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No preguntes lo que tu país te puede dar, sino lo que tú puedes darle a él.
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Año V Nro. 386 - Uruguay, 16 de abril del 2010 |
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Rusia quiere comprar a Francia el buque porta helicópteros y de desembarco anfibio “Mistral” y fabricar tres de ellos de una adquisición de cuatro, bajo licencia en sus propios astilleros. El gobierno francés que encabeza Nicolás Sarkozy está dispuesto a realizar la transacción y este sería el primer negocio a gran escala entre Rusia y Francia, un país miembro de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) en lo referente a comercio de armas. Analicemos que esta compra no se hace a cualquier país, sino a Francia que aspira a liderar el diseño de la política de la Unión Europea, y esta operación podría ser un cambio importante en la futura redefinición de la política exterior europea hacia Rusia. Los países ribereños del Mar Báltico (Polonia, Lituania, Letonia y Estonia) a lo que se ha sumado Georgia, están muy preocupados por la compra y han externado que estas naves podrían ser utilizadas como plataforma de una agresión rusa en los mares Báltico y Negro. Por su parte el gobierno de los Estados Unidos no ha visto con los mejores ojos esta compra, aunque en una reciente visita a Francia, el Secretario de Defensa de la Unión Americana, Robert Gates, se reunió con su homólogo, Hervé Morin y con el presidente Sarkozy y luego de la misma consideró que “el problema no es de índole militar, sino de su significado intrínseco” (lo que supone la venta en sí, de material occidental militar a Rusia). Francia ha dicho que planea vender el “Mistral” a Moscú sin una dotación de equipo militar de alta tecnología para no generar un conflicto con sus socios de la OTAN, la Unión Europea y el propio Estados Unidos. Aunque consideremos que si el contrato fuera una verdadera amenaza en materia militar, no sólo los países anteriormente nombrados sino Japón y la República Popular China habrían elevado ya sus voces de protesta. El buque de asalto anfibio “Mistral”, desplaza 21000 toneladas, tiene 32 metros de manga, 200 metros de eslora, una velocidad máxima de 19 nudos y una autonomía de 20000 millas. Puede portar seis helicópteros en la cubierta, cuatro lanchas de desembarco o 2 aerodeslizadores en el interior, así como transportar 450 efectivos. Ya está presente en el puerto de San Petersburgo un porta helicópteros “Mistral”, para que los marinos rusos se vayan familiarizando con él. El costo del buque rondaría los 500 millones de euros. Desde el punto de vista económico, la compra sería muy importante para el gobierno francés, ya que el contrato multiplicaría el número de empleos en los astilleros e industrias colaterales en un momento de enorme crisis económica. Esta situación ha afectado al presidente Sarkozy quien ha recibido en estos días una derrota electoral importante en las elecciones regionales como castigo por no haber podido parar el desempleo y no recuperar a su país de la crisis en que está inmerso.. Analicemos los planes dados a conocer por la armada rusa en el caso de la adquisición. El objetivo sería usarlos como buques de proyección estratégica. El “Mistral”, consume mucho menos combustible que los grandes navíos de desembarco que hoy integran la Marina de Guerra rusa. Rusia, realizaría esta adquisición con una visión de sus necesidades a largo plazo, me estoy refiriendo a 20 ó 30 años que según los estrategas del país, Moscú tendrá que mantener su presencia naval permanente tanto en las zonas costeras propias como en mares y océanos del mundo para defender sus intereses, como lo hace por ejemplo hoy, en el Cuerno de África donde operan los piratas somalíes. ¡Hasta el próximo análisis…!
© Lic. Washington Daniel Gorosito Pérez para Informe Uruguay Compartir este artículo en Facebook
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