La UE dice que el Mercosur es más "visión que realidad"
Europa exige que mejore la libre circulación de bienes en el bloque sudamericano
Por Alejandro Rebossio
De la Redacción de LA NACION
El jefe de la misión negociadora de la Unión Europea ante el Mercosur, Karl Falkenberg, a Buenos Aires para seguir las negociaciones que deberían finalizar este año, y en una conferencia reconoció ayer la buena sintonía con su contraparte, el secretario argentino de Relaciones Económicas Internacionales, Martín Redrado. Acto seguido, Falkenberg espetó una andanada de críticas contra el Mercosur, que Redrado respondió.
En uno de los salones del hotel Alvear, ante representantes de la sociedad civil, el negociador europeo, acompañado por el embajador de la UE, Angelos Pagkratis, insistió en un habitual reclamo de Bruselas: "La integración regional es importante, pero a veces parece que en el Mercosur hay más visión que realidad. ¿Cómo la UE confiará en el Mercosur cuando los miembros del Mercosur no confían entre sí?". Falkenberg se quejó de la falta de armonización de normas aduaneras, sanitarias y fitosanitarias en el bloque sudamericano, mientras se negocia la integración con la UE.
La ausencia de reglas comunes lleva a que un producto europeo ingresado por el puerto de Santos, Brasil, no pueda después circular libremente por la Argentina, Paraguay o Uruguay y además pague el arancel externo común (AEC) en cada país. Los escollos a la libre circulación también afectan a los productos made in Mercosur .
Redrado respondió que en el Mercosur "hay hechos". Mencionó que el tribunal de solución de controversias, que los presidentes de los cuatro países decidieron crear a principios de 2002, ya fue aprobado por los parlamentos y la Argentina y Uruguay han designado los jueces que los representarán. También recordó que en diciembre último se firmó un protocolo para liberalizar las compras gubernamentales y destacó la coordinación de los tipos de cambio de la Argentina y Brasil.
El director de Comercio para América latina de la Comisión Europea (Ejecutivo de la UE) señaló que otra diferencia con el Mercosur radica en la liberalización del sector de servicios, incluidos los financieros, el transporte y las telecomunicaciones. "Queremos una regulación que permita establecernos en un país del bloque y desde allí ofrecer servicios a los otros", explicó.
También se discute la protección de las inversiones. "La UE quiere reglas predecibles. No pedimos libertad total para las inversiones, pero que no se las discrimine en lo social, lo económico, lo impositivo", argumentó Falkenberg. La apertura de las compras gubernamentales y la mayor protección de la propiedad intelectual son otras exigencias de la UE. Redrado respondió que si Europa reserva la discusión de fondo sobre el proteccionismo agrícola para la ronda de la Organización Mundial de Comercio (OMC) el Mercosur hará lo mismo con los temas de interés comunitario.
La UE y el Mercosur debaten esta semana todo este marco de reglas del acuerdo birregional, que debería firmarse en octubre próximo. El mes próximo, en Bruselas, se intercambiarán propuestas de acceso a mercado para las exportaciones, el asunto que inquieta al Mercosur.
El negociador europeo protestó porque el 83% de lo que su bloque ofreció liberalizar comenzaría a desgravarse a partir del primer día en que entre en vigor el pacto, mientras que el 70% de lo que promete abrir el Mercosur sólo llegaría al arancel cero en diez años. Falkenberg aceptó que la desgravación debe ir a ritmos diferentes, pero calificó la propuesta sudamericana de "excesiva". Redrado contraatacó: le recordó que la mitad de los productos que la UE ofrece liberalizar ya entra sin arancel.