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El tren de la historia está
pasando por nuestra estación por Raúl Seoane |
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Seis de cada diez uruguayos son favorables a la firma de un eventual Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, según una encuesta de opinión publicada por el diario Ultimas Noticias. Un 47 por ciento de los votantes del Frente Amplio se declararon favorables. De esto se desprende que el ministro Gagáno, como en todo lo que hace, está totalmente fuera de sintonía con el país.
El presidente Vázquez, en alusión al TLC dijo que en la vida el tren pasa una sola vez, y uno se sube o no, en tanto que Gargano enfatizó a quién lo quisiera escuchar, que también puede pasar "que uno se ponga delante y el tren lo aplaste". Gagáno se está poniendo frente al tren. Frente al tren uruguayo que quiere mejorar su país, que quiere crecer, que quiere empleo, que quiere inversión, y es muy probable que el tren uruguayo lo aplaste.
Muy sensatamente, y con un pragmatismo digno de admiración, nuestro presidente expresó que “Las relaciones internacionales no son un valetodo pero tampoco se pueden ideologizar”, algo que nuestra izquierda retrógrada es incapaz de entender. Este pensamiento de la nueva izquierda, totalmente ajeno a los conservadores izquierdistas uruguayos como Gargano, Arismendi, Sendic, Mujica, etc., es lo que no comprenden los quijotes de la vieja y perimida izquierda oriental, porque sin mercados abiertos, sin inversiones extranjeras, sin crecimiento de las exportaciones, Uruguay corre el peligro de perecer bajo las botas brasileras y argentinas.
A Chile le va muy bien con el TLC que firmó con el país del norte. Sus exportaciones crecieron y las importaciones no fueron tan importantes. A su vez, una facción del propio partido oficialista es partidario de que Chile se retire del Mercosur, ya que las políticas proteccionistas y de subsidios de Argentina y Brasil, están perjudicando a una economía globalizada y abierta al mundo como la chilena. Es un punto a estudiar.
De acuerdo a lo expresado por Astori en entrevista al diario El Observador y comentada por El Espectador http://www.espectador.com/nota.php?idNota=75762 “el mercado de Uruguay no despierta el apetito de Estados Unidos” pero “no es poco importante para ese país tener un acuerdo comercial con un gobierno de izquierda”. Creo que acá se está dejando de lado algo muy importante. Es cierto que el mercado uruguayo es totalmente insignificante para los Estados Unidos, pero no es cierto que sea importante por ser un acuerdo comercial con un gobierno de izquierda, porque ya lo tiene con China, y con Chile. Lo que no se está diciendo, y es lo que Uruguay tiene que hacer valer durante las negociaciones, es que nuestro país tiene una posición geopolítica importantísima en la región. Si Estados Unidos y Uruguay logran avanzar sobre un acuerdo de libre comercio beneficioso para ambos, el sólo ingreso de los norteamericanos en un enclave que se encuentra entre Argentina y Brasil, es muchísimo más beneficioso para ellos que todo lo que nos puedan vender.
En un artículo anterior expresé mi opinión de que si hay que firmar un Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos, prefiero que sea firmado por éste gobierno de izquierda y no por un gobierno tradicional. La razón de este pensamiento es que al ser un gobierno que siempre repudió al capitalismo, va a ser más proclive a buscarle el pelo al huevo y defender con uñas y dientes lo que considere más conveniente para el país.
Un editorial del Diario ABC de Paraguay, y publicado en esta edición de Informe Uruguay, dice que Uruguay y Paraguay, si han de desarrollarse y progresar, no tienen otra salida que "crecer para afuera" sobre la base de la liberalización comercial, bajos aranceles, mercados abiertos y una enérgica estrategia exportadora, sin romper con el Mercosur, permaneciendo quizás como miembros "asociados".
Y aquí cabe la lógica pregunta: ¿Por qué el Mercosur no acepta que Uruguay firme un TLC con Estados Unidos? Muy simple, porque con la firma de un TLC es muy probable que empresas norteamericanas y europeas vengan a instalar filiales en Uruguay para exportar, no sólo a EE.UU., sino también al Mercosur, y esto no lo puede permitir el gobierno argentino que mantiene un tapón a la inflación contenida en su país con amenazas a los industriales. Tampoco lo puede permitir Brasil porque destroza el castillo de naipes que está construyendo para ser el principal referente zonal.
Esto es tan así, que el gobierno argentino está totalmente histérico con los acontecimientos que se están desarrollando en nuestro país. La prensa oficialista argentina, Diario Infobae, en grandes titulares dice que La Argentina intima a Uruguay a que se defina sobre el Mercosur La Cancillería señaló que recibió "con preocupación" los nuevos avances del país vecino en el alcance de un tratado de libre comercio con los EE.UU. El subsecretario de Integración Económica de la Casa Rosada, Eduardo Sigal, dijo que si el Uruguay busca un acuerdo así con Estados Unidos, deberá pedirle un perdón o `waiver` al MERCOSUR, algo que no es fácil que el bloque pueda conceder", lo cual es totalmente lógico en un país donde la industria no puede progresar libremente por estar sojuzgada por un populista que no sabe contener de otra forma la inflación.
Creo que aquí hay una única solución, tal como lo dice el diario paraguayo ABC debemos retirarnos del Mercosur como socios plenos y entrar en la categoría de miembro asociado, tal cual se encuentra Chile en estos momentos. Y a la economía chilena no le fue mal. ¿O sí?
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