Siete días de una complicada semana bisagra
	por Raúl Seoane

	Comentar Artículo Contactos Otros artículos de este autor Imprimir Artículo

            Siete días de una semana que tuvo todos los ingredientes necesarios para poder ser la semana de la bisagra. La bisagra de nuestras relaciones con Argentina, la bisagra de nuestra asociación con el Mercobluff, la bisagra del futuro del país que queremos.

Lo más contaminante

            Lo más grave que generó la Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú es el odio que los propios ambientalistas se autogeneraron, y este odio, fogoneado por los punteros del gobernador Busti, va a ser muy difícil aplacarlo ya que el propio gobierno argentino no está dispuesto a ponerle límites.

            Por más que se busquen y acaso se encuentren soluciones negociadas entre ambos países, ese odio y resentimiento va a durar largos años, sobre todo del lado entrerriano.

            Que tengan o no tengan razón quedará demostrado cuando el Tribunal de La Haya emita su veredicto en el pleito iniciado por Argentina. Pero este pleito fue llevado ante el alto tribunal a pedido expreso de los propios ambientalistas y hoy, con grandes posibilidades de que el fallo les sea desfavorable, están diciendo que no lo acatarán.

   Ante este panorama una solución negociada es muy difícil y luego del fallo probablemente desfavorable a las aspiraciones de los revoltosos entrerrianos la situación empeorará, ya que la nueva presidente de los argentinos, siguiendo la política populista de su consorte, arengó contra el presidente Vázquez como si él fuera un díscolo lacayo a su servicio al que hay que retar públicamente.

            Muy caballerosamente, Tabaré Vázquez no opinó sobre esta nueva afrenta del matrimonio KK, pero en un equívoco gesto hacia el gobierno argentino prohibió el ingreso de un buque de guerra inglés al puerto de Montevideo, a pedido de la Argentina. No podemos ser tan obsecuentes en la búsqueda de una solución al conflicto de las pasteras porque jamás la lograremos por las buenas con un nuevo gobierno que no es más que la continuación del populismo anterior.

Conventillo por Sigfredo Durán     La primera impresión que se tuvo cuando la Señora hizo un aparte en su discurso para agradecer la presencia del Presidente uruguayo, fue que nos encontrábamos frente al inicio de una política de reconciliación ante un conflicto que jamás debió haber existido y que su marido dejó en manos de organizaciones piqueteras.     Pero no, el afán de protagonismo de Cristina Kirchner la llevó a lanzar acusaciones y reproches sobre Tabaré Vázquez en un lugar y ocasión en que el sentido común y el don de gentes que debe acompañar a un Primer Mandatario indicaban que no eran los adecuados.     Se continúa con la política internacional del conventillo, este ataque a un Presidente imposibilitado de responder y que en representación de un pueblo hermano asistía a una ceremonia a la que había sido especialmente invitado, hubiera requerido el consabido ¡Por qué no te callas!, el que quizás por su condición femenina, la Señora no recibió. Fuente: La Historia Paralela

            La nueva administración de Kristina es la continuación, corregida y aumentada, de la anterior, y la dualidad de sus acciones queda demostrada en la información sobre la visita realizada por la visita que Dominique Strauss-Kahn, director gerente del Fondo Monetario Internacional, realizó a ese país. Para no extenderme, recomiendo leer el artículo “¿Qué quiso decir el FMI? 2 interpretaciones”, en el que se puede comprender de qué manera el gobierno argentino manipula la información para que la misma se torne a su favor.

            El Uruguay debe apartarse rápidamente de estos enfrentamientos que sólo buscan el traspié de la posición uruguaya para aprovecharlo hipócritamente en el Tribunal de La Haya. Ya está todo demostrado. No existen dudas de que el argumento argentino de violación del Tratado del Río Uruguay es falaz, por lo tanto no les sigamos el juego. Tabaré Vázquez debe emular a Juan Carlos de Borbón y decirle a sus funcionarios ¿Por qué no te callas?

Un Mercobluff tambaleante

            La opinión internacional es unánime en que el actual Mercosur agoniza mucho más rápidamente de lo que los gagános desean, y el ingreso de la Venezuela bolivariana dentro del tratado es incierto.

            El gobierno argentino está desesperado por firmar un Tratado de Libre Comercio entre el Mercobluff y el Estado de Israel, pero este TLC pone sobre el tapete la probable exclusión de Venezuela del tratado mercosuriano, en razón de su relación cada vez más carnal con Irán, enemigo acérrimo de los israelíes.

            El gobierno brasilero pospuso hasta el próximo año el tratamiento de la aprobación del ingreso de Venezuela al Mercobluff, y no nos olvidemos que Chávez conminó a los socios que si antes de fin de este año no se aprobaba su ingreso, él retiraría la solicitud.

            Falso, traidor, sin honor y faltando a su promesa el dictador venezolano concurrirá a la próxima reunión de presidentes del Mercosur de esta semana, ya que la derrota por la reforma constitucional en su país lo dejó muy mal parado como para utilizar su prepotencia para lograr sus objetivos, aunque no se va a privar de intentar utilizar políticamente su concurrencia y de utilizar sus petrodólares para comprar voluntades, y prueba de esto último es la valija con dólares encontrada en Bolivia.

            Nuestro gobierno ya dio señales de que este Mercobluff no sirve a nuestro país. Todas las encuestas confirman que los uruguayos quieren que el Uruguay se retire del Tratado. La encuesta permanente de este semanario indica que el 40,5 % de los votantes quieren que nuestro país quede como miembro asociado. El 16,3 % que se retire y el 15.8 % que quede en otras condiciones que las actuales. Si sumamos todos estos porcentajes veremos que el 72.6 % de los encuestados, se una u otra forma, están de acuerdo en que nuestro país cambie su status en el Mercosur.

            Las últimas declaraciones del canciller brasilero Celso Amorín, son prueba clara de que el Mercosur es un acuerdo bilateral, cuando apuesta por el eje 'Brasilia-Buenos Aires' para fortalecer a Suramérica. La reciente visita de Kristina a Lula es otro claro ejemplo de que este Mercobluff es manejado por los dos grandes, en desmedro de los chicos.

            Solamente una pequeña porción del partido gobernante, cuya cabeza visible es el canciller Reinaldo Gagáno, continúa con su posición intransigente de “Más y mejor Mercobluff”.

Relaciones carnales

            Más allá de retirarnos de un inservible tratado y firmar un TLC con los Estados Unidos, las relaciones entre nuestro país y el gran gigante del norte son cada vez más fuertes y fluidas.

            Las relaciones uruguayo/norteamericanas, tradicionalmente siempre fueron buenas y en muchas ocasiones se comprobó que las mismas arrojaron resultados favorables hacia nuestro país.

            Las recientes visitas del jefe del Comando Sur de Estados Unidos, almirante James Stavridis, y la de la secretaria de Trabajo de Estados Unidos, Elaine Chao, son claros síntomas de que el gobierno norteamericano busca optimizar sus relaciones con Uruguay.

            Las últimas negociaciones sobre ese híbrido llamado TIFA, es una prueba de que los Estados Unidos tiene como propósito prioritario en nuestra región, el lograr un acuerdo comercial importante con nuestro país. Este acuerdo podrá llamarse TLC, CLT y como se quiera, pero, aparentemente, las cartas están echadas y el retroceso improbable.

            Veo un Tabaré Vázquez con muy poco margen de maniobra en decisiones trascendentales para nuestro país. Un Tabaré Vázquez más pendiente de la opinión de los conservadores de la izquierda radical que de las verdaderas necesidades de los ciudadanos. Quiero un Tabaré Vázquez más ejecutivo, más decidido a romper con lo que sea para impulsar el progreso y el bienestar. Quiero un Tabaré Vázquez que quede en la historia como el primer presidente progresista en firmar un Tratado de Libre Comercio con el cuco del norte.