PORTACHUELO por René Núñez (*)

Bush+Lula+Tabaré=comercio

            Desde que el mundo es mundo, el intercambio comercial ha jugado un rol estratégico determinante para la satisfacción de las necesidades de los pueblos. Algo natural, si partimos de que no ha habido, ni habrá sociedad perfecta y autosuficiente capaz de alimentar y desarrollar sus nacionales con sus propios recursos. Aun cuando hay pueblos poseedores de inmensos y variados recursos naturales y humanos como el norteamericano, no dejan de importar bienes y servicios que no tienen o no les interesa producir o explotar por razones de costos y/o estratégicas. También los hay sin riqueza natural, pero cuentan con la humana, como la japonesa, importadores de materias primas de todo tipo que luego transforman en productos acabados.

            En el pasado, el trueque sirvió de instrumento práctico para facilitar el intercambio comercial. Cuando las sociedades comenzaron a evolucionar produciendo y demandando bienes y servicios en cantidad y calidad, además de darse cuenta del valor distinto de cada producto, dejaron de lado este medio para sustituirlo por un sistema monetario más justo e idóneo para valorar y facilitar la relación comercial entre productores y consumidores. Desde entonces, cada pueblo de hoy cuenta con una moneda propia, como la nuestra: el bolívar; no obstante, el valor real de ellas, por ahora, siempre ha estado influenciado por el de la moneda más fuerte y aceptada en el mercado mundial como lo ha sido el dólar y últimamente el euro. Esto se produce justamente por el desarrollo sustentable de algunas sociedades productoras por excelencia de tecnología y ciencia, determinantes en los costos actuales de bienes y servicios.

            Traigo a colación esta introducción, a propósito de las giras que los presidentes Bush y Chávez emprendieron paralelamente a varios países latinoamericanos. La de Bush, la más larga, a Brasil, Uruguay (países del Mercosur), Colombia, Guatemala y México; y la de Chávez a Argentina y Bolivia.

¿Por qué Lula recibe a Bush?

            Esta visita no fue producto de la casualidad; pues la cita obedeció a presiones internas de sus pueblos. La sociedad política-económica brasileña reclamó a Lula por haber estado dándole mucha prioridad en los últimos años a las relaciones con el Gobierno de Venezuela (nada desfavorable, por el contrario, muy bien aprovechada con inteligencia por Lula para beneficiarse de las ventajas comerciales extraordinarias ofrecidas por Chávez a cambio de solidaridad política); descuidando la del mercado más importante e influyente del mundo que es el norteamericano, la súper potencia. Por otro lado, la norteamericana hizo lo mismo con Bush por el descuido de Latinoamérica por la guerra de Irak. Como buenos demócratas, Bush y Lula, entendieron el mensaje y le dieron la lectura correcta para repasar las relaciones comerciales para la cual cada uno, por supuesto, hizo el cálculo económico, político y estratégico conveniente a sus intereses nacionales. Me remito a la opinión de Lula después de la visita: "Estoy convencido de que dimos un paso extraordinario para que el etanol se transforme en commodity-producto comercializable y para que podamos ocupar un espacio importante en el mercado internacional".

            Para Bush, fue igualmente provechoso el encuentro no sólo en lo económico, sino en lo político y estratégico. Esta fue su declaración en San Paulo: "Creo que Brasil y Estados Unidos tienen la capacidad de ayudar a liderar el camino para fomentar un cambio en la matriz energética internacional". "Si dependemos del petróleo llegado del extranjero, tenemos un problema de seguridad nacional".

¿Por qué Tabaré Vázquez recibe a Bush?

            No me cabe duda, Uruguay, otro gobierno de izquierda pero democrático como el de Lula y Bachelet en Chile, preocupado por los problemas fronterizos con Argentina, por lo de la instalación de la planta de celulosa; además descontento junto a Paraguay con Brasil y Argentina por el proceso de integración cerrado y no abierto que juegan en Mercosur, obligó al presidente uruguayo visitar la Casa Blanca a finales del año pasado para hablar con Bush y potenciar las relaciones comerciales entre ambos pueblos. La respuesta de Bush se materializa con esta visita a Uruguay; la que Vásquez justificó el pasado sábado en Parque de Anchorena con el propósito de "incrementar el intercambio comercial, la posibilidad de aumentar la colocación de nuestro trabajo en el mercado de Estados Unidos e intensificar el intercambio científico, cultural con el país hermano".

Visita de Chávez a Argentina

            Después de la crisis del corralito argentino, la llegada de Chávez al poder, Venezuela ha resultado un gran negocio para el gobierno de ese país, Néstor Kirchner, siguiendo la estrategia de Lula, ha logrado con el Gobierno venezolano acuerdos energéticos, agropecuarios y financieros muy oportunos para reflotar su empobrecida economía. Hace apenas unos quince días Kirchner estuvo acá en Guayana firmando múltiples acuerdos con Chávez; lo que desde el punto de vista de la diplomacia seria y responsable no se justifica bajo ningún concepto un nuevo viaje de Chávez a Argentina en tan corto tiempo (15 días). Claro, todos sabemos que lo hizo para -dizque- demostrar a Bush de su influencia en América del Sur; ignorando que dos de su supuestos aliados como Brasil y Uruguay lo recibían con todos los honores comerciales. ¿Qué vergüenza de diplomacia la nuestra? Luz para la calle, oscuridad para la casa.

(*) Internacionalista 

Fuente: Correo del Caroní