Con pena y sin gloria por Michael S. Castleton-Bridger

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         El sábado ante pasado fue el 19 de abril. Esta fecha pasó prácticamente por lo menos en mi conocimiento, sin conmemoración alguna por parte de las actuales autoridades de gobierno.

         Este gobierno en actitud poco comprensible ha tomado una posición absolutamente displicente en cuanto a las fechas patrias. Algunas donde el presidente no ha hecho acto de presencia, otras con piezas oratorias de parte de alguna ministra de ronca voz, cuya audiencia fue mayormente un grupo de mistificados y alcoholizados marineros coreanos.

         Parecería que existiera una política de parte del presidente Vázquez Rosas y su gobierno de minimizar o hasta trivializar las fechas patrias.

         En el caso del 19 de abril esto es particularmente grave porque esa fecha conmemora la gesta que de alguna manera liberó a la banda oriental del yugo tanto imperial como de las hegemonías locales. Fue en los hechos el comienzo de la gesta que finalizó lo que Artigas no pudo concluir. La importancia de estos hechos es verdaderamente insoslayable para cualquier uruguayo que se precie.
Las fechas patrias son como los recuerdos familiares. Los recuerdos comunes de una familia son parte de lo que mantiene esa estructura de familia a través de los años, la ventura la desventura, la prosperidad y el infortunio.

         Una nación no es muy diferente a una gran familia y precisa estos recuerdos comunes, estas fechas patrias, para mantener la vigencia del concepto de nación. Estas fechas son parte del recuerdo colectivo de la nación oriental y son parte fundamental de lo que constituye ser uruguayo.

         Para los países, las naciones jóvenes como nosotros, esto es doblemente importante porque recién estamos construyendo ese acervo que constituye nuestra identidad nacional. Entonces no es cosa de juegos. No es cosa de andar minimizando o directamente ignorando las gestas heroicas de los valientes que echaron las bases de nuestra identidad histórica.

         Al frente amplio parecería que estas cosas poco le importan.¿ Pensarán los frente amplistas que en su supuesta renovación, la historia no tiene relevancia?

         Para los nacionalistas en cambio la historia nos enseña y mantiene viva la génesis de nuestra nación. En definitiva la historia nos recuerda por qué existimos como país independiente. La historia nos enseña por qué vale la pena luchar por este pequeño rincón del sur profundo.

         Las fechas patrias no son ni más ni menos que el ayuda memoria de todos los orientales de por qué justamente somos orientales, no brasileros, argentinos o paraguayos, orientales. Por lo tanto no es buena cosa andar ignorando o soslayando estas fechas que tanto representan.

         Las fechas patrias son exactamente eso, fechas patrias y nos recuerdan por qué tenemos patria. No deberíamos como nación sino festejarlas y conmemorar a los que nos antecedieron y los que muchas veces a costa de sus vidas nos dejaron en herencia un país, el Uruguay, cosa por la cual deberíamos estar siempre agradecidos.