El Prof. Carmelo Vidalín por Helena Arce

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         Hemos escuchado en estos días de todo sobre el actual Intendente de Durazno, Prof. Carmelo Vidalín, precandidato por el Partido Nacional.

         Hace tiempo que no lo vemos, nuestra próxima mudanza nos tiene terriblemente atareados, y no hemos podido encontrar a nuestro “viejo” amigo para saber su opinión sobre los comentarios que lo han tenido como protagonista de las páginas de alguna prensa, estos días.

         Hilaridad me causó cuando dijeron, que este dirigente del Partido Nacional, se alejaría de sus filas ante una propuesta del Frente Amplio. No tengo dudas que deben haber existido propuestas, ya en las pasadas elecciones, el Sen. Sergio Abreu comentó haber sido contactado por el Frente Amplio, lo que fue aceptado por dirigentes de dicho partido.

         El Prof. Vidalín es un hombre de acuerdos, de negociación, si bien firme en su accionar, eso sin duda, sumado a sus demostrada calidad como administrador, lo han vuelto una persona  deseable para contar con el como candidato. Eso no quiere decir que el reniegue del Partido con el cual comparte principios fundamentales y en el cual militó, y se convirtió en uno de los principales dirigentes. Vidalín no deserta, el busca pacíficamente el cambio.

         El domingo, mientras hacía algunas compras, me sorprendió la portada de un diario, que decía: “Vidalín vuelve con Lacalle”.

         Hoy el Prof. Vidalín, sin faltarle el respeto a nadie, sin necesidad de desmentidas ni aclaraciones, las cuales suelen más oscurecer que dejar las cosas cristalinas, simplemente sigue en la suya. Presenta pautas para un acuerdo de los diferentes candidatos dentro del Partido Nacional, alejado de los dimes y diretes sigue aferrado a construir, buscando soluciones imprescindibles para la gente.

         Preocupado por los problemas que le son trasmitidos por las personas, en primera persona,  cuando se le acercan.

         Existe algo que no es pose, ni ensayo,  lo he visto personalmente, Vidalín tiene contacto directo con la gente, no se esconde, ni rehúye a nadie. El puede pasar horas escuchando a las personas que le plantean sus necesidades. Lo he visto escuchando, y luego quedar serio, preocupado. Lo suyo claramente no es una pose, no anda por la vida diciendo palabrotas, ni cayendo en la grosería para poder tener empatía con las personas. El no le hace creer a los habitantes más pobres de este país que es del llano, para luego denostarlo, diciendo que son atorrantes y otras yerbas. El se acerca a las personas, no quieren que los demás le cuenten, el se entera de los problemas que tiene la gente acercándose a ellas, escuchándolas,  viéndolas y sintiéndolas sus iguales.
Así como tampoco le anda pidiendo cuentas a la prensa, cuando se desvirtúa algo dicho por él, o se largan “dimes y diretes” no reales sobre cual será su accionar. Simplemente sigue en la suya, realizando propuestas que le ayuden a mejorar la vida de la gente, su gente, esa que el no distingue por cual fue su voto en las anteriores elecciones, o por si nacieron en Durazno o en Artigas, por si son votantes tradicionales del Partido Nacional, o del Partido Colorado, por si son pobres, ricos, o más o menos.

         Para el Prof. Carmelo Vidalín todos somos uruguayos, aspira por sobre todo a darnos oportunidades, esas que nos permitan mediante nuestro trabajo salir adelante. Dignamente.

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