios que estamos teniendo. Ningún país, ninguna economía puede aumentar el gasto público como lo ha hecho esta gente y esperar no tener repercusiones serias a nivel macro económico. Ninguna economía soporta un aumento tan desmedido del gasto del estado sin consecuencias inflacionarias. Astori y su gente lo saben de memoria pero piensan que van a poder con el problema y que es el peaje que le hacen al otro bando. Si a esto le agregamos las tonterías como producir azúcar en Uruguay, o como regalar Pluna o etc.etc. entonces la situación se vuelve cada vez más complicada y no se arregla importando pollo del Brasil.
Acá hay un problema estructural, fundamental, que hay que enfrentar, que es sencillamente qué país queremos la mayoría de los Uruguayos.
Me aventuro a decir que no es el de Gargano,Nora Castro o Julio Marenales pero bien puede ser con matices el de Astori, Lepra o algún otro más sensato que los hay.
Lo que esta gente debe hacer es clarificar de una buena vez su propuesta de país porque si no lo hacen le están mintiendo a la gente y eso no es sostenible en el largo plazo, ni siquiera en el mediano plazo y en esa ya estamos.
La coalición de gobierno debería acordarse de una gran verdad que es que se puede engañar a parte de la gente todo el tiempo, toda la gente parte del tiempo, pero nunca a todos todo el tiempo. El que piense que esto es posible se enfrenta a consecuencias nefastas y la mayor parte de las veces de una rapidez y destructividad asombrosa.
El gobierno es un tema de confianza, desgraciado e inviable el gobierno que pierde la confianza de sus gobernados.
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