Claves americanas El gran error de Chávez Por Andrés Oppenheimer (The Miami Herald) . El presidente venezolano Hugo Chávez ha cometido un gran error táctico en estos días, que le puede costar muy caro: se mostró ante el mundo como un violador masivo de los derechos humanos. . Hasta ahora, Chávez -el ex teniente coronel golpista que fue elegido en 1998 y desde entonces ha gobernado con mano dura- era visto por la mayoría de los países como un demagogo pintoresco, pero inofensivo. . Fíjense en lo que hace, no en lo que dice, afirmaban los diplomáticos extranjeros. Estos sabían que Chávez ha militarizado cada vez más su gobierno y que ha hecho todo tipo de trampas para manipular las leyes a su antojo. Pero mientras mantenía la formalidad democrática, era fácil para el resto del mundo hacerse el distraído. . Sin embargo, las cosas cambiaron la semana pasada, cuando la guardia nacional de Chávez fue objeto de masivas denuncias de tortura, golpizas y muertes de opositores que protestaban contra la decisión gubernamental de no reconocer la validez de las firmas para convocar a un referéndum revocatorio de su mandato. . Amnistía Internacional denunció el uso excesivo de la fuerza por parte del gobierno. Human Rights Watch, otro grupo internacional de derechos humanos, dijo que la guardia nacional mató a nueve opositores, y por lo menos otros 50 resultaron heridos durante los enfrentamientos. . Ahora será más difícil para muchos observadores internacionales seguir viendo a Chávez como un personaje de opereta. Las fotografías de opositores bañados en sangre y testimonios de víctimas de torturas han colocado a Chávez y a sus militares en el campo de los represores. . Renuncia en la ONU . En un hecho inusual, el embajador de Venezuela ante las Naciones Unidas, Milos Alcalay, renunció a su puesto el jueves, diciendo que no podía representar a un régimen que violaba los derechos humanos. . Alcalay afirmó que el gobierno militarizado de Chávez se parece cada día más a las dictaduras militares latinoamericanas de la década del 70. . La transformación de la imagen de Chávez lo convertirá en una figura más difícil de tolerar en Washington, América latina y Europa, y en un blanco de críticas mucho más fácil para el gobierno de Bush. . "Se está comportando igual que los dictadores militares latinoamericanos del pasado", me dijo Otto J. Reich, el embajador especial de la Casa Blanca para América latina. "Los países vecinos no pueden permanecer callados frente a esta ola de brutalidad que ha lanzado contra el pueblo venezolano", agregó. . Claro que, a pesar de su discurso más enérgico, lo más probable es que Estados Unidos no haga nada que pueda aumentar el caos en Venezuela y hacer subir los precios del petróleo. Los asesores de la Casa Blanca saben que Bush no podría ganar las elecciones de noviembre si los precios del petróleo llegan a US$ 2 por barril. Y en América latina tampoco hay demasiadas ganas de enfrentarse a Chávez: muchos países dependen del petróleo subsidiado de Venezuela. . Una nueva dimensión . Sin embargo, el factor de los derechos humanos pone a la crisis venezolana en una nueva dimensión, que aumentará las presiones internacionales para que Venezuela regrese a la democracia plena. . Ya hemos visto algo parecido. En 2000, los informes de la Comisión de Derechos Humanos y de una misión de observación electoral de la OEA llevaron a la asamblea general de cancilleres en Canadá a exigir medidas concretas para restablecer la democracia plena en Perú. . Fuentes bien ubicadas me dicen que la Comisión de Derechos Humanos de la OEA deberá presentar su informe sobre Venezuela en las próximas semanas. Después de los acontecimientos de los últimos días, todo hace prever que será más duro de lo que hubiera sido anteriormente. . Eso podría comenzar un proceso de presión internacional cada vez mayor sobre Chávez, para que permita una observación internacional de las firmas que exigían el referéndum revocatorio. . ¿Llevará este proceso a la caída de Chávez? Probablemente no, porque es poco lo que puede hacer la comunidad internacional si Chávez ha decidido dejar atrás las formalidades democráticas y convertirse en dictador como el cubano Fidel Castro. . Sin embargo, las fotografías de opositores ensangrentados en las calles de Caracas harán que sus discursos contra el "imperialismo norteamericano" para desviar la atención mundial de sus problemas políticos internos suenen cada vez más vacíos. El factor derechos humanos pondrá los reflectores de la atención mundial donde Chávez menos lo quiere: en Venezuela.

Material obtenido de Periodista Digital

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