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El antídoto contra las dinastías Bush y Clinton: Barack Obama
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por Danny Luque |
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Estamos viviendo un año electoral atípico en los Estados Unidos, aún la primera potencia del orbe.
Atípico por varias razones, es la primera elección presidencial desde el 9-11,un hito que nos ha marcado para siempre en los más de 200 años de vida de esta nación. Por otro lado se postulan una mujer y un afro-americano a la presidencia hechos que demuestran la diversidad que existe en la nación que aún sigue cobijando el famoso "american dream" (el sueño americano).
También podríamos decir que es atípico porque el país está metido en dos guerras no convencionales, una de ellas bastante impopular.
Los candidatos demócratas tienen ciertas similitudes en sus propuestas, la gran diferencia radica en las personalidades, mientras el binomio Clinton tiene más experiencia en el gobierno y en conocer el "establishment" ,no es menos cierto que tienen varios cadáveres en su closet. Desde los años como gobernador en Arkansas hasta su gestión como Primera Dama bajo el mandato de su "media naranja", no son pocos los arreglos tras bastidores y trucos sucios que han utilizado a través de sus respectivas vidas políticas.
Mis respetos para una mujer con un temple de hierro que supo suportar con estoicismo las enormes humillaciones que trajo aparejada los escandalos sexuales de Bill Clinton en la Casa Blanca.
Por otro lado se encuentra un joven senador de Illinois, con escasos cuatro años sirviendo en el Senado.
Gran orador, con un mensaje inspirador, populista, este Senador es uno de los más liberales dentro del partido demócrata.
Una cara fresca, de una minoría, que se muestra como una opción de cambio en un partido en donde la izquierda radical tiene grandes intereses creados.
A diferencia de la extrema derecha que cohabita en el partido Republicano pero no tiene tanto poder de decisión, la izquierda radical a través del tiempo ha logrado imponer sus ideales y tiene voz y voto en sus acciones dentro de este partido cuna de GRANDES líderes como T. Roosevelt y J.F. Kennedy.
De la suma de varios factores surge el fenómeno Obama, que dentro de su partido está captando el voto de los más jóvenes(que por lo general buscan cambios radicales),el voto de los afro-americanos(por lógica),el voto de los progresistas radicales(para muchos el Mesias).el voto de muchos indecisos, y los del voto de Vicente (adonde va Vicente va toda la gente),que por ser el candidato popular de más arraigo, cara bonita, de buena verborragia y lleno de energía le brindan su voto pensando más que están votando por un candidato del "American Idol" y no por el futuro Presidente de los Estados Unidos.
El apoyo total que le está brindando la billonaria y muy respetada afro-americana Oprah Winfrey no hace más que confirmar que Obama (dentro de un sector de la población alcanza ribetes de pop-star), por lo que su exiguo record de votación en el Senado no ha sido tan nocivo (attenti, en las primarias) para esta figura política que, con un mensaje inspiracional, unificador, populista ha podido desbaratar a los Fórmula uno de los Clinton.
Al no existir un vasto récord de votación en el Senado (salvo el voto contra la guerra en Iraq) es difícil "entrarle" por los flancos a Obama, él puede improvisar sin ser acusado de tener dos discursos.
Por otro lado Hillary tiene que explicar una y cada una de sus posiciones, quedando muchas veces mal parada.
No hace mucho tiempo quedó en blanco con el tema de las licencias para los indocumentados, al decir que si estaba de acuerdo y luego contradecirse en la misma entrevista.
Otra contra para Hillary es que es un personaje muy controversial, tan amada como odiada, por lo que origina serias turbulencias dentro de su mismo partido, algo que no ocurre con Obama.
En términos turfísticos podemos decir que Obama es un "tapado", pero que en el "Derby" de las generales se va a desinflar, le falta substancia y sus credenciales son exiguas para pretender timonear a los Estados Unidos en unos tiempos que no son muy halagueños, con múltiples retos a nivel local pero más que nada a nivel internacional.
Por otro lado el factor racial también jugará un factor preponderante en las generales, por ejemplo, sabido es de la gran animosidad que existe entre la comunidad latina y la afroamericana, si para muestra falta un botón la nominación de la Senadora Hillary Clinton en estos momentos depende en gran medida del voto latino en Texas y Ohio el próximo 4 de Marzo.
Si Hillary no es nominada es muy probable que Mc Cain atrape muchos de esos votos latinos que sencillamente no se sienten a gusto votando por un candidato afroamericano. Hoy día habitan casi 45 millones de latinos en los Estados Unidos entre legales e indocumentados, se predice que para el 2050 seremos 128 millones, un tercio de la población! Las cifras suenan muy halagüeñas pero los RETOS para esta comunidad que crece como la espuma son enormes siendo la educación intelectual, sexual y cívica tres pilares que hoy por hoy son el talón de Aquiles de nuestra comunidad.
La próxima administración tendrá que lidiar con los radicales islámicos (al-qaida y co.), a arrogancia del gobierno iraní, el supuesto retiro gradual de tropas de Iraq y de Afganistán, una Rusia con delirios de grandeza, una China que parece un tren imparable, la inestabilidad de Pakistán, el poder desestabilizador de Chávez en Latinoamérica, sumado a la imperiosa necesidad de obtener en un futuro mediato una independencia energética. En fin.....mucha carne para tan poco hueso....
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