" Haz de Internet una gran plataforma de comunicación, no la conviertas en una cloaca de maldad" preHacker.Hacker Digital.
Año II - Nº 74 - Uruguay, 16 de Abril del 2004

El huevo de la serpiente
Comentando sobre lo expuesto por "Euromoney"
Novillos del Uruguay a la Isla Martín García
Sobrevolando la realidad
Camino de los Indios
Largaron!!!!! Sujétense!!!!!
Ojos uruguayos en Brasil
Detectores de terremotos

Anécdotas Bancarias: Coincidencia

Sucedió en España
Durazno apuesta al retorno de los uruguayos
Intendencia aprueba proyecto del Rotary Club
Así Somos
Hurgando en la web
Globalilzación
Globalización: identidad e integración
Celia Cuesta Rosales expone en la sala CentrA Almería
Chairando Ideas
Ecos de la Semana
Una introducción a la investigación de la Fé y la Religiosidad
Ahora sí, se acabaron las excusas, a trabajar
Un dilema permanente
Más que un abismo
La Cocina Uruguaya
Rincón de Sentimientos
El Interior también existe
Olvidémonos de las Pálidas
Las Locuras de El Marinero
Correo de Lectores

 

 

UNA INTRODUCCIÓN A LA INVESTIGACIÓN DE LA FE Y LA RELIGIOSIDAD
Por Marcos Temesio

SEGUNDA PARTE:

De acuerdo al Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano, la fe es la primera de las tres virtudes teologales, es una luz y conocimiento sobrenatural con el que sin ver, creemos lo que Dios dice y la Iglesia nos propone.
Es el testimonio o certificación que se da de ser cierta una cosa; es el buen concepto y confianza que se tiene de una persona o cosa; es la palabra que se da, o promesa que se hace a uno con cierta solemnidad o publicidad; es la convicción en que se halla una persona de que hace o posee alguna cosa con derecho legítimo.
En teología se toma en distintos sentidos, y puede significar la fidelidad en las promesas, las promesas mismas, el dictamen de la conciencia, la confianza y el asentimiento de nuestra razón por la autoridad del que habla.
La fe teológica es aquella que cree todo lo que de cualquier modo ha sido revelado por Dios y se diferencia de la católica, que cree todo lo que propone la Iglesia como divinamente revelado, por lo cual se comprende que toda la fe católica es teológica pero no viceversa.
El sujeto de la fe es el entendimiento y su objeto lo verdadero, pero tiene cierta intervención la voluntad, porque como dice San Agustín, "nadie puede creer sino queriendo".
Según el concilio de Trento, es el principio de la salud, el fundamento y la raíz de toda justificación, porque en el orden de las virtudes sobrenaturales es la primera de todas, ya que todos, hasta los herejes e infieles, reciben de Dios las gracias suficientes por las cuales pueden disponerse a la fe.
Existe una pretendida contradicción entre la fe y la ciencia, que los teólogos han tratado de combatir extensamente, sosteniendo que la fe no excluye los conocimientos racionales, sino que por el contrario los admite y se sirve de ellos para remontar su vuelo. Partiendo de los resultados científicos, y poniendo a sus servicios las mejores fuerzas de la inteligencia, ha creado por si misma una ciencia.


El concilio Vaticano dice en su constitución que hay dos órdenes de conocimientos diferentes: por su principio, porque en uno de esos órdenes conocemos por razón natural y en el otro por fe divina; por su objeto, en cuanto que además de aquellos puntos a que puede alcanzar la razón natural, se proponen a nuestra creencia misterios escondidos que no pueden ser conocidos si no son divinamente revelados.
Esta fe que mueve montañas, independientemente del credo de cada una de las personas, ha tenido sus altibajos con el correr de la historia por los acontecimientos buenos y malos que han sucedido y que han provocado que el hombre analice su potencial una y otra vez para reafirmar su condición y poder construir un futuro mejor.