Mercosur y la relación con sus socios. Un enfoque hacia otras alianzas.
Entrevista a Cecilia Alemany (tercera parte)
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Hemos visto en las ediciones anteriores algunas consideraciones realizadas por la Licenciada en Relaciones Internacionales Cecilia Alemany, quien se desempeña como coordinadora del Programa Integración Mercosur y Sociedad Civil.
Tras haber incursionado en una visión desde la creación y presente del Mercosur, no proyecto hacia su futuro, en particular luego de la asunción de Ignacio “Lula” Da Silva, a la presidencia del Brasil, quien le ha proporcionado un nuevo empuje al Mercosur y en el nuevo rol que le ha conferido a su país.
Con ese viraje que le impregna Lula al Mercosur, ¿en qué situación se encuentran las negociaciones hacia una integración de toda América por medio del ALCA?
“Lula sigue negociando el ALCA, pero a la vez tiene otra estrategia dentro del ALCA. Hay sectores que son sensibles, que también son sensibles para todos nosotros, pero digamos que de alguna manera embandera a Brasil en estos momentos. Pero también sectores que son sensibles para Estados Unidos. Entonces de alguna manera lo que hay es una agenda de negociación entre dos grandes, hasta donde Estados Unidos puede meter los temas que quiere que estén en la liberalización del comercio dentro de América Latina y Brasil los suyos y de alguna manera lo que hay aquí es una negociación cortes entre las agendas de ambos.”
¿Cuales son las otras estrategias que tiene Lula?
"La primera es, sigue negociando. La segunda copreside las negociaciones con Estados Unidos. La tercera es, bueno ¿qué otras formas de contrarrestar el ALCA?. La primera es promover el área de libre comercio de Sudamérica, que es el ALCSA. Que es una cuestión que las negociaciones están dadas hace años, esta zona de libre comercio está dada entre los cuatro paises del Mercosur y los de la Comunidad Andina (CAN) y Chile. Esta sería que tengamos esta zona de libre comercio antes que la que se está negociando con el resto de las Américas liderada por Estados Unidos, y con las condiciones que Estados Unidos quiere desde que está negociando. Y entonces que haya una zona de libre comercio antes, entre Brasil, Uruguay, Argentina, Paraguay, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela y Chile. Bueno la antigua América del sur concebida mucho antes de que se crearan nuestras fronteras. Entonces él avanza en eso y lo que hace es dar impulso a las negociaciones que ya existen.”
¿Cómo actúan los ahora miembros asociados al Mercosur?
“Mercosur tiene como miembros asociados a Chile y Bolivia y son como miembros a medias, por decir de alguna manera, que tienen derechos y algunas obligaciones, pero menos compromiso que los miembros plenos. Hay cuestiones de regulaciones que no siempre corren para todos en las mismas condiciones.”
“Lo que hace Lula es darle un mayor contenido más ideológico a una cuestión que está negociada pero no cerrada y acordada en lo comercial. Da mucha fuerza este año para tratar de que la cumbre pasada de Presidentes del Mercosur, acá en diciembre pasado, se aprobara y se presentara como negociado el acuerdo. Semanas antes, por supuesto, el gobierno estuvo frenando estas negociaciones, para que de cualquier manera no salieran.
Y por que muchas veces, atrás de estos temas que nosotros vemos como partidarios o de personas, también hay intereses privados y reales y muy fuertes, que yo a veces digo el gobierno, pero sepamos que a veces está representando mensajes dados por organizaciones, por grupos comerciales y por grupos empresarios fuertes que pueden ver sus intereses tocados.”
Pero también Cecilia Alemany reflexiona sobre las consecuencias del libre comercio.
“En todo esto, digo, tampoco la frivolización de que el libre comercio en si es bueno. La cuestión de todo esto es como podemos complementarlo con otro tipo de integración más profunda y con políticas si se quiere más concertadas en cuanto a políticas sociales o productivas que ayuden a que lo que no sabemos hacer nacionalmente, lo hagamos entre todos”.
Por tanto Lula promueve una zona de libre comercio latino americana antes que el ALCA, a pesar de la oposición y ¿cómo quedaría la relación con el ALCA?
“Entonces una de las estrategias de Lula frente al ALCA, es el ALCSA. De alguna manera ya está casi cerrado y esto si se puede anunciar, aunque no se anuncie que está totalmente acordado, bueno ya estamos en la última etapa de negociación del acuerdo. Una cosa es negociar y otra cosa es que después se haga realidad. Los tiempos de implementación y los períodos de adaptación que tiene cada país, sobre todo los más pobres, hace que estas cosas tarden más en implementarse. Lo mismo que pasaría en el ALCA, en el caso de que se negocie. Entonces la primer cuestión en cuanto al ALCA, es una gran interrogante. Para todos, para los analistas, para los políticos, para los expertos, para todos es una gran interrogante. Primero, porque con el devenir de la negociación ya cambió mucho a lo que era el objetivo inicial, y cada vez se va reduciendo. Y a veces la sensación que da es que va a ser un paraguas para que Estados Unidos haga acuerdos con todas las partes y el único que tenga la liberalización con todos, en definitiva, sea Estados Unidos. Esto es una visión si se quiere de realidad política que podía parecer pesimista, pero es lo que se perfila de los borradores de la negociación. Como todo negocio, esto tiene mucho que ver con que equipos técnicos esta gente pone atrás. Sería bueno saber cuantos diplomáticos uruguayos trabajan en la dirección del Mercosur, en la cancillería. Muchos menos de los que nos podemos imaginar, claro tenemos diplomáticos repartidos en otras áreas, en cantidades que no necesariamente ni responden a objetivos estratégicos, bueno hablamos de objetivos estratégicos en un país en donde no hay un proyecto país, estamos pidiendo peras al olmo”
Ahora la relación de Chile es algo diferente a la propuesta del Mercosur.
“Los distintos paises que se asocian al Mercosur entre sí son muy distintos. El caso de Chile, por sí sólo tiene un tratado de libre comercio con Estados Unidos, con la unión Europea y con algunos otros paises del mundo. De alguna manera Chile se armó una estrategia de “global player” en los ochenta, que ejecuta en los noventa preparando y enviando quinientos jóvenes por mes a formarse en Universidades del exterior, formando un “Thing panel”, es decir un equipo técnico con una ideología y que por su puesto respondía a esos requerimientos. Algunas veces se cree que podemos copiar el modelito, claro somos tan poco creativos que tenemos que copiar modelos. No sabemos encontrar un modelo propio, que tenemos que estar copiando. A Chile le llevó veinte años en armarlo, invirtiendo mucho en educación, formación y además respondiendo si se quiere a intereses de grupos de interés muy diferentes”.
“La estructura productiva, por tanto la complementariedad comercial de Chile es muy diferente a la nuestra, o sea sería como comparar planetas con estrellas. La estructura productiva y la complementariedad con las otras economías del mundo. Chile es completamente diferente a Uruguay, por lo tanto creo que ningún paralelismo es posible o imitación en válida; o es desconocer completamente que los países no por ser países son iguales. Creer eso que por sólo ser países uno puede comparar, asimilar procesos históricos y nacionales.”
Hacia una supra nacionalidad.
Cecilia Alemany apunta hacia una idea que es algo más que una alianza comercial o una liberalización del comercio y que pueda apuntar hacia una idea política de la América Latina Unida.
“En los roles que pueden tener los distintos paises en el Mercosur, los asociados hoy en una primera etapa, es algo más comercial de ver hasta donde les sirve el Mercosur y a ellos liberalizar el comercio. Y en la cuestión más simbólica en este mini y corto plazo que son los próximos cuatro años, del simbolismo político de América del Sur unida. Ahí de vuelta estamos, como buenos latinoamericanos, entre el mito y la realidad. La realidad pasa a ser el comercio debilitado, pobre, dentro de una parte del mundo que está empobrecida. Y el mito pasa a ser que queremos de alguna manera recobrar este imaginario colectivo, político, ideológico, de Latinoamérica unida.”
“Yo creo que la supra nacionalidad a nivel de lo que debamos pensar de Sudamérica sería muy a largo plazo, porque si nos ha costado tanto a nivel sub regional, no será fácil acordar voluntades políticas de posiciones de gobiernos tan dispares. Cuando las democracias del cono sur ven a Venezuela, Colombia, a Bolivia que está mucho más cerca, o Ecuador, como los problemas de la América del norte, que aún no ha superado. Pero la estructura es otra, el problema étnico diferente, la estructura política es otra, el nivel y el manejo de las elites es otro, la relación con Estados Unidos es otra, como con otras potencias, pero básicamente con Estados Unidos. Entonces, la verdad es que estamos en un mismo continente, pero somos muy diferentes. Muchas veces como tienen en común otras cuestiones que son más culturales o subjetivas, pero no necesariamente la estructura democrática o formal que le hemos dado a nuestras sociedades. Entonces la sensación de los del cono sur, sería no nos vamos a embarcar en un esquema supranacional con las democracias débiles, como decían los europeos de nosotros cuando nosotros estamos mejores económicamente. Entonces claro ese ombliguísmo no es real, de alguna manera los gobernantes que además de querer mantenerse en su lugar, tratar de mantener el status quo y subirse aun espacio supranacional, donde los demás actores son mucho más débiles, entonces es perder.”
Entonces vamos a intentar entender más claramente cuales son las diferencias entre el Alca y el Mercosur.
“La diferencia sustancial entre ALCA y Mercosur es que el Mercosur no sólo es un proceso de integración existente y el ALCA es un proyecto de negociación, por tanto ahí es de vuelta entre el mito y la realidad. ALCA es el mito de algunos y Mercosur es la realidad de otros. Es que además, de alguna manera, el ALCA es una reacción a una propuesta del gobierno de Estados Unidos, mientras que el Mercosur es un proceso de acuerdo de cuatro gobiernos vecinos. De alguna manera si bien puede parecer tan utópicamente necesario pensar las Américas desde el sur al norte, como pensar América del Sur como un todo. Es evidente que en las relaciones, no sólo por el poder relativo son diferentes, completamente diferentes, entre Estados Unidos y cualquier socio del sur, sino que además esa contigüidad o esa historia está más pautada por la contradicción que por la jubilación.”
Existe una diferencia de percepción de la forma de asociarse entre naciones.
“Si bien hemos tenido conflictos entre paises de América Latina, en el último siglo y hoy en día entre paises que se ven como mucho más lejanos, más aún en el Mercosur en donde la hipótesis del conflicto ya desapareció por la integración. En la relación del poder entre los paises de América Latina, especialmente con Estados Unidos, la historia lo que habla es más de separación y asimilación por la vía del poder que de la cercanía o el parecido. Entonces ya hay una posición simbólica, que hace que como proyecto a nivel de la ciudadanía se vean completamente diferentes.”
La responsabilidad del gobierno.
“No comunicar eso y comunicar como que el ALCA, como lo ha comunicado desde la Presidencia en todos los medios de prensa, como lo ha hechos en los últimos meses, “es lo mejor para Uruguay”, por supuesto la interpretación de la población va a depender de la comunicación que demos de esos temas. Yo creo que el primer problema es asumir que cualquier integración o apertura de comercio tiene costos y beneficios, generalmente ningún político quiere asumir que nada tiene costos y todos sabemos que sí. Generalmente los pueblos quieren creer que nada tiene costos y ahí entramos en lo que algunos llaman populísmos u otros llaman facilísimos electorales. Entonces de algún lado asumir que el Mercosur si tiene costos pero tiene beneficios y un proyecto más profundo y además es una realidad que podemos potenciar, mientras que el ALCA es un proyecto”.
El problema de la disparidad socio económico.
“Y además, otro tema, estamos hablando de sociedades (por lo pronto la uruguaya) pre industriales, que se van a liberalizar comercialmente con la mayor potencia mundial. Seguramente las relaciones y los beneficios y los costos se repartan de otra manera que la que se puedan repartirse entre pares. Es verdad Uruguay entre Brasil y Argentina, tampoco es esta entre pares, porque son dos grandes, ahora desde la política dicen querer asumir el costo y de alguna forma ayudar a que Paraguay y Uruguay, de alguna manera puedan insertarse en una forma más equitativa. Creo que es una oportunidad histórica que no podemos dejar y perder. Y la sociedad uruguaya sepa entender más allá de cualquier partido, que las oportunidades históricas no siempre se vuelven a presentar en las mismas condiciones”.
“Chile aparentemente no tiene problemas, pero socialmente tiene una disparidad social imponente. A simple vista cuando uno va a Chile siente que el Milagro chileno es un cascarón que cuando uno lo golpea, ve que hay mucho más problemas de pobreza y de equidad social, que los que uno cree desde los indicadores macro económicos”.
“En cuanto a Uruguay yo creo que hay varias vías de entrar en el mundo, pero sólo son posibles en la medida que se asuman que hay varias vías y que hay que apostar en serio. No dejarlo sólo a la voluntad de algunos empresarios o empresarios bien relacionados que pueden entrar en las misiones oficiales y demás”.
“Políticamente y en los hechos, Brasil ha propuesto y están funcionando foros de competitividad del Mercosur. Está funcionando el foro de la madera y muebles, en donde los actores públicos y privados de los cuatro paises empiecen a visualizar como atar sus cadenas productivas para avanzar en eso. La idea es abrir más foros en los próximos años pero lo que precisa es un sinceramiento y una desmistificación de los miedos del imperio de Brasil, por parte no sólo de los sectores públicos sino del privado. Que esté dispuesto a comprometerse”.
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