I.R.PiFiaron Con las Banderas Caídas por Rodrigo Blás

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         El 19 de diciembre de 2006 con la promulgación de la Ley 18083  nacía en Uruguay el Impuesto a las Rentas de las Personas Físicas. Nacía   bajo el anuncio de la Justicia Tributaria, del que pague más el que tiene más, del progresismo y la solidaridad.

         Las defensas fueron varias, Astori declaraba que el Mundo recurría a impuestos como el nuestro, Tabaré sonreía complacido ante el cumplimiento de la promesa electoral de terminar con los “vivos” que no pagan y Mujica, bueno… se defendía indignado ante las quejas de los viejos  platudos, el llanto de los que ganan 50.000 pesos por mes, algún “atorrante” y algún “chorizo”, en definitiva se mantenía en sus trece.El IVA que iba a ser sustituido por el nuevo impuesto bajo sólo a un punto con lo que la presión fiscal llegó a parámetros sin comparación en el mundo.

         El Impuesto a la Renta fue la Bandera del Frente Amplio, el buque insignia mediante el cuál harían del Uruguay un país de justicia social y tributaria, la forma como terminarían con el atropello al trabajador de aquel expropiador impuesto a los sueldos que hoy parece modesto, pequeño y hasta se extraña; el sistema de redistribución de riqueza ideal, sacándole la plusvalía (que palabra vieja no?) a los ricos para  repartir a los pobres y otras panaceas que permitirían eliminar la pobreza, fortalecer la educación pública, mejorar la seguridad  y la salud de las gentes, y muchas más etcéteras.

         Al año y medio de la creación del impuesto  el Gobierno festeja la mayor quita impositiva en la historia del Uruguay como titulo de  La República.

         Omiten decir que los impuestos que quitaron fueron parte de los que ellos mismos crearon. Mujica exigía cambios por que el impuesto no estaba bien distribuido, asfixiaba trabajadores, etc., olvidaba decir que su fuerza política lo había creado y votado por unanimidad.

         Astori declaró su satisfacción por que ahora el IRPF era más justo y menos gravoso, es decir lo que nos aplicaron durante un año y medio era más injusto y más gravoso.

         Todos omitieron decir que ahora es impuesto es menos universal y que cada vez menos uruguayos participan en el sostén del País de Todos. Olvidaron decir que al quitar ingresos al Estado que con ellos había aumentado monstruosamente  gastos, el Uruguay volvió a  ser deficitario pero esta vez en época de bonanza económica. Olvidaron que lo crearon ellos, olvidaron que lo votaron, olvidaron que lo prometieron, olvidaron que les advertimos.

         Aún no han terminado, siguen enojados por que el impuesto se come aguinaldos, horas extras, servicio 222, aumentos salariales y no entienden a quién se le habrá ocurrido semejante disparate contra el trabajador y prometen terminar con semejante agravio impositivo vaya a saber por que monstruo neoliberal creado.

         Tras la promesa cumplida y fracasada, en vías de defunción no ya por el próximo gobierno sino por este mismo se les rompió la Bandera, se les hundió el buque insignia y capaz que se les cayó un candidato presidencial.

         Llegarán entonces  a las contiendas electorales con sus banderas Rotas y cara de “Yo no fui “como dice Lacalle. 

         La pifiaron feo, pero tienen un aliciente, los Estados Unidos los felicitaron la semana pasada por su política económica.

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