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Plantas de celulosa
Las Imaginación al poder o el poder de la imaginación
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por Luis Anastasía (Perfil) |
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El 30 de octubre de 1938 se produjo uno de los hechos más terribles y a la vez poco comentados. A raíz de lo que se trasmitía por radio, personas de Nueva York y Nueva Jersey invadieron las calles y caminos intentando escapar. Esa muchedumbre que se agolpó arrastró a otros consigo que reaccionaban por ver la desesperación de quienes pretendían escapar de los amenazantes gases venenosos, aumentando aún más el estado de pánico general. Algunos recurrían a toallas mojadas para cubrirse el rostro, mientras seguían escuchando las conmovedoras y trágicas palabras del relator.
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Conchillas, 30 de setiembre de 2007.
Sr. Anastasía:
Mi nombre es Carmen Guerrero, soy la madre de Paola la profesora de física, soy integrante de la Comisión de Amigos de Conchillas y además trabajo en Junta Local con Adriana Alonso, compañera y gran amiga.
Le escribo porque me parece que es un deber que tenemos con Uds. trasmitirles nuestro agradecimiento por todos los conocimientos que nos dejaron y porque desde ese momento nos hemos “sacado un peso de encima”, ya que en algunas oportunidades habíamos llegado a dudar, luego de la invasión de los ambientalistas. Yo desde diciembre que se anunció la instalación de Ence, no he dejado de ir a ninguna de las reuniones que se han hecho, incluso fui a la de los ambientalistas cuando vino Galli (eso sí que fue una payasada) y cómo le digo yo siempre pensé desde el primer momento que la planta contaminaría cómo lo hace cualquier acción del hombre, pero a veces me ponía a pensar si sería o no. La verdad es que me hubiera pasado horas escuchándolos porque las explicaciones que dieron fueron tan, pero tan claras, que nos hicieron sentir muy bien, la verdad, me hubiera gustado que hubiera estado lleno el local para que la gente de Conchillas no se lo hubiera perdido y se sacara las dudas cómo lo hicimos nosotros, pero igual nos hemos encargado de difundirlo a todos los que hemos podido con tanto entusiasmo que es como si hubieran estado. Esa misma noche, cuando llegué a mi casa a eran las 24 hs , llamé a mi hija mayor que vive en Montevideo (tiene 24 años es Licenciada en RR II, trabaja en Cancillería) para contarle de lo bueno que había sido para nosotros lograr que Uds. estuvieran acá y de todo el desarrollo de la reunión que no paraba de hablar.
Lo bueno es que Uds. nos entendieron a nosotros, porque nos ha dado mucha rabia todo lo que los medios han hablado de Conchillas, cada uno que venía a hacer notas la primera imagen que daba del pueblo y de la gente era de que estábamos atrasados 100 años y que de aquí nadie había podido salir, ni a estudiar, ni de vacaciones ni a cualquier otra cosa. Con mi hermano, que es uno de los apicultores que tiene más colmenas en la zona, hemos escrito algunas notas a los periódicos del dpto., haciendo notar cual es la realidad de Conchillas: que no es que estemos viviendo en un mundo atrasado y que no es que aquí no tenemos oportunidad a nada y que no solamente queremos la papelera por el trabajo que traerá sino que hay otras cosas más importantes. Algunas las han publicado, otras no, porque no les convenía.
Le agradezco le haga llegar también esta nota al Sr. Ventura (excelentes las explicaciones que dio) y al otro Sr. que filmaba que no recuerdo el nombre y además le agradezco por la ayuda que ha prestado a mi hija por hacerla participar con los chicos del liceo en el proyecto de “tus ideas valen”, que si puedo también los ayudaré porque participarán mis otros dos hijos más chicos que van al liceo.
Nuevamente le agradezco por haberse preocupado por Conchillas y la gente de acá y por darnos los conocimientos para afirmar lo que en un principio creímos y para no dejarnos avasallar por unos “locos” que no saben ni de qué hablan y que lo único que les importa es que la prensa los tenga en cuenta.
Les agradecemos infinitamente.
Un saludo cordial.
Carmen Guerrero
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Esto fue lo que ocurrió cuando Orson Welles narraba en tono tan dramático como realista la invasión a la tierra por los marcianos. Era la adaptación a un guión de radio de la famosa novela La Guerra de los Mundos, publicada en 1898 y su autor fue el novelista y filósofo británico Herbert G. Wells.
Lo curioso es que 60 años después de esa trasmisión, una radio de Portugal y otra de México hicieron una adaptación contemporánea de ese guión y provocaron reacciones similares en las personas.
El pasado primero de octubre en un programa de la radio CX36 [1] se anuncia y sostiene una serie de calamidades, intentando iluminar a la población para que se despierte y reaccione frente a los terribles hechos denunciados. Pero esos hechos tan terribles que se declararon no pasan de tener el mismo fundamento que el guión de radio leído por Welles en 1938. No resisten el mínimo análisis crítico. El título de la trascripción de la entrevista dice que “...Delia Villalba denuncia derrame de Botnia en el río Uruguay”. En ningún momento se aportan pruebas. Todo se basa en rumores.
Una brillante manipulación de la información, reconozco, pues parte de la base de una realidad relacionada con las pruebas de las piletas de tratamiento. Efectivamente durante las pruebas, que se realizan justamente para comprobar que todo esté correcto antes de empezar a operar, se detectó una pérdida por las juntas de unión de las placas de cemento que no estaban correctamente selladas. Pero esa pérdida fue descubierta y además se verificó el funcionamiento del sistema de control construido para detectar problemas: el líquido fue retenido y recogido hacia una cámara y de esa cámara fue bombeado a otra pileta. No existió nunca infiltración en el suelo ni mucho menos derrame hacia los cuerpos de agua cercanos. Basado en ese hecho, entonces ya se puede seguir desarrollando una lógica extraña: “Entonces, si esas piletas tienen sus derrames también es fácil de creer” que hace más de un mes se están derramando productos químicos. Hasta dice que se han tomado fotografías pero nadie las muestra, que nadie habla por miedo. Este es un típico argumento de quienes no pueden probar lo que no es verdadero, recurren al mínimo nivel de la escala de referencias: la gente tiene miedo. Cuando se les exige e insiste que demuestren lo que están denunciando, como en otros casos hasta la muerte de personas o el nacimiento de niños deformes, se llega al otro extremo de la escala: el gobierno oculta los hechos y la información. Así se llega a que la fuente de información más fidedigna a la que pueden recurrir es la vox populi, manera elegante de referirse a los rumores, los chismes, las habladurías.
Estimado Luis:
Hoy decidí dedicarme a escribir estas líneas ya que ayer tuvimos reunión con la "Comisión de Amigos de Conchillas" y quería contestarte.
Nuevamente vuelvo a repetir mi agradecimiento y el de todos los compañeros de comisión que la verdad hemos quedado muy contentos y con la adrenalina a mil.
Todos con los que he hablado quedaron muy conformes y con muchas ganas de seguir con estos debates, incluso hasta los que no fueron y se enteraron después de lo bueno que había estado.
La verdad que como Uds. pudieron apreciar por lo que leí en los emails que me reenviaste, es muy cierto que nuestro pueblo necesitaba alguien que nos apoyara y que nos explicara en un lenguaje que pudiéramos entender (gracias a Dios Uds. lo hacen muy bien) que no estamos tan equivocados al estar de acuerdo con lo que el futuro nos depara con la instalación de ENCE.
Teníamos la esperanza de no estar tan equivocados como los amigos Borgogno nos quieren hacer creer, y que con esto no vamos a dejar un futuro de muerte para nuestros hijos, pero esta charla fue muy buena como para aclarar muchas dudas y nos hacía falta que alguien que no solamente "haya leído" sino que "haya leído, estudiado, aprendido y comprendido" nos diera la certeza de lo que sucede con las pasteras.
Todo Conchillas quería gritar y contestarle a esta gente, pero la verdad que no tenemos los conocimientos y la facilidad de palabras que Uds. tienen para desmentir las afirmaciones que ellos hacen, que por cierto lo dicen tan convencidos que llegan a hacernos dudar, si no seremos nosotros los equivocados.
Aunque es verdad que tenés un problema con los nombres, yo me llamo Adriana y no Alicia, ja, ja, y la joven Profesora de Física es Paola Hernández Guerrero, es hija de mi compañera de trabajo, amiga y compañera de la comisión Carmen Guerrero. Por cierto les reenvié toda la información que he recibido a ella y a varios de la Comisión, Paola quedó muy contenta con sus palabras las que corrió a mostrar a algunos colegas del liceo, los que también se pusieron contentos con el material que había llevado (les dimos las transparencias) y ya les indicaron trabajos a los alumnos sobre estos temas.
Me alegra que el dinero que les dimos haya servido aunque sea para pagar los gastos de combustible, aunque lo que Uds. nos dejaron no tiene precio. Los felicito y les agradezco la tarea que ese grupo está haciendo, espero que les hagas llegar mis agradecimientos y saludos en especial a la gente que no despedí el sábado, los Sres. de Fray Bentos y Soriano, ya que también estuvieron muy buenas sus intervenciones.
Espero que estas humildes líneas sean una gota más para darles fuerza para que continúen con esta noble tarea que han elegido y que ya está dando sus frutos, pero con el tiempo será memorable. Por cierto he recibido más mensajes de otros participantes del grupo que se han puesto a las órdenes y me hacen llegar información que reenvío a mis contactos, incluso ya vimos publicados en la red algunos artículos sobre la charla, que nos gusta mucho que aparezcan, ya que nos hemos enterado que en el resto del país suenan mas fuertes los que están en contra, los otros somos muy pasivos, pero me parece que ya se encendió la mecha.
Te cuento que en la convocatoria que hizo en la prensa se leía por completo la presentación que me enviaste y mucha gente me comentó que creían que esto lo organizaban los que estaban en contra, ya que se mencionaba "un Uruguay multiproductivo" y "celulosa y forestación" que son frases que prácticamente los identifica y no decía nada de ENCE que es lo que al pueblo le interesa. Si hubiésemos mencionado ENCE en las invitaciones se llenaba la sala, pero no podíamos, somos imparciales o mejor dicho "no somos parte interesada".
Te cuento que creo no lo hice como está integrada la Comisión: Pte. Dr. Mario E. Colman su mail: Vice. Pte. Yo Secretaria: Gianela Fonte (no pudo estar, lo que lamentó mucho ya que tenía otro compromiso en Colonia) pero está al tanto de todo ya que le paso toda la información a ella e incluso ya hizo algunos envíos a la prensa local para contar un poco de esta actividad) mail: Ella es Edil Departamental, aparte de sus actividades particulares ya que trabaja en la empresa familiar (un pequeño tambo y huertas) Pro-Secretario: Celestino Fernández su teléfono 0000-9999 (Carpintero) nacido en Punta Pereira y un poco efusivo, lo conociste, el SR. de campera negra sentado en primera fila junto a las dos señoras mayores y que se dirigió gentilmente al joven Nahuel, ja, ja, ja. Tesorera: María Esther Giribone (la mamá de Mario, que es la partera del pueblo y trabaja en CAMOC, la sociedad médica del pueblo). Los demás integrantes que estaban son Miguel Delgado que también es edil de la Junta Local, Julio Montero (Emp. Municipal del Taller Mpal. de Colonia), Santiago Arenas (Productor rural), Manuel Montero (comerciante), Adriana Sosa (también Emp. Municipal - la Sra. que los atendió en la Casa de la Cultura donde funciona la Oficina de Inf. Turística que ella atiende), Carmen Guerrero (Emp. Municipal en la Jta. Local) y no estaba Pedro Repetto (está a cargo de un establecimiento rural que su dueño es español en contra de las pasteras, y Pedro también) pero es una persona con la que se puede hablar y entiende lo de la no contaminación, al que también le envié los artículos que me mandaste.
Los mail de alguno de ellos: Esther Giribone - Miguel Delgado - Pedro Repetto - Me faltan los de Adriana Sosa y Carmen Guerrero pero ya te los voy a enviar. El de Paola es [email protected] Bueno ahora si me despido, esperando poder hacer otra jornada con mucha mas gente que quiere escucharlos y con los que ya los conocemos que queremos volver a verlos.
Muchísimas gracias a todos nuevamente y sigan adelante.
Un abrazo.
Adriana Alonso. |
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Para comprobar que esta forma de pensar no fue un accidente o caso aislado, en la misma entrevista que le realiza el conductor de Contrapunto, Efraín Chury, Villalba habla de “la intoxicación a aquellos quince operarios con el gas sulfhídrico”. En esta afirmación vemos como se usa la mesura exagerada y un error. El error es que no fue gas sulfhídrico sino polvo de sulfuro de sodio. La mesura exagerada porque no cayó en el mismo nivel de fértil imaginación del periodista argentino que adjudicó nueve muertos por esta causa. Se refiere a quince operarios cuando en realidad fueron dos los que quedaron en observación durante 24 horas. Y no fue más que un accidente laboral, que no debió haber existido es cierto, pero no fue más que eso.
Cuando se consulta a la prensa y se cruza la información en el tiempo sobre datos de operarios efectivamente trabajando en la construcción de la planta de celulosa, se llega a un cálculo estimado de entre 13 y 14 millones de horas trabajadas. Si en ese período han podido usar sólo este hecho como un “accidente ambiental” pues me parece que estamos francamente exagerando, fuera de toda escala. Sin embargo este incidente fue tomado como accidente ambiental, derrame tóxico lo más usado para describirlo, y actuó como catalizador del estado de miedo de Gualeguaychú. A esa pequeña cantidad de polvo se le atribuye que horas después y viajando contra el viento, provocó la intoxicación de mujeres sobre el puente internacional, luego dolores de cabeza en otros que se levantaban de dormir a muchos kilómetros de distancia. Además era capaz de cambiar pues hacía sentir fuertes olores a Cloro que es imposible que el sulfuro de sodio lo tenga.
Luego han seguido acumulando argumentos que surgen de la mera imaginación alterada tales como la muerte y desaparición de abejas y colores en la lluvia atribuidas al funcionamiento de Botnia, cuando ni siquiera está operando. En el pináculo de la imaginación, Fritzler sostuvo que las manchas encontradas en el Río Uruguay es perfume que se tiró para no sentir, o disimular, el olor a huevo podrido.
En todo el desarrollo de la entrevista no se aporta un solo dato, una sola prueba, sólo presunciones basadas en rumores. Desde el principio, hasta el mismo final donde el periodista haciendo gala de más desinteligencia que sentido del humor se refiere al éxito alcanzado en materia de prostíbulos. Tema sobre el cual tampoco aporta nada cierto. Sólo porque él lo dice es verdad absoluta. No hace falta hacer investigación.
Vivimos en un tiempo en el que se apela a los derechos, derecho a la libertad de expresión, derecho a elegir el país que uno quiere o pretende. Pero los mismos que usan y abusan de este derecho olvidan que en la convivencia en la sociedad los deberes y la responsabilidad tienen el mismo peso que los derechos. El deber de informarse y la responsabilidad de no incurrir en mentiras sistemáticas. Han elegido, hace tiempo, la senda de la mentira pues ese camino exige menor esfuerzo.
Es tiempo de decir en los medios que los marcianos no nos están invadiendo.
Sauce, 5 de octubre de 2007.
(1) Analista ambiental de proyectos industriales y de infraestructura
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