Mujica y las Finanzas Un Sordo Tocando de Oído por Consuelo Pérez

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         El intrincado mundo de las finanzas, más allá de sus encantos para los que en él se mueven como pez en el agua, de su vorágine, de las pasiones, alegrías exultantes, suicidios y otros aditamentos, tiene para mí, lo confieso, un manto de misterio que está ligado en forma inequívoca al mundo virtual en el que se desarrolla. Y pienso que a muchos nos pasa lo mismo. Eso no quita o impide que como en tantos otros temas nos demos el lujo de opinar, muchas veces en al ámbito familiar, o en rueda de amigos.

         Si serán complejas u opinables — parecería— las acciones o consecuencias provocadas por cambios bruscos en el sistema, que hacen por ejemplo que ante crisis profundas a nivel mundial como la reciente, por estos pagos el gobierno diga un día que estamos “blindados” (?) y después adopte medidas o actitudes en contrario, pero ellos sabrán…

         Lo que es indudable, es que los inversores, que de esto saben porque de lo contrario no existirían, si a algo están siempre alerta, eso sí lo entiende cualquiera, es a la CERTIDUMBRE que un sistema o país ofrece  al ámbito de sus acciones. Los inversores están dispuestos a asumir un determinado nivel de riesgo, que obviamente siempre existe. El sector bancario —fundamentalmente europeo y estadounidense— marca o determina el desempeño de ese nivel. Pero hay también otras acciones, señales, dichos o propuestas que actores políticos pueden manifestar. Y si tienen posibilidades de acceder al poder en forma más o menos inmediata, prenden luces amarillas, o rojas, en “el tablero” de los inversores. Eso es obvio.

         Si alguien habla de una virtual nacionalización de la banca, y pone en duda la permanencia futura del secreto bancario, siendo el candidato oficial de una de las fuerzas políticas con posibilidad de ser el futuro gobierno, es porque se supone que teniendo en cuenta la segura corrida de los inversores, igual encuentra elementos a favor que lo llevan a proponer o insinuar semejante propuesta…

         ¡Pero no! Quien livianamente lo dice, es José Mujica. Que francamente, no creo que NADIE sepa, ni siquiera él, cuál es la fortaleza de su delirio. En referencia a sus actitudes, discursos y propuestas, no la oposición, sino su rival más cercano, Astori, ha dicho que con Mujica presidente se corre el riesgo de perder “lo más sagrado que logró el actual gobierno: la confianza”. Comparto algo del pensamiento de Astori, pues sin duda que con Mujica al frente de algo tenemos mucho para perder.

         Discrepo, obviamente con que el gobierno ha dotado a algún aspecto de su gestión del concepto de CONFIAZA, así que por ese lado, no habría problemas…

         La prensa ha expresado que agentes del exterior ya han consultado en referencia a quién es éste “ex guerrillero uruguayo” a la luz de sus dichos.

         Quizá piensen en un destacado economista, o en un avezado y asesorado artífice de las finanzas, o en un postergado o ignorado merecedor de un premio Nobel en el tema, que por su oscuro pasado ha sido relegado, y ahora quizá tenga la oportunidad de brindar al país su cúmulo de sapiencia desaprovechada.

         Ya se van a enterar de la verdad, no es muy complicado…

         Lo que sí es complicado, es que si bien todavía no es presidente, y seguramente no lo sea, porque al menos la naturaleza es sabia, y muchas veces no admite lo que algunos incautos mortales pretenden, es que sus irresponsables aseveraciones YA están haciendo daño.

         En efecto, si bien la crisis trajo incertidumbre, derrumbe de valores y otros males inherentes a su condición de crisis, la recuperación de acciones bancarias parecía afianzarse. No obstante, nuestros bonos no han conseguido recuperar sus precios, como se esperaba.

         Es que el “efecto Pepe Mujica” ya está dando sus frutos. Desde ahora, cuando todavía ni siquiera ganó la interna.

         Así de sensible es el mundo inteligente de las finanzas. Ahí no vale el “cómo te digo una cosa te digo la otra” tan aplaudido y festejado por sus seguidores, que ostentando un desconocimiento, improvisación e ignorancia como el de su líder, pretenden empujarnos definitivamente al caos en el que ya empezamos a transitar hace más de cuatro años.

         Francamente ignoro cual es el pérfido mecanismo por el cual una sociedad que supo de logros ganados con su esfuerzo, al amparo de estructuras concebidas y llevadas adelante por gobernantes capaces y sensatos, se vea de pronto tentada y cautivada en un porcentaje importante, a caminar por la cornisa, a desautorizar y menospreciar nuestra cultura, nuestros valores, nuestras raíces!.

         Hace un par de días Mujica, el “candidato oficial” del oficialismo, hablando del tema de la seguridad y de las investigaciones que habría que hacer a determinados ciudadanos, dijo en un medio televisivo algo así como que tendríamos que investigar más, saber de quién estamos hablando, que hizo en su pasado, como se comportó, que piensa ahora, que hizo de provecho en su vida, cual ha sido su relación con la sociedad, etc. etc. Un seguimiento.

         ¿Empezará por él mismo?

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© Consuelo Pérez