|
Las latas
|
por Javier García |
|
|
La consecuencia inexorable de impedir una investigación es la de tapar y ocultar. El oficialismo pronuncia su vocación por la transparencia, pero la impide.
El Partido Nacional mocionó la creación de dos comisiones investigadoras en el parlamento, una para conocer la verdad y las responsabilidades de un episodio tan turbio y grave como el del embarque de armamento que se iba a realizar, de contrabando, en un buque de la Armada por orden del Ministerio de Defensa, y otra por las irregularidades en los Casinos.
El martes pasado el Frente Amplio negó la primera y este miércoles negará la segunda.
Siendo oposición votaba las investigadoras, pero estando en el gobierno las obstaculiza. Hace pocos días la bancada del FA solicitó la prorroga de una comisión investigadora impulsada por su bancada sobre la gestión de los entes autónomos de anteriores períodos. Contó su creación con los votos de todos los partidos, sin embargo cuando se le propuso incluir en el análisis este período, no lo permitió.
Han defendido una insólita tesis que sostiene que alcanza que se investigue por parte del Poder Ejecutivo o de la Justicia para que nieguen la intervención del parlamento. El primer caso, el de la investigación del propio Ejecutivo, es inadmisible como argumento ya que es una auto-investigación. Fíjese que en el caso de las municiones es la propia ministra de Defensa quien, en dos oportunidades, firma la orden de traer una carga para el Ejército siendo que éste nunca la había solicitado. Es una investigación viciada de nulidad, ¿puede un jerarca investigarse a sí mismo? En el segundo caso, la investigación judicial, es un argumento que al propio FA le sirve en unos casos y en otros no. La comisión investigadora sobre los entes autónomos se inició cuando ya existían procesos judiciales empezados por los propios organismos y sin embargo al oficialismo esto no le impidió impulsar una investigación parlamentaria. Sin embargo en el caso de los Casinos, donde las irregularidades a investigar son protagonizadas por "compañeros", el FA impide la intervención del parlamento porque ya hay un juzgado actuando.
Hay responsabilidades que son penales y otras políticas.
La verdadera causa de su negativa es que la honradez se la exigen a otros y no a los propios y no se dan cuenta que no hay vacunados contra la corrupción. Negar la corrupción es la mejor forma de fomentarla.
El gobierno empieza a tener problemas en ese sentido. Su reacción instintiva es negar que esto ocurre, prohijando un campo de impunidad que por acción u omisión se empieza a generar. Las mayorías absolutas de las que goza el FA son para gobernar pero no para tapar, no fue para eso que más de la mitad del país se las otorgó.
Especialmente se empiezan a conocer oscuridades en los negocios con Venezuela. Surgen dudas desde la oposición pero también desde sindicatos.
Muchos de los negocios con aquel gobierno están cuestionados por su falta de transparencia y por beneficios indebidos para algunos y por la existencia de lobbies políticos de integrantes del partido de gobierno. Son pocos, pero manchan a todo su partido.
Por ello es conveniente, hasta para evitar comprometer a todo el gobierno, que se permita investigar.
El presidente habló, en cadena, de latas y de manos cortadas. Estas latas se empiezan a hinchar como si tuvieran botulismo -él que es médico sabe lo malo que es esto- y todos sabemos como huelen cuando se abren, sin embargo mancos en el gobierno no hay ninguno.
|