Hasta donde nosotros sabemos la República Oriental del Uruguay es un país independiente y si sus autoridades (electas) resuelven recibir al presidente de los Estados Unidos, qué sentido tiene para la hermandad regional (tan alardeada) denostar una determinación de este tipo. Es triste para nosotros ver a nuestro país hacerse cada vez más irrelevante en el mundo de los ideales de la libertad, para convertirse en "tablao" del show populista de un "bailaor tropical" con mucho dinero en las alforjas…