¡Cuidado, Uruguay! La trampa está abierta por Raúl Seoane

            Dos países del Mercobluff tienen gravísimos problemas con su economía, Argentina y Venezuela. El primero con congelamiento de precios y ahora probables subsidios monetarios a la canasta familiar con un fuerte incremento en las retenciones a la exportación de soja. El segundo, la inflación más alta de toda América Latina con un índice de un 17 %.

Nuestros hermanos argentinos

            Desde hace bastante tiempo vengo alertando de una posible hecatombe económica cruzando el charco. La falta de políticas económicas para contener la inflación y los controles de precios conjuntamente con los “aprietes” a empresarios, son una bomba de tiempo que ya comienza a producir efectos adversos.

            A pesar de las advertencias de muchos economistas argentinos, el gobierno continuó con su política de expansión monetaria y el único control a la inflación que la fuerte demanda produjo, fue el de “negociar” precios con los diferentes sectores de la economía mediante concesiones o amenazas, con lo cual se tapó un volcán con un corcho para evitar su erupción.

            Hoy en día, diversos indicadores económicos e infantiles medidas tomadas por el presidente argentino, muestran claramente que el gobierno no tiene la más mínima idea de cómo controlar el inminente desborde de los precios.

            El viernes pasado, en el Boletín Oficial, el gobierno  publicó las nuevas retenciones a la soja, que subieron en 4 puntos y pasaron del 23,5% al 27,5%. En tanto que para sus subproductos industriales, aceites y harinas, los derechos de exportación treparon desde el 20% al 24%.

            Una medida similar prohibiendo la exportación de carne vacuna redundó en un incremento de la exportación uruguaya de ese producto, ganando los mercados que el gobierno argentino dejó de abastecer. En cuanto a la soja, los analistas auguran mayores áreas de cultivo en nuestro país para los próximos años con el objeto de suplantar la probable merma en la siembra de esta oleaginosa en Argentina.

            En cuanto a los precios, el desabastecimiento es moneda corriente, como así también la merma en alguno de los componentes que conforman el producto. Un párrafo del diario La Nación con respecto a los productos cárneos, ejemplifica la operatoria fascista del gobierno argentino: "De manera sigilosa, con llamados discretos y ante las quejas de trabajadores y operadores del Mercado de Liniers, que el último mes vieron cómo los ingresos de ganado allí se redujeron en más de un 40% por los precios máximos fijados por la Secretaría de Comercio Interior, que conduce Guillermo Moreno, el Gobierno comenzó a presionar en las últimas horas a frigoríficos y hasta a supermercados para que aumentaran sus compras de animales en esa plaza y abandonaran, en parte, las adquisiciones que hacen de manera directa, hasta ahora al margen del control oficial".

            Otra medida que indica la carencia total de medidas económicas necesarias para el control lógico y normal de la inflación, es el anuncio del gobierno de subsidiar la producción primaria de productos que tiene directa influencia en el armado de la canasta familiar, como lácteos, aceites y harinas. A su vez, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, sumó al presupuesto de su cartera $1172 millones para subsidiar a la luz y al transporte.

            Si a todo esto le sumamos el retraso tarifario en luz, teléfono y gas, más la prohibición de aumentar los combustibles con el estúpido verso de que “el petróleo es argentino y nosotros le ponemos el precio”, el coctel explosivo que se está formando es muy grande. Hay que tener en cuenta que en algún momento, y ya comienzan a hacerlo con la luz y el gas para las industrias, las tarifas energéticas tienen que aumentar al igual que los derivados del petróleo, y estos aumentos tienen un efecto multiplicador en todos los productos de consumo, por lo que la inflación en Argentina puede tener consecuencias inimaginables.

            ¿Hasta cuando el gobierno argentino va a poder seguir manteniendo tapado el volcán con medidas transitorias y no de fondo? Es difícil predecirlo, sobre todo en un año electoral y sabiendo que el Gallotero no quiere perder ni a la bolita, pero todo parece indicar de que la presión acumulada está comenzando a expulsar el tapón y sólo es cuestión de tiempo para que el volcán haga explosión, lo que muy probablemente repercutirá en la economía de nuestro país como lo hizo la devaluación brasilera de fines de los 90 y la argentina a comienzos de siglo.

En la República Bolivariana

            Con la inflación más alta de la región, un 17 %, Venezuela se encamina a ser otro foco infeccioso en este Mercobluff cada vez más venido a menos.

            Jurando por Cristo, "el más grande socialista de la historia", el presidente venezolano Hugo Chávez reiteró, al asumir su segundo mandato, sus intenciones de profundizar el sistema socialista y habló de construir un "socialismo venezolano".

            Luego de que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, anunciara la nacionalización de la firma de telecomunicaciones CANTV y empresas eléctricas, se sintieron las repercusiones en las bolsas del mundo, donde los tenedores de bonos de aquel origen intentaron desprenderse de los mismos. El anuncio se sintió con especial fuerza en los mercados de América Latina. Después que Chávez adelantara que la telefonía, la electricidad y las refinerías volverán al Estado, la bolsa de Caracas cayó un 18,7% en un solo día, y una caída del 32,6% entre el nueve y el 16 de enero. Cajas de ahorro y pequeños inversionistas, que tienen recursos por el orden de 78 mil 656 millones de bolívares en fondos mutuales que colocan parte del portafolio en la Bolsa de Caracas, comienzan a obtener resultados negativos.

            La pobreza, la marginalidad y la falta de inversiones en las industrias básicas pueden arrastrar a Venezuela a una espiral inflacionaria con productos de mala calidad y carencia de insumos básicos para su producción, aunque la bocaza de Chávez hace todo lo necesario para que Venezuela se hunda en la miseria.

            Chávez, en su alocada carrera hegemónica, dilapida a manos llenas las ganancias extraordinarias que recibe de los precios del petróleo. Sin embargo, éstos están volviendo a caer y ya llegaron a los máximos de dos años atrás, antes de la guerra de Irán, por lo que las arcas venezolanas comenzarán a recibir menores aportes por sus ventas petroleras.

            Los recientes acuerdos firmados la pasada semana por el mono bananero con Irán, a contrapelo de la opinión mundial, lograrán que Venezuela comience a alejarse más rápidamente del mundo civilizado, al igual que lo hace la Argentina.

            También debemos recordar que Chávez con la estatal PDVSA (Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima) ya tiene injerencia en el petróleo boliviano, mediante una mejicaneada que le hiciera a la estatal brasilera de Lula, y ahora está intentando hacerlo con el ecuatoriano ya que se acordó que la estatal venezolana Petróleos de Venezuela, inicie los estudios para cooperar con la petrolera ecuatoriana, Petroecuador en la modernización e incremento de la capacidad de refinación con énfasis en aspectos económicos y de inversión financiera.

            Brasil, Argentina y Venezuela están detrás del oro negro para aumentar la potencia energética de sus respectivos países, aunque el bolivariano lo que busca es restringir el flujo de petróleo hacia el gigante del norte. Pero ninguno de los “genios” socialoides se ha percatado de que el flujo petrolero se va a terminar, tarde o temprano, y no se estudian alternativas energéticas como la eólica, la nuclear y el hidrógeno.

            Los acuerdos con Irán, Bolivia, y probablemente ahora con Ecuador en materia energética, sumado a que muchos analistas indican que Venezuela tiene mucho petróleo en su subsuelo, crearía una fuerza petrolera con la que Chávez podría intentar asfixiar a los Estados Unidos y Europa. ¿Se lo permitirán los grandes países industrializados o entrarán en una guerra sin cuartel con el Mercobluff? Es difícil de predecir, pero lo que sí es seguro, es que es muy peligroso para nuestro país tener un socio de semejante calaña.

Mercobluff con moneda única

            La pretensión brasileña y argentina de no utilizar la divisa internacional, el dólar, en las transacciones comerciales en el Mercobluff, tiene un extraño tufillo a “vendetta” izquierdista de parte de Lula y del Gallotero, ambos proclives a los golpes de efectos mediáticos.

            En un acuerdo bilateral realizado a fines del pasado año entre los dos países, estos acordaron no utilizar el dólar en sus intercambios comerciales.

            Sin embargo, esta medida es fuertemente resistida en Uruguay, y a su vez el gobierno paraguayo informó que continuarán utilizando la divisa internacional dentro del Mercosur para sus operaciones comerciales.

            Pero ahora salió al ruedo la moneda única para Latinoamérica, recientemente propuesta por el bolivariano Chávez. Gobiernos con grandes diferencias políticas, económicas y sociales, ¿podrán mantener en el tiempo una moneda común? Muy difícil, y lo más probable es que Chávez aproveche la volteada para utilizarla como moneda de cambio y así aumentar su poder en la región. ¿En dónde estará instalado el Banco Central Latinoamericano, en Caracas?

Los probables nuevos socios

            Bolivia y Ecuador podrían ser los nuevos socios del Mercobluff. Según la información y las apetencias argentinas y brasileras, Evo Morales habría solicitado la inclusión de Bolivia como socio pleno del tratado. Sin embargo, en declaraciones efectuadas por el presidente boliviano hace un par de semanas atrás, dijo que su país estudiaría la posibilidad de ingresar en el Mercobluff.

            El cocalero Morales, gracias a los consejos y manejos del mono caribeño Hugo Chávez, está llevando a su país hacia una imprevisible guerra civil. De extracción marxista y con un público apoyo a Fidel Castro, el presidente boliviano marcha por los caminos que el bolivariano le indica, sumergiendo a su país en un caos total.

            En tanto, el nuevo presidente de Ecuador, Rafael Correa, digno admirador de Chávez, declaró que su país seguirá los pasos de la Venezuela bolivariana hacia el socialismo. Amigo de Chávez, el flamante mandatario, en su discurso de asunción, pronunció a figuras como Fidel Castro, el Che Guevara y Mao Tsé Tung como referentes para el modelo que piensa llevar adelante en su país.

            Con sus teje y manejes, el dictador bolivariano está sumando adeptos a su causa revolucionaria, por lo que es muy probable que su meta final sea el control total del Mercobluff. Sus declaraciones de que hay que politizar al Acuerdo, apuntaban hacia ese rumbo, y salvo Paraguay cuyo vicepresidente declaró su temor de que Chávez contamine ideológicamente al sistema, los demás países miembros hicieron mutis por el foro, y los obsecuentes frentistas apuraron, entre gallos y medianoche, la aprobación uruguaya para su ingreso.

¿Uruguay con futuro en el Mercobluff?

            Aún teniendo en cuenta la decisión del gobierno brasileño de suprimir todos los aranceles que pudieran gravar las exportaciones uruguayas y paraguayas hacia ese país, el Mercobluff no se ve como un futuro abierto para el crecimiento de Uruguay.

            Es probable que estas medidas del gobierno de Lula y algunas otras que puedan implementarse, incrementen las exportaciones uruguayas hacia ese país, pero ¿por cuánto tiempo? La experiencia que tenemos es que si los norteños aprecian que Uruguay está exportando mucho más de lo que ellos consideran conveniente, según sus propias ópticas, volverán a poner trabas burocráticas o arancelarias para detenernos.

            De esta forma, a pesar del Gagánismo socialista de “Más y Mejor Mercosur”, jamás se podrá planificar con seguridad un futuro de crecimiento para nuestro país, porque jamás los brasileros tuvieron reglas claras y permanentes en sus relaciones comerciales, y siempre que lo quisieron las rompieron sin ningún desparpajo.

T.L.C.’s

            Después que el tren de la historia comenzara a alejarse, algunas voces frentistas reconocieron el error y hoy comienzan a correr detrás de él intentando alcanzarlo.

           A pesar de que un TLC con los Estados Unidos es bastardamente vilipendiado por el gagánismo y sus secuaces, el presidente de la Comisión de Representantes Permanentes del Mercosur, Carlos “Chacho” Alvarez, sostuvo que la integración regional debe exceder a los gobiernos de turno y apoyó la idea de un Tratado de Libre Comercio entre Uruguay y Estados Unidos, en una entrevista publicada por El Tribuno de Salta/Argentina.

           A su vez, en la semana pasada se comenzó a hablar de la posible firma de un TLC con la República Popular China, y también con Chile. Pero como el gobierno de Tabaré Vázquez interpreta brillantemente el papel de una adolescente enamorada deshojando margaritas, ya empezaron las desmentidas y el “vamos a estudiarlo, puede ser, tal vez, lo más probable, etc., etc.”, típico de un gobierno indeciso y dubitativo.

            Hasta la fecha, este gobierno no ha implementado una sola medida económica coherente y todo sigue girando alrededor del “vamos a ver…”. El actual crecimiento económico de nuestro país está sustentado en las medidas tomadas por el gobierno anterior y en el arrastre de cola que significa el crecimiento mundial, que como todo crecimiento, tarde o temprano, va a amesetarse y luego caerá.

            Mientras tanto, el Presidente Tabaré Vázquez se preocupa más por intentar mantener unida la colcha de retazos ideológicos que es el Frente Amplio, que por gobernar y generar medidas de crecimiento.

            ¿Hasta dónde dejará Tabaré Vázquez que el Mercobluff se siga inflando y politizando? ¿Reaccionarán las autoridades de nuestro país ante tantas tropelías bolivarianas, argentinas y brasileras dando un portazo?

            La trampa del Mercobluff está abierta. Si no reaccionamos a tiempo podemos caer en ella, y las consecuencias pueden ser más desastrosas que en el 2000. ¿Qué estamos esperando para "hacer la nuestra"?, o ¿Acaso es por un complejo de solidaridad con argentinos y brasileros que jamás nos respetaron? La Guerra de las Papeleras, es el mejor ejemplo.