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El Teflón
por Rodrigo Blás
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Por accidente en 1938 Roy J- Plunkett, un trabajador de la multinacional Du Pont descubrió el teflón. El Teflón es un polímero (metal sintético) que tiene como principal característica soportar altas temperaturas por períodos prolongados sin sufrir ninguna clase de daños. Bien lo saben las amas de casa, el teflón no se pega, no se derrite, no se raya, pasa el tiempo y mantiene su características principales, ahora un mal uso o mal manejo del mismo le hace perder esas características y lo transforma en un simple metal; pasa en esos maravillosos sartenes que primero permiten cualquier hazaña sin que se pegue nada y ante el primer rayón hasta el churrasco queda pegado y quemado.
Nuestro Frente Amplio ha mantenido características propias del teflón, ha soportado altísimas temperaturas internas desde siempre sin sufrir daños, desde Vázquez desplazando a Seregni, a Batalla emigrando al Partido Colorado a Rodriguez Camusso abandonando el Frente, a Zabalza (sin agregados simplemente Zabalza) hasta llegar a Mujica, Astori y otra vez Vázquez con su renuncia a su partido y su veto antiprogramático. Todo eso pasando por Liberoff y sus cheques, Arean y sus negocios y Bengoa y su prisión. Nada de esto afectó al Frente Amplio, como al Teflón nada se le pegaba, todo resbalaba y elección a elección por aciertos propios o errores ajenos siempre creció en los uruguayos hasta alcanzar el Gobierno en el 2005.
Algo pasó, alguien rayó el Sartén o rompió la película, que el Frente ha empezado lenta pero sostenidamente a bajar en las preferencias de la gente, al punto de ser hoy menos que la oposición y ver peligrar su primacía con el Partido Nacional.
Sin duda que como en aquel crecimiento, hay aquí también errores propios y aciertos ajenos pero lo principal es distinguir algo que preveíamos al momento en que el Frente ganaba las elecciones, la situación de igualdad que se iba a dar a partir de allí; ya no había lugar a la mentira desmesurada, a la pancarta liviana, al gesto y a la demagogia había que gobernar y el que hace se equivoca y este Gobierno se equivocó más que lo que acertó.
Han perdido la protección, todo se les pega y el teflón vencido tras los excesos sufridos ya no protege, gustan o no gustan, erran o aciertan, están donde son mirados y no como observadores y la responsabilidad les quedó grande.
Liberaron a los presos y la película de Teflón encontró su primera grieta, Chávez con excesos de compromisos y negocios de valijas y familiares se llevó otra capa, el IRPF rompió definitivamente la protección, el asado grasoso y el gas oil caro se llevaron otro poco, Bengoa recalentó el material, y entre Gargano y otros muchos junto a la ley de Educación, la de Usurpación y la reforma de Salud transformaron al Teflón que los protegía en un recuerdo. Perdida la protección la gente empezó a ver en las pancartas viejas, sueños incumplidos; en las peleas internas, la verdad de un Partido que no es; en los procesados, la muestra de un funcionamiento erróneo institucionalizado en la Fuerza Política y abrieron los ojos.
Con los ojos abiertos, se sorprendieron con Maria Julia bailando arriba de una mesa, con Daisy rezongando diputados y abrazando presos, con Astori negando una crisis internacional, con Mujica que sí pero que no y con Vázquez más ajeno que propio poniendo carteles contra la constitución. No hay nada nuevo, sólo que hoy se ve y antes no se veía, sólo que dejaron de transitar por el país de los sueños y se chocaron con el país real que no entendieron ni supieron manejar, perdieron la capa protectora y sin ella, de igual a igual, son muy malos, por eso se irán.
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