¿EL 31 DE OCTUBRE
NOS JUGAMOS EL DESTINO?
El 31 de octubre de 2004 será un día muy especial: vamos a decidir qué tipo de sistema político queremos.
En realidad no decidiremos el sistema político, sino más bien decidiremos que tipo de ideología nos va a comandar.
Es bien conocido que la coalición de izquierda tiene grandes chances de gobernarnos los próximos 5 años; sin embargo los partidos tradicionales, si los colorados le devolvemos el favor a los blancos , también hay chances muy claras de que gane el Partido Nacional.
El sistema político actual, gane quien gane, no va a cambiar. Para cambiar el sistema, no solamente el gobernante debe tener un apoyo grande, sino además la valentía de hacer una cirugía mayor y cambiar radicalmente el fundamento mismo de la sociedad y nuestra mentalidad.
El Uruguay, que es un país pequeño, pero con una población altamente alfabetizada, corre con ciertas ventajas sobre otros países del continente. Quién más, quien menos está politizado, están al tanto de las cosas que ocurren no sólo dentro del país sino en el exterior y tienen opiniones formadas con fundamento.
Como primera medida se debería achicar el Estado. Nuestro Estado es uno que sirvió hace un siglo, pero no es el Estado para hoy. No es posible que los empleados del Estado sean quienes ganen más, sean quienes tienen los mejores beneficios, y en resumidas cuentas hagan lo que quieran.
Pocos días atrás la Auditoría General de la Nación, comunicó que nuestro Estado no era corrupto, y que si bien existían casos aislados, estaba muy bien.
En mi condición de ciudadano de la República, y haciendo uso de mi libertad, mis derechos y deberes, discrepo totalmente con ese informe. Baste a cualquiera ir a una oficina pública para constatar personalmente que la corrupción no es solamente sobornar a alguien, es también la superposición de funciones, los beneficios que se tienen, las licencias por cualquier motivo, la brutal politización de los funcionarios,etc,etc,etc.
Para achicar el Estado hay que sacar al menos las dos terceras partes de sus funcionarios, y dejar solamente los más profesionales y los que están realmente compenetrados en su función. En el actual estado de las cosas los privados somos los que mantenemos a un voraz Estado, que no tiene más remedio que serlo, ya que tiene que pagar sueldos privilegiados a una masa enorme de gente que en realidad hace muy poco, y no quiero ser agresivo y decir que no hace nada, ya que hay muy honrosas excepciones.
Cuando voté al Dr. Batlle, pensé que iba a hacer todo esto, por varias razones: lo había dicho en su campaña electoral, y sobre todo porque con su edad no tenía opción de ser elegido Presidente en el 2009, de forma que el costo político hubiese sido muy bajo. Todo esto no ocurrió, y lamentablemente el costo político fue muchísimo mayor para el Partido Colorado con la administración del Dr. Batlle; hay argumentos de todo tipo y color que tratan de explicar el fracaso: la aftosa, el problema de la corrida financiera proveniente de Argentina, el cierre y venta de 4 bancos; las estafas en dos de ellos. Todos argumentos sin relación alguna con el problema central: el ordenamiento lógico de un Estado del siglo XXI.
Es un hecho comprobado mundialmente que el sector privado hace las cosas mejor y más barato, y no es porque los empleados el Estado sean menos inteligentes que los privados, sino que simplemente están más comprometidos con su fuente de trabajo; un empleado del Estado, si hace o no una tarea es más o menos lo mismo, y si la hace bien o mal también. En el sector privado las cosas hay que hacerlas bien porque simplemente si se hacen mal se pierde la fuente de trabajo; hecho que en el Estado no ocurre porque existe una ley de inamovilidad de los funcionarios.
Todo esto nos lleva a pensar que si ganan las próximas elecciones el conglomerado de sectores de izquierda, no solamente el Estado seguirá igual, sino que será muchísimo más grande y por ende muchísimo más caro y en consecuencia el sector privado deberá seguir pagando muchísimo más.
Para que este país crezca deben haber inversiones, si hay inversiones hay más trabajo, hay más dinero para gastar, se viviría mejor y no tendríamos la emigración que tenemos en este momento. Los que se van no son los ciudadanos de mediana o mayor edad, sino los jóvenes, lo que quiere decir que nos transformamos en un país de viejos. Dentro de 15 o 20 años, ¿quien trabajará?. Lo harán los pocos valientes que se han quedado y los veteranos que moriremos con las botas puestas.
Un gobierno de izquierda no promoverá las inversiones necesarias, por el simple hecho de que no será un gobierno confiable para un inversor privado y no solamente por un hecho ideológico (porque al dinero poco le importa la ideología), sino porque será un gobierno que no tendrá la suficiente credibilidad para que las inversiones sean seguras.
El líder de la coalición de izquierda es un hombre que , podrá ser un excelente médico, pero es un pésimo político: hoy dice una cosa , mañana dice lo contrario; según sea el auditorio. De esta forma no se puede mantener el timón firme de una nave que va prácticamente a la deriva en una tormenta. Y lo peor de todo es que los grupos guerrilleros de los años 60 y 70 son mayoría y ninguno de ellos ha dicho públicamente: "Nos equivocamos, matamos, robamos y provocamos un golpe de Estado, y la vía para llegar al poder es la vía democrática", muy por el contrario están muy orgullosos de su pasado tupamaro; sin advertir que no fueron solamente ellos quienes sufrieron 13 años de dictadura, sino todo un país. Y en aquel momento los que se fueron, lo hicieron por razones políticas y no económicas, y con esto contesto a algunos que andan diciendo por allí que los uruguayos somos un pueblo de cobardes: los que se bancaron la dictadura fueron todos los uruguayos; y lo hicimos a la uruguaya: paciencia y trabajo; honor para mantener su ideología y resistencia pasiva.
Y aquí se debe rendir honor a un hombre, que si bien no perteneció a mi partido político, condensa las virtudes de nuestro pueblo: Wilson Ferreira Aldunate; denostado y perseguido por los gobernantes de turno, se exilió en varios países, pero volvió, sufrió la cárcel, y cuando fue liberado, con una grandeza de espíritu poco usual pidió a su Partido "gobernabilidad" para el futuro Presidente elegido democráticamente.
Y también debemos rendir honor al General Líber Seregni, que si bien fue el fundador de este conglomerado de izquierda, supo siempre el rumbo que debía tomar, y como buen soldado con la rectitud y la verdad a la vista.
Lamentablemente estos hombres han muerto; nos queda solamente su memoria y especular lo que hubiesen hecho.
Ahora quienes los suceden cargan con la responsabilidad de hacer las cosas como las hubiesen hechos estos dos hombres.
El Dr. Larrañaga creo que puede cargar con esa responsabilidad; pero seguramente el Dr. Vázquez no. Y lo digo sin ánimo alguno de ofender a alguien: simplemente no se puede estar bien con Dios y con el diablo; se está con uno o con otro.
¿Que hará el Dr. Vázquez cuando los sindicatos lo presionen?¿seguiremos de plebiscito en plebiscito?. ¿Que hará el Dr. Vázquez cuando el Cr. Astori le diga que las cuentas no cierran?¿Que harán los militares cuando les comuniquen que su enemigo de antaño, el Sr. Fernández Huidobro, será su Ministro de Defensa?¿Qué hará el Frente Amplio, si pone de super ministro de Producción a José Mujica, que no puede emitir una frase sin decir una palabra incorrecta?.
El proyecto de país de la coalición de izquierda no es nuevo( ni remotamente) tiene más de un siglo. José Batlle y Ordóñez, sí el "Pepe"Batlle, o el hombre del sobretodo, como gustan insultarlo la gente de izquierda, fue mucho más populista que el Frente Amplio; pero el Uruguay tenía muchísimos más recursos, y no sólo económicos sino humanos; dónde la política era una profesión honorable y honorables eran los hombres que hacían política; a tal punto que preferían el ostracismo político y social a marchar en contra de sus convicciones.
Ahora se juntan una serie de políticos, de convicciones lejanamente convergentes, y forman una coalición con grandes posibilidades de ganar el poder. Y es posible que sí lo hagan porque la mayoría de sus votantes, eran lactantes cuando las cosas se pusieron espesas, y no tienen la más vaga idea de quien fue el Presidente Bordaberry, ni que fue el Pacto del Club Naval, y ni siquiera quién fue el primer Presidente electo luego de la dictadura......apenas si saben que hubo una dictadura!!!!!
Ahora, yo me pregunto, de llegar al poder la coalición de izquierda ¿cómo van a gobernar?, porque si estando en la oposición no se ponen de acuerdo en el 90% de las cosas, cuando haya que tomar decisiones duras y rápidas en el 7º piso del Edificio Libertad, ¿se reunirá la Mesa Política y discutirá "ad etaerum" como lo hace ahora?.
Y otro aspecto, por cierto muy importante, son las relaciones con nuestros vecinos.¿Que harán?. Seguiremos en esta farsa burocrática que es el Mercosur?.¿O tal vez tengamos un idilio con Argentina¿("Vade retro")¿O viraremos hacia Brasil?¿O hacia la República Bolivariana de Venezuela, con ese Presidente avalado por un plebiscito fraudulento gracias a Gaviria y a Carter? o tal vez volvamos a venderle charque a Cuba, que nos debe los embarques de hace 25 o 30 años?.
Por cierto que Estados Unidos, aparte que Bush y Kerry parecen ignorar la existencia de tierra al sur del Río Grande, es un mercado que ni se nombra, no sea cosa que nos contaminemos de libertad. Por otro lado Europa parece no existir, ni les damos corte ni ellos nos tienen en cuenta; y por el lado del lejano oriente tampoco dicen nada ya que también existen focos de liberalismo.
Pero de las cosas negativas, siempre se saca algo positivo; como dicen por aquí: "la patria se hizo a caballo" y yo agrego "la patria la hicieron los blancos y los colorados a caballo"; nos peleamos, tuvimos guerras civiles, hubo horrendos episodios en nuestra historia, pero siempre las cosas terminaron "sin vencidos ni vencedores", pero eran blancos y colorados: hombres de palabra, honor, coraje, valentía y sobre todas las cosas hombres que siempre honraron su palabra, aunque en ello les fuera la vida.
Y si nos tenemos que ir pa' las cuchillas.... nos iremos pa' las cuchillas!!!!!
Alvaro Kröger