LA PELOTA PA'DELANTE
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por Marcelo Mondino
Durazno/Uruguay
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Quién me conozca quizás lo primero que se le ocurra decir es lo monotemático que estoy siendo en éstos últimos años, pero me debo a mis principios y estoy tan seguro de lo que digo que no me voy a cansar de repetirlo.
Resulta que en el año 2002 hubo uno de los logros muy publicitados de éste gobierno que fué el denominado "canje de deuda" que efectivamente y hablando en criollo fue un tirar la pelota pa delante, lo mismo que intentó Cavallo en sus últimas instancias de Gobierno pero que obviamente por el volumen bastante superior fue imposible lograr el mismo.
Pero este no es el tema principal, la verdad que si ese canje no se hubiera hecho era muy probable que el país cayera en lo que muchos ciudadanos hoy estamos y es el inevitable default con bancos, tarjetas de crédito, y otra larga fila de instituciones de préstamo que hoy se les ha hecho difícil de cobrar sus créditos, o sea lo mismo pero perdiendo la posición de país cumplidor a nivel internacional como hasta ahora lo seguimos siendo.
Hasta aquí la historia se parece mucho a un juego muy eficaz de te presto y si no puedo pagarte me das unos días más, pero resulta que han transcurrido ya dos años de la aceleración de la caída libre que traíamos y el tema del endeudamiento interno sigue tan vigente como antes.
Claro hay una cosa, se salvaron los salarios públicos, y no hablo de los maestros ni de los policías ni de los empleados de la salud, hablo de los salarios improductivos como Senadores, Diputados, ediles, secretarios, gente en comisión, ñoquis, etc. etc. que respiraron cuando se enteraron que definitivamente en una proyección de tres años cómo la que había que realizar para salvar la situación, ellos entraban y podían cómodamente seguir teniendo todas las prebendas que gozan estos seres imperturbados ante la situación de pobreza que muchos están padeciendo a causa de la impronta de una política económica que favoreció a especuladores y otras especies de la misma familia.
Con esto quiero seguir culpando directamente a quienes para mi debieron gobernar o al menos hacer valer su Derecho de Poder y no lo hicieron porque temían a la malvada imagen que el país podía llegar a tener si se volvían una "Argentina" que ahora habla de una coherente licuación de deuda que llega hasta solicitar el 75% de lo adeudado en bonos ante acreedores privados.
No les parece extraño que hoy ni la izquierda más radical hable, como sí lo hicieron a la salida de la dictadura del no pago de la deuda "Eterna", no les parece extraño que quienes abultaron y la hicieron crecer a volúmenes insospechados llegando a tener como hoy una deuda similar al PBI e imposible de pagar en 50 años sin pedir un peso más, hoy hablen de postulaciones políticas intentando nuevamente asumir al gobierno sin tener en cuenta que lo esencial no es invisible sino que está en la reactivación de la clase media, de las pequeñas y medianas empresas, del pequeño agricultor (el que se salvó), que son los que en definitiva hacen el diario vivir de éste Uruguay empobrecido por acciones de políticos inescrupulosos y con intereses individuales y familiares propios de una dinastía de mafia que con gran sutileza han hecho enriquecer más a los ricos y aumentar y empobrecer mas a los que nada tienen y se ganan el pan de cada día con el trabajo cotidiano.
No podemos seguir jugando al solitario y haciendo trampas porque la campaña política ya empezó y ojo porque si seguimos creyendo que la verdad la tiene la desenfrenada carrera por liberar todo corremos el riesgo de que en algún momento digamos que hasta los presos deberían estar libres.
El mundo no es otro, es el mismo, los que somos cambiantes somos los seres humanos que lo habitamos y por nuestras contínuas acciones de ambición no lo respetamos en lo más mínimo, lo sometemos a guerras virulentas que en algunos casos se manifiestan de alguna forma bélica y en otros casos como en Lationoamérica se manifiesta con las sutiles acciones de gobernantes que se equivocan y lo que es peor no lo reconocen sino que van por más con el peligro de hasta su propia extinción.